sábado, 29 de junio de 2019

Crítica: “El príncipe de mis sueños”, de Lisa Kleypas


Una novela un poco desgalichada


DATOS GENERALES

Título original: Prince of dreams
Subgénero: histórica / 1877
Fecha de publicación original en inglés: 1995
Parte de una serie: Stokehurst #2


1.ª edición en España

Traductor: Albert Solè
Fecha Edición: 10/2006
Publicación: B de Bolsillo (Ediciones B)
Colección: Zeta romántica 2147/5


SINOPSIS (según la contraportada)

Nikolas, un hombre esquivo y de carácter belicoso, vive un exilio dorado en Inglaterra. Solitario y alejado del mundanal ruido, en realidad no esconde que desearía poseer un don especial con el que conquistar a una dama. Sin embargo, sólo consigue ganarse el amor de la caprichosa Emma con perseverancia, tenacidad e incluso graves amenazas. En un primer momento, el amor de Emma no produce ningún cambio en el corazón de hielo del príncipe exiliado. Sólo con el nacimiento de una súbita pasión amorosa Nikolas logrará modificar su atormentada naturaleza. Y de repente, el huraño príncipe será capaz de rememorar sus antiguas épocas de esplendor y romanticismo. Su destino permanecerá en vilo… en manos de la ternura de una mujer especial. Porque, a partir de ahora, Nikolas deberá encontrar el éxtasis que siempre eludió… y, en definitiva, aprender a amar.

¿Entra dentro de “Lo mejor de la novela romántica”?
Entraría como mucho entre las mejores entre las 10.000-20.000 mejores, por aquello de que estaba en la lista de RomanceNovels.Me entre las mil mejores, en el puesto 229.


CRÍTICA

Esta es la segunda novela del dúo «ruso» de Kleypas. Ocurre unos siete años después de la anterior, Ángel de medianoche.

La niña Emma ya ha crecido y se ha convertido en una joven un poco extravagante. Alta, pelirroja, más cómoda cuidando de sus animales que en el salón de baile, está un poquito acomplejada por todo ello. Sabe que no es una dama modelo. Por eso, a pesar de tener una buena dote, no ha gozado de demasiados pretendientes.

Probablemente es por eso por lo que se siente enamorada del único tipo que le hace caso y dice que la ama. A ella y a su dote, lo reconoce. Para su padre, él no es más que un cazafortunas y se opone al matrimonio, lo cual desespera a Emma.

Lo que no sabe es que es objeto de un intenso deseo del posesivo Nikolas Angelovski, primo lejano de su madrastra y que vive en el exilio en Inglaterra.

Este riquísimo aristócrata ruso tiene una fijación con ella desde que la conoció, siendo una cría. Teniendo en cuenta que por entonces Emma tenía doce años, sí, rechina bastante el toque pederasta de Nikolas.

En Rusia cometió un crimen, lo detuvieron y torturaron y acabó en un dorado exilio. Es un hombre que desconfía de todos y aparta de sí mismo a cualquiera que pudiera tocarle el corazón.

Ahora, el hecho de no poder, o no saber, o no querer, amar a nadie, no le impide ansiar apasionadamente a Emma, y hacer lo que sea para que sea suya.

Acabará casándose con ella. Emma acepta porque hasta la fecha se han llevado bien, y él le ofrece libertad. Sabe aprovecharse de un momento de debilidad. Lo que ocurre es que, mira que se lo han advertido, que Nikolas es un egoísta que sólo piensa en sí mismo, que la traerá por el valle de la amargura…

Nada, Emma es bastante cabezota y se le mete entre ceja y ceja casarse con él. No tardará en desengañarse un poco, y sufrir en su matrimonio.

Luego pasan más cosas, metiendo asuntos diversos como un niño o el toque paranormal con viaje en el tiempo incluido Al final el conjunto de la novela me dio la impresión de algo desordenado, metiendo cosas diversas que no cuajan bien del todo.

