domingo, 31 de mayo de 2015

Cambio de foto: “Paseo a la orilla del mar”, de Sorolla


Cambio la foto que puse en la pestaña M&MB, Dona llegint/ Mujer leyendo, de Isidre Nonell es sustituida por Paseo a la orilla del mar, una de las obras más representativas de Sorolla. Muy apropiada ahora que viene el calor y el veranito está ya al caer. El caloret, que diríamos en un macarrónico valen-llano.

Joaquín Sorolla y Bastida (1863-1923) es un pintor de estilo impresionista. Aunque tiene algún cuadro más socialmente comprometido, se tiró a lo fácil, a lo encantador, a escenas un poco folclóricas y retratos de la gente pudiente. Oye, que tenía una familia que mantener y aquí hay que ser prácticos. Personalmente, me gustan sobre todo esas escenas a orillas del mar, en la playa, un sitio que para mí es sinónimo de relajación, satisfacción y calma, momentos de felicidad.

A quienes vivan o se pasen por Madrid, les recomiendo visitar la Casa-museo Sorolla. Se pueden ver bastantes obras suyas, su estudio, y las habitaciones en que vivió él con su familia, que están conservadas más o menos como en su época. Es muy ilustrativo de cómo podía vivir bien, en un palacete, a principios de siglo, un pintor de éxito. Además, tiene un jardín un poco de inspiración andaluza en el que puedes sentarte a leer un rato, oyendo el murmullo del agua, el viento en los arbustos. Yo lo hice la última vez que estuve de turismo y realmente te olvidas que estás en pleno centro de Madrid.

Sorolla murió en Cercedilla el 10 de agosto de 1923.

sábado, 30 de mayo de 2015

Crítica: "Secretos en Londres", de Julia Quinn



Vaya semanita más decepcionante que llevo. Para el mes que viene, seguro que la cosa remonta. 

La última novela de Julia Quinn de este desafío AAR.

Me despido en plan Sonrisas y lágrimas


 Cuando Fredrick canta
Adieu, adieu
To you and you and you

… Mi cabeza se iba despidiendo con toda la alegría de mi corazón de los Bridgerton, los Bevelstoke, y los Smythe-Smith.
 
DATOS GENERALES
Edición de bolsillo
Avon Books paperback
Julio 2009

Título original: What Happens in London
Fecha de publicación original en inglés: 2009
Subgénero: histórica – 1821
Puesto en la lista AAR 2013: 44

Parte de una serie: Bevelstoke #2

Traductora para la edición 5/2011 de Titania: Marta Torent López de Lamadrid
 
SINOPSIS (de la contraportada)

Rumores y cotilleos…

Es lo que da vida a Londres

Cuando le cuentan a Olivia Bevelstoke que su nuevo vecino podría haber matado a su prometida, no lo cree ni por un momento, pero, aún así, ¿cómo puede evitar espiarlo, tan sólo para estar segura? Así que se monta un puesto de vigilancia en la ventana de su habitación, hábilmente oculta por las cortinas, mira, y espera… y descubre a un hombre de lo más intrigante, que definitivamente está metido en algo.

Sir Harry Valentine trabaja para una aburrida rama de la Oficina de Guerra, traduciendo documentos vitales para la seguridad nacional. No es un espía, pero tiene formación como tal, y cuando una despampanante rubia empieza a vigilarlo desde su ventana, inmediatamente despierta sus sospechas. Pero justo cuando decide que no es más que una debutante irritantemente curiosa, descubre que ella podría estar comprometida con un príncipe extranjero, que podría estar tramando algo contra Inglaterra. Y cuando Harry tiene que espiar a Olivia, descubre que podría estar enamorándose de ella él mismo…

CRÍTICA

Esta novela se ambienta en 1821, año del fallecimiento de Napoleón. No es la Regencia, porque el Príncipe Regente subió al trono el año anterior.