Es una de esas novelas viejunas de Kleypas que no recomendaría salvo que quieras leerte todo lo suyo. Tiene de bueno esa forma tan magnífica de escribir que te tiene bien entretenida de principio a fin.

El aspecto sensual está, como prácticamente siempre, logradísimo, ¡qué bien se le dan las escenas eróticas a Kleypas!

Pero luego tienes otros problemas. El primero, el que los personajes acaban no cayéndote del todo bien. Nikolas aparece como un príncipe frío, que calcula muy bien cómo seducir y hacerse con Emma, pero luego cuando la tiene donde quiere, como su esposa, en su cama, fuerza el distanciamiento entre ellos, casi haciendo que ella le coja manía haciendo cosas detestables. Y todo porque no soporta la idea de intimar con ella, de que alguien se acerque a su corazón.

Luego Emma es otra de esas heroínas que parecen la versión deforme de heroínas extravagantes, como en el futuro serán, mucho más logradas, Beatrix Hathaway (Amor en la tarde) o Pandora Ravenel (El diablo en primavera).

No parece muy espabilada, se mantiene obsesionada por un cazafortunas demasiado tiempo, luego cambia, pragmáticamente se casa con quien considera que es un amigo, Nikolas, y luego le coge odio, y después se declara enamorada,… No sé, de verdad, parece poco lista, y eso no es algo bueno en una heroína romántica.

Esta es una de las novelas de Kleypas en las que más dividida puede estar la peña. Todo depende de cómo te tomes a los protagonistas. Muchos se verán incapaces de sentir la menor simpatía por los protagonistas. Pero si te gustan, y sientes empatía por ellos, entonces posiblemente disfrutes mucho de la novela.

Valoración personal: mñé, 2

Se la recomendaría a: los amantes de las históricas con toque viaje en el tiempo.
 
1/1995, Avon
Otras críticas de la novela:

Como casi siempre, empiezo con las críticas en español.

Rasaosvi, que firma la crítica del El rincón de la novela romántica, dice que le ha encantado y que es una de las que más le gusta de Kleypas (para que veáis que cada lector es un mundo). 

Sin libros no soy nada hace una crítica conjunta a los dos libros de esta saga, y no le han gustado. 

8/10 le dan en el blog Ilusionistas de la lectura

Paso al inglés:

4.25 estrellas le dan en Book Binge. 

3 ½ estrellas mereció para The Hope Chest Reviews

Por último, si os acordáis, en Smart Bitches hicieron un post con mini-reviews de los primeros libros de Kleypas.  Este obtiene una B, que le gustó, pero que no se esperaba el elemento de viaje en el tiempo.

jueves, 27 de junio de 2019

Crítica: “Autoboyography”, de Christina Lauren


Dos chavales majos enamorándose en medio del fanatismo


DATOS GENERALES

Título original: Autoboyography
Subgénero: juvenil/gay

Fecha de publicación original en inglés: 2017

NO TRADUCIDA AL ESPAÑOL

SINOPSIS (según Fiction Data Base)
Hace tres años, la familia de Tanner Scott se trasladó desde California a Utah, algo que metió de nuevo al adolescente bisexual en el armario. Ahora, cuando solo le queda un semestre de instituto y ningún obstáculo entre él y la libertad de una universidad fuera del estado, Tanner planea pasar fácilmente las clases que le quedan y largarse de Utah.
Pero cuando su mejor amiga Autumn le desafía para que entre en el prestigioso seminario de Provo High –donde los mejores estudiantes diligentemente se esfuerzan en escribir un libro en un semestre–, Tanner no puede resistirse e ir contra su mejor juicio y darle una oportunidad, aunque sea para demostrar a Autumn lo tonto que es todo. Escribir un libro en cuatro meses suena sencillo. Cuatro meses es una eternidad.
Resulta que Tanner tiene razón solo en parte: cuatro meses es mucho tiempo. Después de todo, le basta un solo segundo para fijarse en Sebastian Brother, el prodigio mormón que vendió su propia novela escrita en el seminario el año anterior y que ahora es mentor de la clase. Y en menos de un mes, Tanner se enamora perdidamente de él.

NO TRADUCIDO AL ESPAÑOL

¿Entra dentro de “Lo mejor de la novela romántica”?
Sí, este libro entró mi lista de Las mil mejores novelas románticas, en la edición de 2019, en el puesto 441. Tuvo unas críticas fabulosas: DIK A, 5 estrellas en Joyfully Jay, Just Love, Scandalicious y We So Nerdy, por ejemplo. Es también uno de los favoritos de Natasha is a Book Junkie.

CRÍTICA

Con esta novela juvenil, casi NA, acabamos el reto 12 meses 12 boas propuesto por Elsa y A la cama con… un libro.
La historia nos la cuenta (casi entera) en primera persona Tanner, un chaval que vive en Utah, en una sociedad y un instituto mayoritariamente mormón. Se trasladaron allí desde California por motivos laborales de la madre, y eso ha exigido ciertos ajustes en su vida. Por ejemplo, que el bisexual Tanner se vuelva al armario para tener la fiesta en paz en un entorno tan conservador.
Tanner lo sobrelleva, más o menos. Hasta que se encuentra con Sebastian, un chico un año mayor que él, hijo del obispo y perfecto mormón, de esos muy educados, pulcros vistiendo, y que va a publicar su primer libro.
Duda de si el flechazo inmediato que él ha sentido, esa atracción, ese «vivo sin vivir en mí, no hago más que pensar en él»… ¿es cosa suya o el otro también lo ha sentido?
Y en esta duda se desarrolla todo el primer tercio de la novela. Considerando que no me gusta hablar de lo que pasa más allá de ese punto, por no destripar, poco más puedo decir del argumento.
Baste decir que Tanner es queer y más bien agnóstico, mientras que Sebastian pertenece a una religión en la que «tolerancia» se entiende en plan «miro a otra parte si solo eres gay, pero si además actúas como gay, entonces corto contigo», y en ese corto contigo está los amigos, la familia, la comunidad entera. Así que plantearse tener algo con alguien de esa religión es un poco locura, la verdad.
Yo estaba leyendo y la ambientación simplemente me dejaba alucinada. Era como si te estuvieran hablando de otro planeta, como si fuera una realidad paralela de esas de La invasión de los ultracuerpos o Las poseídas de Stepford,, o sea, son cuerpos humanos, pero dentro no hay más que alienígenas o robots, todos extremadamente educados pero completamente ajenos a cualquier realidad de la vida.
Un entorno de lo más asfixiante, la verdad.
Se hace muy cuesta arriba que haya sitios así de verdad y no haya una auténtica lucha por liberar a los niños de ese fanatismo. Me ha comentado mi hija que, al parecer el mayor número de suicidio juvenil en chicos LGBT se da precisamente en Utah, y no me extraña.
Eso te da la idea de lo lograda que está la ambientación, para que pueda agobiarte tanto. Han sabido trazar muy bien los personajes, especialmente los principales y sus familias; Autumn, la mejor amiga de Tanner es un poco más tópica, solo aparece como caja de resonancia de Tanner, sin ser un personaje propio.
El argumento se desarrolla más bien despacio.
El estilo me dejó algo descolocada. La mayor parte lo cuenta Tanner en primera persona; se supone que es el libro que él está escribiendo. Por otro lado, al final, pasa a narración en tercera persona.
Dos cosas me despistaron. Primero, que tanto cuando se supone que escribe Tanner como después, se usan las mismas palabras, idéntico tipo de frase y de ritmo. No hay diferencia de voz narradora entre un chaval de dieciocho años y las escritoras.
Segundo, se supone que es el libro que él está escribiendo, y no me parecía nada especial. Viene a ser «el diario de mi enamoramiento de un mormón», ¿y…? ¿Dónde está el mérito artístico que otros le encuentran?
Tenía esta novela pendiente de leer prácticamente desde que salió, tras leer críticas estupendas. Estaba carísima y por eso no la he leído hasta este reto, cuando no me ha quedado otra que apoquinar más de 10 euros en el e-book. En mi opinión, no los vale, ni de lejos, salvo que te vayan mucho este tipo de historias juveniles queer.
Aunque esto, como todo, es una apreciación subjetiva. Cada lector somos un mundo.
No tiene nada que ver con las otras cosas que he leído del dúo Christina Lauren. Aquello era erótica divertida y con personajes planos como lenguados; esto es literatura juvenil con poco sexo, a cambio de un estudio psicológico mucho más fino de los personajes.
Reconozco (y esto es algo puramente personal) que, como no me interesa la religión, leer sobre personajes creyentes me aburre bastante; y si encima son de esos que no solo se amargan la vida a ellos, sino que también se la amargan a los demás…Ya, mátame camión.
La última vez que me apasionó un personaje con dilemas religioso-morales como los que se plantean aquí, creo que fue Ed Harris en El tercer milagro (1999). Ya ha llovido.
Y porque era Ed, claro, uno de mis actores fetiche.
Con todos los caveats del mundo, puedo decir que lo he disfrutado y me ha gustado mucho. Creo que si eres religioso le pillarás más el gusto. Si eres joven y queer, necesitas este tipo de historias. Es fabuloso que las escriban.
Lo recomiendo, aunque mejor esperas a que baje un poco de precio.
Valoración personal: buena, 3