En el prólogo te relatan la infancia de Sir Harry, con un padre alcohólico. Parece algo trágico, pero la autora no puede evitar hacer un chiste de ello. Fondo y forma no casan. Como si te notificaran el embargo de tu casa con letra comic sans. Le ves la gracia donde yo te diga.

La protagonista, Olivia, es una joven de buena familia, muy guapa pero sin ningún talento especial. Su vida se centra en leer el periódico, cotillear con sus amigas, bailar por los salones y rechazar ofertas de matrimonio.

A ver cómo os lo digo. A esta muchacha le regalan un libro y se queda mirándolo como si buscase el manual de instrucciones. Decide que la mejor manera de empezarlo es tirarlo a ver por qué página se abre.

Así que, por razones que se me escapan, cuando le cotillean que su nuevo vecino ha matado a su prometida, decide espiarlo. Because –things.

Él se da cuenta y la vacila un poco. Cuando se conocen más en persona, no se gustan demasiado. Pero no pueden evitar pensar todo el rato el uno en el otro.

La llegada a Londres de un príncipe ruso que podría estar implicado en asuntos contrarios a los intereses geopolíticos del Reino Unido obliga a Harry a prestar más atención a esta cabeza hueca.

De la sinopsis podrías deducir que el guapo y rico Sir Harry se dedica al espionaje. Pero no. Es traductor de francés y ruso. Aunque tampoco es que esto sea particularmente trascendente en la trama. Añado: los rusos de la novela me parecieron un auténtico cliché.

Fui incapaz de sustraerme a la impresión de que sus personajes son adolescentes estadounidenses del siglo XXI disfrazados. Al anacronismo en actitudes y pensamientos, se le unen concretas inexactitudes, como que en un colegio británico jugaran al rugby más o menos en torno a 1800-1810, cuando la historia atribuye el nacimiento de este deporte a William Webb Ellis, quien en 1823, ignorando la más elemental regla del balompié, cogió la pelota con la mano. A quienes amamos ese deporte (el rugby, no el fútbol) cosas así nos sacan totalmente de la historia.

El sencillo estilo de Julia Quinn, con mucho diálogo y poca reflexión, hace que sea fácil de leer. La trama de espionaje le dio un poquito de vidilla al principio de la historia. Pero lo que empezó entretenido acabó convirtiéndose (para mí) en un pestiño. La cosa al final no va de espías. Pronto entra en la vereda del sainete y acaba ***spoiler*** con un episodio tipo “damisela en peligro” que si me dicen que la escribió la Woodiwiss en los setenta (o un guionista del Hollywood de los años veinte), me lo creo. ***fin spoiler***

Me arrastré penosamente hasta el final, hundida en un agujero negro de absoluto desinterés.

No es que esperara que la autora, de repente, se convirtiera en Mary Jo Putney o Joanna Bourne y escribiera algo de espionaje con sustancia. Pero sí creí que encontraría un libro diferente a las liviandades Bridgerton. Y no.

La leí en inglés, en papel de segunda mano a un precio fantástico, eso sí. Así que no sé cómo estará la traducción.

Y con esta novela, me despido de Julia Quinn, más feliz que los Trapp diciendo Auf Wiedersehen.

A continuación, mi carta de despedida:


Estimada Sra. Quinn:

Tiene  usted un gran talento para la parodia. Como eso de copiar títulos de películas. Aquí Lo que pasa en Las Vegas se transforma en Lo que pasa en Londres (título original). Viene de una frase hecha según la cual toda la conducta inadecuada, generalmente de carácter sexual, que uno desarrolla en Las Vegas ha de quedarse allí. Es decir, que no hay que darle importancia cuando vuelves a su vida normal.

Una expresión que debe resultar chistosa en un contexto USA. A este lado del Atlántico, no tanto.

Esta costumbre de “homenajear cosas ajenas” se nota también en que escoge usted, como planteamiento inicial de la historia, la trama de La ventana indiscreta de Hitchcock y le da un curioso giro. Es una pena que no lleve el misterio y el suspense más allá. En cuanto se aparta del modelo, mi entusiasmo se quedó cual velero en el mar de los Sargazos en plena calma chicha.

El problema es mío, lo sé. Carezco de los receptores cerebrales adecuados para pillar este humor tan físico, tan slapstick. Y sólo veo que no tiene ningún sentido en la Inglaterra de principios del XIX.

Le envidio, desde luego, que tenga amigas como Jill Barnett, capaces de decir que usted es la auténtica Jane Austen de nuestros días. O críticos tan benévolos que la comparen con Georgette Heyer.

Después de leer seis de sus mejores novelas, confirmo definitivamente que “no sos vos, soy yo”. Ya ve, hasta le regalo un título de película que puede usar en cualquiera de sus próximas producciones. No le pedirán derechos de autor, pues es también frase hecha.

Avíseme si alguna vez se pasa a la novela contemporánea (subgénero chick lit, o New Adult, preferentemente) y dedica su chistoso estilo la sociedad que la rodea en lugar de fantasear con otra cuya ética y estética le es totalmente ajena.

Me alegro de que tenga millones de lectores de todo el mundo. No echará en falta una lectora menos.

Atentamente,


B. C.


Valoración personal: Meh, ni frío ni calor, cero grados. 1

Se la recomendaría a: los fans de Julia Quinn.

Otras críticas de la novela:

Como de costumbre, mi experiencia personal no coincide con la de la mayoría, así que para encontrar críticas entusiastas de este libro, os dejo los siguientes enlaces. En español, El rincón de la novela romántica, Pasajes románticos a quien no le pareció, sin embargo, de lo mejor de la autora, y Book Eater.

En inglés, RT Book Reviews, en All About Romance incluso la consideran un DIK (libro que te llevarías a una isla desierta), en Dear Author, aunque le dan una B, es otra de las que encuentra esta novela “encantadora” y finalmente, Rosario’s Reading Journal, con una valoración A-, destaca lo divertidísimo que es este libro

De verdad, todo el mundo encuentra esta novela divertida, encantadora, etc. así que no os fiéis de mi experiencia personal

Sólo rascando el fondo del barril de la "crítica libresca", esto es, las valoraciones una estrella de Amazon.com, se puede encontrar algún pensamiento negativo sobre esta novela. Lo curioso es que hay más críticas de una estrella (15) que de dos (11). Me gustaron especialmente tres…

Sé exactamente cómo se sintió Olivia leyendo "Miss Butterworth and the Mad Baron". Sentí lo mismo leyendo "What happens in London" (L Burke, agosto de 2009)

Lady Olivia gateando por su habitación para esconderse me recordó bastante a Winnie the Pooh, y me temo que siguió siendo un osito de escaso cerebro (McKennaea "brindlereilly", agosto de 2009)

Lo intenté, de verdad, pero Oh Dios Mío, era como ver un show de Hilary Duff en el Disney Channel (Not Telling, abril de 2010)

Por último, la ficha en FictionDB

Otras novelas de la autora en el Desafío AAR:

AAR 16. The Duke and I / El duque y yo (enero 2000)   


Ediciones en España:

-       Secretos en Londres (2011) Titania
-       Secretos en Londres [Archivo de Internet] (2011) Urano

jueves, 28 de mayo de 2015

Crítica: "La chica de los ojos color café", de Lisa Kleypas


Este NO es un libro de la lista Top 100 AAR

… Ni creo que lo esté nunca, porque no tiene nada especial. Es… como un Harlequin alargado sobre un millonario pijo y una chica corriente.

Diseño de cubierta: Estudio Ediciones B
Imágenes: Ilina Simeonova /  
Trevillion Images y Thinkstock

DATOS GENERALES

Título original: Brown-Eyed Girl
Fecha de publicación original en inglés: agosto, 2015
Subgénero: contemporánea
Primera edición en Ediciones B, S.A. para el sello Vergara: mayo, 2015.

Traductoras: Ana-Isabel Domínguez Palomo y María del Mar Rodríguez Barrena.