Se la recomendaría a: jóvenes LGBT

Otras críticas de la novela:

En español tenemos la crítica de Zona Ravenclaw
Y los 5 Gandys que le dan en A la cama con…un libro
En inglés, logró un DIK A en All About Romance.
5 estrellas merece según Joyfully Jay, Just Love, y en We So Nerdy.


               

Con esta novela termino el reto 12 meses 12 pares de boas. Resumo a continuación los libros que había que leer, con enlace a mis críticas (si las tengo).
1. Roan Parrish: In the middle of somewhere  🌟🌟🌟
2. Jude Sierra: What it takes 🌟🌟🌟🌟
3. Alexis Hall: Glitterland 🌟🌟🌟🌟
4. Dal McLean: Bitter legacy. Esta ya la había leído antes, 🌟🌟🌟🌟  así que la sustituí por una de Cat Sebastian, A gentleman never keeps score 🌟🌟🌟
5. Suki Fleet: Foxes. Este es el único que no leí, porque no pude conseguirla a un precio razonable. Todavía la tengo pendiente. La sustituí por Infamous, de Jenny Holiday, que en cualquier caso es más de mi gusto 🌟🌟🌟🌟🌟
6. Anyta Sunday: Leo loves Aries / Leo quiere a Aries 🌟🌟🌟🌟
7. Claire Davis & Al Stewart: The invasion of Tork 🌟🌟🌟
8. Garrett Leigh: Slide 🌟🌟🌟🌟
9. Joanna Chambers: Provoked 🌟🌟🌟🌟
10. Eli Easton: The mating of Michael 🌟🌟
11. Nash Summers: Arrows through Archer 🌟🌟🌟 
12. Christina Lauren: Autoboyography 🌟🌟🌟

Ya se ve que, en general, me han gustado. Elsa, que ha propuesto el reto, tiene ojo para novelas realmente bien escritas. Admito que mi gusto personal tiende a cosas menos tristonas. Creo que seguiré leyendo a Joanna Chambers y, quizá, a Anyta Sunday.
Gracias por organizar este reto que me ha servido para descubrirlas, y enhorabuena por descubrirnos tanto male/male romance de calidad.
En el lado negativo, y esto no tiene nada que ver con Elsa, me he percatado de que me incomodan un poco estos challenges de títulos concretos: este mes toca este libro. Me adapto mejor a retos abiertos, en que proponen un tema o un autor, y yo ya me busco lo que quiero leer. 