Parte de una serie: 4.º de los Travis

Sinopsis de la contraportada escrita por un mono loco. Todo parecido con la realidad es pura coincidencia.

Una pista: He tachado lo que no tiene nada que ver con el libro

Avery Crosslin es una joven y talentosa diseñadora de moda de brillante futuro. Pero cuando la empresa para la cual trabaja cierra sus puertas, Avery se queda sin empleo y su novio decide abandonarla.

Poco después su padre cae enfermo, y ella permanece a su lado día y noche. Una de esas noches, conoce a Joe, un joven en apuros, y le ofrece su ayuda. A pesar de que ambos sienten una inmediata atracción mutua, cuando a la hora de marcharse él le pregunta su nombre y le pide su número de teléfono, Avery miente y le dice que tiene novio. A esas alturas de su vida, lo último que necesita son más complicaciones.

Al día siguiente, cuando Avery regresa al hospital para agradecerles a las enfermeras los cuidados prodigados a su padre, una de ellas le entrega un sobre de parte de Joe.

Avery quiere volver a ver a Joe, pero lo que descubre sobre él le produce una gran inquietud… ¿Será posible un futuro para ambos?

CRÍTICA

Lisa Kleypas estrenaba libro en español, y no me pude resistir a leerla y comentarla en mi blog, aunque las novedades no sean lo mío. ¡El libro ha aparecido antes en español que en inglés! Es la primera vez, en mi ya larga vida lectora, que veo que una traducción de un libro se publica antes que el original.

Relato en primera persona. Mal empezamos. Pero bueno, es el estilo que la Kleypas ha decidido para sus novelas contemporáneas. Así que...

Sigamos.

El misterio de la sinopsis. Quizá ese fue el planteamiento inicial de Lisa Kleypas. Pero no es en lo que ha terminado la historia. Me pasé todo el primer capítulo mirando cada dos por tres la contraportada. O sea, ¿dónde está el hospital, las enfermeras, el chico en apuros? ¿La diseñadora cuya empresa cierra? ¿Lo que descubre Avery de Joe que le produce gran inquietud?
La delirante contraportada

Olvidaos. La historia va así.

Avery tiene veintisiete años. Hace tres y medio su novio la dejó plantada en el altar. Así que es una ironía del destino que trabaje como organizadora de bodas. Sí, como Jennifer López en Planes de boda, o la estresada de la Blackberry en Para siempre de Nora Roberts.

La historia empieza cuando Avery acude a uno de estos bodorrios y se encuentra con un escorpión. ¡Eh, esto es Texas! Hay escorpiones y serpientes de cascabel, no sólo megamillonarios con casonas impresionantes. Encontrándose en esta situación de damisela en peligro, aparece Joe Travis al rescate.

Así se conocen. Se gustan, pero Avery está escaldada por cómo la abandonó su novio, así que no tiene especial interés por los hombres. Y eso que su hermana y Steven, uno de los trabajadores de su empresa, le incitan a ello. Avery dice:


-       No es mi tipo.
-       Es rico, soltero y un Travis –puntualizó Steven con sorna-. Es el tipo de cualquiera.


Al final, Avery se deja llevar por las hormonas. Pero no quiere mantener una relación seria, por miedo a que la vuelvan a romper el corazón.

Tengo como lema no hablar de nada que ocurra más allá del primer tercio de la historia, por aquello de no destripar el asunto. Así que resumo: toda esta primera parte me sonó totalmente como una novelita de Harlequin sobre chica trabajadora que entra en un mundo de pijos que pretenden que son “gente normal”. En plan “Por el amor de un potentado texano” o “En brazos del jeque superrico” o “El billonario griego y yo”. Escena tras escena, te describen cómo viven los ricos, esos que son capaces de gastarse millones de dólares en organizar bodas.