martes, 25 de junio de 2019

Reto Rita 3: LaVyrle Spencer (4) Reencuentro


Una novela francamente detestable, y que tiene de romántica lo que yo de monja


Título original: Home Song
1.ª ed.: Putnam, enero de 1995
Subgénero: sentimental

1.ª ed. En España
Traductora: Ana María Rodríguez
Fecha: 1997
Editorial: Plaza & Janés Editores, S. A.
Colección: Cisne, 37/1

Tom y su esposa Claire; profesores de un colegio en Minnesota, son un matrimonio ejemplar. Sin embargo, su felicidad se verá turbada dramáticamente. La inesperada aparición de Mónica, una ex amante de Tom, y su hijo Kent, desestabilizará su perfecta existencia conyugal y afectará la vida de todos los involucrados. El parecido del joven Kent con Tom es sorprendente, y para enrarecer aún más las cosas, el joven traba una estrecha amistad con la hija de Tom y Claire...

¿Entra dentro de “Lo mejor de la novela romántica”?
No.

CRÍTICA
Termino el mes de LaVyrle Spencer con este libro que andaba por casa.
Veo la etiqueta de Fnac Callao, con fecha 11/08/1997 y precio de 926 pesetas. ¿En euros…? 5,57 €. De cuando Fnac tenía como un paraninfo en el que te podías sentar y leer cómodamente.
No recordaba nada; es de las que he leído como si fueran nuevas. Me ha resultado francamente horrenda.
Primero, esto no es romántica, es sentimental. Ni siquiera es uno de esos tópicos «matrimonio en crisis» que puedes entender más o menos. Es más bien, ¡teleflín! ¡Puro teleflín!
(No, en serio, literalmente, hasta hicieron una peli para televisión en el 96, aquí, el enlace a IMDB)
Tenemos a la familia perfecta: papá Tom y mamá Claire, profesores de instituto, y sus dos hijos, Robby y Chelsea. Llega un alumno nuevo, ¡y es clavadito a papá Tom!
Sí, tiene un hijo de 17 años y no lo sabía. Ha sido educado por mamá soltera Mónica, de quien Tom nunca supo nada más desde aquella única vez que follaron sin protección.
Se llama Kent Arens y es perfectamente perfecto: guapo y alto, con notazas y excelente en los deportes, muy bien educado y respetuoso con sus mayores. O sea, el chico I-DE-AL.
Es un palo descubrir de repente que tienes un hijo del que no sabías nada, pero es para enorgullecerse de lo buen chaval que es.
No sabe si tiene que hacerlo público o no. Pero cuando su hija Chelsea empieza a tontear con Kent y parece que este le corresponde, la cosa no puede tenerse callada.
Unos intentan que el proceso no sea traumático, sino para bien. Tom intenta hacer lo mejor para todos. Mónica, la madre soltera, también hace de tripas corazón y aunque hasta la fecha ha sido la única persona en la vida familiar de Kent, entiende que es positivo para su hijo tener ahora otra familia, medio hermanos, incluso un abuelo, un padre que lo pueda apoyar.
Aquí la desquiciada es la mujer de Tom, Claire, quien, a pesar de ser profesora de Kent lo detesta y no es capaz de ser objetiva con él. Creo que esa falta de profesionalidad es lo que más me indignó.
Es lógico que esté cabreada de que su novio la engañara hace dieciocho años. Y le lleve un tiempo aceptarlo. Pero vamos, sabía que su novio se tuvo que casar con ella porque la dejó embarazada, que el amor surgió luego. Él le reconoce ahora que se sintió atrapado, infeliz, y por eso tuvo un rollo de una noche. Han tenido casi dos décadas de amor y confianza, que la boba de Claire está dispuesta a tirarlo todo por la borda por sus intensos celos.
Aparte de darle un tortazo a su marido (la violencia doméstica me parece detestable) se le mete entre ceja y ceja que su marido tiene una aventura con Mónica, la madre de su hijo, cosa que no hay absolutamente ningún motivo para tener. Se monta la historia en la cabeza, y echa a su marido de casa sin intentar razonar como una persona adulta. 
De hecho, los hijos son los más normales. Kent, el tío absolutamente inocente de todo, es el más adulto de todos. Chelsea y Robby se resienten un poco, aunque es algo bastante normal, acaban imponiendo un poco de sensatez a su madre, y eso que ella hace todo lo posible por volver a sus hijos contra su padre y ¡mira lo que hizo a esta familia hace dieciocho años…!
De eso va la historia, básicamente: una mujer que está a punto de arruinar su matrimonio y a su familia, que incurre en una actitud poco profesional porque descubre que, cuando aún no estaban casados, su novio le fue infiel una noche.
Repito: entra dentro de lo normal la sorpresa, estar dolida, que se replantee cosas,… pero de ahí a reaccionar violenta e histérica va un trecho muy grande. Ahonda en el tópico femenino que más cuesta arriba se me hace, en la ficción y en la vida real: perdiendo los papeles y convertida en un bicho.
Así que, como veis, esto tiene muy poco de novela romántica.
Hay un tufillo conservador sin paliativos. Te vienen a decir que la mejor familia es la de un papá y una mamá, juntos y asumiendo cada uno los roles tradicionales. Aunque los dos trabajan, la casa la lleva Claire, por supuesto.
Así que lo del divorcio es impensable, pero no porque hayan redescubierto su amor y Claire asuma su insensatez, no, más me quedé con la impresión de que estos dos seguirán juntos «porque es lo mejor para sus hijos» (unos teenagers ya, pero ¿qué me dices, Juan Perdices...?). ¡Menudo final feliz de mis ovarios…!
Para que no se le ofendan las lectoras que sean madres solteras, te ponen a una madre soltera perfecta, responsable, que ha educado a un hijo maravilloso, perfecto...Pero no te dejan de decir que lo ideal sería que hubiera crecido con un papá a su lado.
Vamos, como para mencionarle el colectivo LGBT, le daría un patatús.
Creo que hacía tiempo que no veía a un personaje tan antipático en una novela romántica.
Me iba cabreando con cada capítulo que pasaba. Más y más. Es de esos libros que me dan ganas de estrellar contra la pared.
Discrepo de quienes piensan que los lectores no debemos juzgar a los personajes de ficción… ¡Esto es romántica! Un género que habla de sentimientos, de personas, de cómo nos comportamos unos con otros.
Si fuera una novela negra, estaría valorando si el misterio está bien planteado y resuelto.
Si fuera una novela histórica, estaría analizando si se reconstruye el pasado de forma creíble.
Pero como es romántica, en lo que me tengo que fijar es en las acciones, sentimientos e interrelaciones de los personajes. Y los de la «protagonista» me resultaron detestables.
Vaya forma más decepcionante de cerrar el mes Spencer.
Valoración: muy antipático, 1 estrella.
 