Hay incluso uno de esos “momentos makeover” de compra de ropa nueva y maravillosa con la que de repente la heroína se transforma de patito feo con sobrepeso en cisne. Que esa es otra. Desde el principio te cuentan que es una chica con curvas: sus caderas, su culo, su pecho. Lo normal. Viste ropa amplia aunque su hermana le dice que ponga cosas más ceñidas. Por un momento piensas que es una chica gordita, ¡y luego resulta que usa una 40! La talla media en España. En un país con epidemia de sobrepeso como Estados Unidos, me imagino que las de una 40 hasta les pareceremos delgadas. Paréntesis que oí el otro día en un documental: hasta hace dos décadas, las modelos usaban una talla 38. Sólo la enfermiza obsesión por una delgadez imposible (y conseguida con Photoshop la mayor parte de las veces) hace que ahora se exija a las modelos tener una 34. Cierro paréntesis.

Total, que mucho makeover, makeup y peluquería, pero se olvidan de que la ropa no es sólo un vestido mono, sino los zapatos a juego, el bolso, los complementos, con qué collar o pendientes van las cosas, etc. Y que muchas veces acaba costando tres veces más el zapato correcto que el vestido verde agua con pedrería.

Llegado este punto, nada me sonaba a Lisa Kleypas. Pero eso me ha pasado con sus otras novelas contemporáneas. Y, al fin y al cabo, el planteamiento Harlequin tiene su punto. Seguí leyendo, me olvidé de que se suponía que “esto” lo había escrito ella y ¡a pasar el rato!

Luego aparece un perro. Y yo me dije, “chica redondita y perrito, ¿no le habrá dado ahora por darle un toque Jennifer Crusie?” No, en cuanto vi que le estaban pintando las uñas a la perrita me dije, ni hablar, Jenny nunca haría algo tan ridículo.

Como SEP, incluye una historia de amor secundaria, la de la medio hermana de Avery. En plan “te odio pero no puedo evitar desearte, maldita sea”. Había momentos en que interesaba más que la de Joe-Avery. Y, de la misma manera, el único momento de auténtica emoción me lo proporcionaron Hardy y Heaven.

Total, que burla burlando, llegué al final en que Joe y… ¿cómo se llamaba? ¡Ah, sí, Avery! acaban juntos y felices.

A mí me parece que el principal problema de este libro es que pone Lisa Kleypas en la portada. Lo mejor sería ignorar este hecho y disfrutarla como una simple novela romántica contemporánea de amor y lujo, con su dosis de vida fantasiosa entre millonarios y escenas muy sensuales. Y rien de plus. Si os ponéis a pensar en las maravillas que ha escrito Lisa Kleypas, o en las otras de la serie Travis, entonces, por comparación, parecerá más bien flojita.

P.D. 1: Personalmente, hubiera preferido mi versión fan fiction male/male romance que ya conté aquí entre Joe y Todd, el amigo de Haven. Por lo menos, habría sido una novela diferente.

P. D.2: Me alegro mucho de comentar libros que compro y pago. Así no tengo que quedar bien con la editorial. Puedo decirlo: los 16,63 € que he pagado por esta novela sólo merecen la pena si eres fan de la Kleypas (como es mi caso) o quieres una historia sencillita que no te haga sufrir nada de nada.

Valoración personal: para ser de Kleypas, 2

Se la recomendaría a: fans de la Kleypas y aficionados a la novela romántica contemporánea, especialmente en la variedad “de amor y lujo”.

Otras críticas de la novela:

Como de momento sólo está publicada en español, por esta vez sólo pongo enlaces en nuestro idioma.

A algunos les ha gustado



Y en Romántic@s al horizonte, con un par, le cascan 5 estrellas

Y a otros, no tanto

En el foro ¡¡Ábrete libro!! la esperaban desde hace meses, las opiniones no son muy, ejem, entusiastas.

Los Libros de Mabel opina que Lisa Kleypas “se ha lucido”, y es la misma que encontramos en El rincón de la novela romántica.

27/06/2015: Nota para mi. Acabo de descubrir que esta portada de Vergara ha usado la misma foto que Stephanie Evanovich (ojo, no Janet, sino Stephanie) en la versión tapa dura de su libro de 2014 The Sweet Spot, ¿casualidades, coincidencias?