Jove, 1/1995
Otras críticas de la novela
Como siempre que no me gusta una novela, os recomiendo leer otras críticas, porque así veis otras experiencias con el mismo libro, que pueden ser más positivas de la misma.
Las dos críticas de El rincón de la novela romántica, lo ponen como muy bueno. 
Otra a la que le gustó, el blog Libros que leo
De maravilloso para arriba, en Críticas, reseñas y opiniones de libros
Paso al inglés, en Publishers Weekly, una reseña. 
Otra, en Kirkus Reviews. /
Y a Three ladies and their babies, también les gustó. 
Es evidente que cada lector somos un mundo.

domingo, 23 de junio de 2019

Crítica: “Ángel de medianoche”, de Lisa Kleypas



Una de las novelas «rusas» de Kleypas


DATOS GENERALES

Título original: Midnight angel
Subgénero: histórica / 1870
Fecha de publicación original en inglés: 1995
Parte de una serie: Stokehursts #1


1.ª edición en España

Traductor: Ana-Isabel Domínguez Palomo
Fecha Edición: 6/2006
Publicación: B de Bolsillo (Ediciones B)
Colección: Zeta romántica 2147/4

SINOPSIS (según la contraportada)

Rusia, 1870. La bella Anastasia Kaptereva está a punto de casarse con el rico príncipe Mijaíl Angelovsky. Pero lo ha matado, o al menos ha sido encontrada inconsciente, junto al cuerpo del príncipe, con un cuchillo ensangrentado en sus manos. Confinada en una prisión de San Petersburgo y enfrentada a una segura ejecución, Anastasia logra escapar a Inglaterra, donde una pariente le consigue un trabajo de institutriz.
La niña a la que debe cuidar es Emma Stokehurst, la hija de doce años de Lord Lucas. Mientras Anastasia es perseguida por un asesinato que no puede recordar, los Stokehurst no han conseguido olvidar el incendio que privó a Emma de su madre y a Lucas de su esposa. Pero Lucas volverá a descubrir el amor gracias a Anastasia. Y ella no sólo encontrará amor, sino también una promesa de protección cuando, inexorablemente, su pasado la alcance.

¿Entra dentro de “Lo mejor de la novela romántica”?
Entraría como mucho entre las mejores entre las 10.000-20.000 mejores, por aquello de que he visto una crítica de A- en The Bam Reviews.


CRÍTICA

Normalmente puedes encontrar a personajes rusos en las novelas románticas como los malos de la película. Pero, alguna vez, aparecen como protagonistas de la historia. No es que haya muchas; me vienen a la cabeza dos o tres, como Besar a un ángel, de Susan Elizabeth Phillips, o Forever in Your Embrace de Woodiwiss. Hasta la Nora tuvo un prota ruso para uno de sus harlequines, Dance of dreams, de 1983.

A mí, personalmente, la que me encantó hace muchos-muchos años y todavía guardo como oro en paño, es Captive of desire (En las redes del amor) de Alexandra Sellers. Muy guerra fría. Algún día la releeré y hablaré de ella por aquí.

La cosa es que también Kleypas tiene su par de novelas con protagonista ruso, que son estas dos de los Stokehurst.

La leí en su día, pero es de las que no recordaba nada y por lo tanto, releerla ha sido casi como cogerla de nuevo.

Conocemos a la protagonista, Anastasia, «Tasia» para los amigos, en uno de sus peores momentos, porque la vemos en prisión, esperando ser ejecutada por asesinato en una cutre celda de la Rusia zarista.

¿Cómo ha llegado a tal situación esta bellísima aristócrata de dieciocho años? Su carácter reservado siempre la hizo un poco inquietante, hasta hay quien la considera un poco bruja. Ni ella misma se explica lo ocurrido, en qué circunstancias falleció su prometido, un primo suyo. ¿Lo habrá matado ella, como dicen todos? ¡Maldita sea, no puede recordarlo!

La rescatarán, de manera un poco montecristiana, la verdad, y acaba con unos parientes en Inglaterra.

Tiene que pasar desapercibida, porque aunque el gobierno ruso se olvide de ella, nunca lo hará la familia del muerto, que la perseguirá para conseguir que pague con su sangre el delito.

Así acaban colocándola de institutriz en casa de un noble inglés, que desconoce todo sobre quién es ella. Luke, un marqués, amó a su esposa, y hace unos años la perdió. Este viudo se ha volcado en su única hija, ahora de doce años, la cual ya ha tenido unas cuantas institutrices.

Luke no cree que esta desconocida, que unos amigos suyos casi le imponen, con el nombre de señorita Billings, sea muy adecuada para su hija. Acepta tenerla a prueba un mes. Tiempo suficiente para que sus amigos le busquen otro lugar.

Lo que menos se esperaba este dolido viudo treintañero, que jamás pensó volver a casarse, es volver a sentir pasión por una mujer, no solo deseo sexual, sino quererla a ella, desearla, ansiar su compañía en cualquier circunstancia.

Pero como es un tipo maduro, y no necesita las complicaciones que esta desconocida trae a su vida, se resiste un poco. Intenta mantener las distancias. Al final, no podrá aguantarlo más, y acepta que ella es la mujer que puede hacerlo feliz de nuevo.

Solo que ella no lo verá igual, porque se siente culpable. Probablemente haya matado a un hombre. Huye, está en peligro y con ello pondrá en riesgo a todos aquellos que la rodeen.

Kleypas crea, en Tasia, una heroína de lo más interesante. La reviste con todos los tópicos rusos: fatalista, apasionada, mezcla una profunda religiosidad con una carnalidad intensa; casi parece como una de esas criaturas excesivas y desdichadas salidas de Los hermanos Karamázov, a la vez carnal y febrilmente espiritual. (Ahí lo tenéis, seis adjetivos, seis, en un solo párrafo, para que no se diga que yo no escribo también como una autora española).

Luke es más tu noble inglés estándar: a su indudable atractivo físico le une una riqueza obtenida no solo por sus tierras sino también por inversiones mercantiles. Es un padre amoroso y, en lo que se refiere a la mujer, sexualmente apasionado. En fin, sin nada especial ni en un sentido ni en otro. Mira que el fuerte de Kleypas es, normalmente, el protagonista masculino. Aquí, sin embargo, consigue que resulte más peculiar e intensa la heroína.

La parte romántica es intensa, y cuando hay sexo, está fantásticamente bien escrito. Nos ahorramos que haya seducción forzada, porque Luke tiende más bien a seducir, a esperar el momento oportuno. Diría que es otra muestra más de que sabe escribir escenas eróticas como nadie, descriptivas, pero añadiendo algo a la historia con cada una de ellas.

El estilo es ese tan Kleypas que hace que las novelas las leas en un suspiro, a ver qué pasa después, y cuando te quieres dar cuenta, ya has terminado y estás deseando leer la siguiente que, en este caso, es Prince of dreams.

Aunque sea una novela con niño, en este caso, niña, Emma, de doce años, no molesta lo más mínimo. Es un personaje con personalidad propia, que tiene un papel que interpretar en la historia. Precisamente ella protagonizará la otra novela del dúo.

Si acaso, se me hizo un poco larga la parte final.
Luke se da cuenta de que ama a Tasia relativamente pronto, y entonces es solo ver cómo la convence para casarse.
Cuando ya deciden estar juntos es cuando llega la amenaza desde Rusia, la sombra del asesinato que dicen que ella cometió.
Y cuando eso más o menos parece arreglado, aun así, la novela sigue y sigue con otras cosas, preparando (obviamente) la segunda entrega.

Vale, todas estas cosas las cuentan de manera amena. No obstante, se te puede hacer un poquito larga, porque la historia de amor en sí ya estaba contada más o menos a la altura del 60 % de la historia.

De cualquier manera, es una de esas viejunas de Kleypas que, en mi opinión, todavía merece la pena leer.

Valoración personal: buena, 3

Se la recomendaría a: los amantes de las históricas con heroínas trágicas.

Otras críticas de la novela:

Como casi siempre, empiezo con las críticas en español.

Dos críticas, ambas positivas (una la recomienda y la otra le pone 8,5 sobre 10), las puedes encontrar en El rincón de la novela romántica

Sin libros no soy nada hace una crítica conjunta a los dos libros de esta saga, y no le han gustado. 

El blog Paseando a Miss Cultura es la primera novela de Kleypas que lee, y le parece mediocre. 

Paso al inglés:

4 ½ estrellas mereció para en Book Binge

3 estrellas le ponen en The Hope Chest Reviews

Por último, si os acordáis, en Smart Bitches hicieron un post con mini-reviews de los primeros libros de KleypasEste obtiene una A, recordando lo primero algo que yo no había mencionado ¡un héroe con un garfio en vez de una mano! Y sigue: «¡Una heroína rusa con poderes psíquicos! Un villano loco y megalomaníaco que más tarde tendrá su propio libro».