lunes, 31 de agosto de 2020

Crítica: “La gran fuga”, de Susan Elizabeth Phillips

 Más sentimental que otra cosa


 

DATOS GENERALES

 

Título original: The great escape

Subgénero: contemporánea

Fecha de publicación original en inglés: julio de 2012

Editorial: Avon

Páginas: 448

Parte de una serie: Wynette, Texas #5 (según la página web de la autora), #6 (según Good Reads), #7 (según Fiction Data Base) / Golfistas #6 en España

 

En España

Traductora: Paula Vicens

Edición: 1ª ed., 1ª imp.

Fecha Edición: 11/2012

Publicación: Vergara (Ediciones B)

Descripción: rústica, 416 págs.

Colección: Amor y aventura

 

SINOPSIS (según la Casa del Libro)

Lucy Jorik siempre se ha cuidado muy bien de avergonzar a su familia, lo cual no es extraño, puesto que su madre es una de las mujeres más famosas del mundo. Sin embargo, acaba de abochornar, nada menos que el día de su boda, al hombre más perfecto que jamás haya conocido. Lucy huye de la iglesia, se sube de paquete en una moto destartalada y cubierta de pegatinas, y escapa hacia lo desconocido con un hombre cuya identidad es un misterio.

Mientras todo el mundo la busca, Lucy tiene que encontrarse a sí misma. Rápidamente se da cuenta de que sus buenas maneras de siempre no le sirven con un hombre que ha convertido la rudeza en todo un arte...

¿Entra dentro de “Lo mejor de la novela romántica”?

No, sería de esas que están entre las 10.000-20.000 mejores como mucho, y eso gracias a que fue un Top Pick! en Romantic Times y, cuando Booklist hizo su top 101 de novelas románticas, incluyó esta.

 CRÍTICA

Leí este libro allá por 2012. Solo recordaba que Lucy, la novia a la fuga de Llámame irresistible, se escapaba con un motero de lo más algo chabacano… y nada más.

Tampoco me lo leí entero, porque el libro de papel que yo compré tenía páginas en blanco, así que parte de la historia se me perdió, no, en serio… casi capítulos enteros que no imprimieron. Como habían pasado meses desde que lo compré hasta que me puse a leerlo, ya no podía devolverlo.

Lo que he hecho esta vez ha sido comprarme el original en inglés, y ya está. Que le den por el saco a la versión en español. Total, Susan Elizabeth Phillips es mucho más divertida en original que traducida. Pude comprobar, de paso, que la traducción era un poco a su aire. Ejemplo: Lucy le echa mano a las joyas de la corona y Panda (el motero grosero) advierte watch it! (=ten cuidado), pero la traductora española decide poner espera.

A Lucy Jorik la descubrimos como una peleona chica de 14 años en Primera Dama (2000). Acabó como la hija mayor de la Primera Familia de los EE. UU. Se esfuerza en ser perfecta, y eso incluyó, con el tiempo, comprometerse con el novio ideal, Ted Beaudine.

Sin embargo, como vimos en el libro anterior, Llámame irresistible, Lucy lo dejó plantado en el altar.

Su vía de escape de Wynette, Texas, adopta la forma de «Panda» un motero re guapo pero con mucha grosería encima. Eructa, habla con la boca llena y le hace proposiciones nada honestas, hasta parece dispuesto a violarla… Lucy, sin embargo, no se desanimará. Seguirá con este tipo tan soez hasta que comprenda qué ha hecho, por qué, y qué quiere hacer con el resto de su vida.

Eso la llevará hasta un casoplón en un isla del lago Michigan y a un relato más sentimental que contemporánea, strictu sensu. ¿Y por qué digo esto? Pues porque Lucy es la protagonista absoluta, ella y lo que le va pasando, la gente que conoce y que le ayuda, directa o indirectamente, a encontrar el nuevo rumbo vital.

El romance entre Lucy y el tal Panda permanece en segundo plano. De hecho, él está ausente en muchos momentos del libro. Su historia romántico-sexual me parece que va un poco a tranca y barrancas, como un Guadiana que aparece y desaparece.

Como ocurre muchas veces en las novelas SEP, hay un romance secundario, entre Bree, una vecina de Lucy, que tiene ahora un niño a su cargo, y un tipo al que no traga, Mike, un empresario de éxito que ayuda a todo el mundo y le viene a decir a Bree que supere el pasado. No es de los más logrados, la verdad.

Y hasta un tercer romance, entre Temple y Max, muy por encima, para que se vea lo moderna e inclusiva que es SEP.

Ninguno de estos romances logró despertar en mí el más mínimo interés, no les vi ninguna chispa especial.

SEP mete a tanta gente en este camarote de los hermanos Marx que acaba siendo cincuenta páginas más larga que cualquiera de las inmediatamente anteriores de la serie y acabó costándome mucho acabarla.

Ojo, que el planteamiento se me antojaba muy atractivo: novia a la fuga que planta al novio perfecto y va y se lía con un motero supersexi.

Lo que pasa es que luego se pierde con toda esa gente secundaria que a SEP le interesa más que a mí, en un entorno de ciudad pequeña (nuevamente alabanza de aldea y tal).

Con el personaje de Lucy hace una cosa que me parece algo ridícula: la rebelde joven pintada como una puerta de Primera Dama pasó a ser una conservadora novia de perlitas al cuello en Llámame irresistible y ahora, con 31 tacos, le da por vestirse en plan gótica y decir que se llama Víbora… No sé, una buena buscarse a sí misma sin necesidad de disfrazarse de jovencita con falsos piercings y tatuajes. Me doy cuenta de que, al no respetar el personaje, su viaje interior (que es lo importante en esta novela) no me interesó.

Panda, así en principio, es un tipo de personaje al que suele encontrar su atractivo: héroe torturado con PTSD. Abundan sobre todo en el suspense romántico. Lo que pasa es que un tipo supuestamente siniestro, capaz de violencia y al tiempo muy responsable y protector,… no acaba de salirle bien a la autora. Amontona muchas cosas sobre sus hombros, y luego lo pone en una posición ridícula.

*Spoiler*,… no es solo un tipo que haya estado en el ejército en dos guerras y haya visto de todo, no, es que además lo ha hecho pasar por delincuente juvenil, policía que también ha visto cosa tremendas, más guardaespaldas… ¿Y al final lo pone como personal trainer de una diva de la tele con sobrepeso? No tiene sentido. Aparte de que me quedé con la impresión de que un dietista nutricionista pondría mil objeciones a toda esta parte. *fin de spoiler*

En fin, que ha sido un final tirando a amargo de una serie bastante irregular. Después de lo bien medido que me pareció todo en Llámame irresistible, centrado en el desarrollo de la historia romántica… esto me parece un paso atrás, hacia los novelones del principio, en que lo importante era la chica y su evolución personal, y el tema romántico solo un añadido más.

Oye, o igual era un paso adelante. No sería la primera novelista de romántica contemporánea que ha pasado del romance contemporáneo a lo sentimental. Kristan Higgins, sin ir más lejos.

Así que, a menos que te guste específicamente lo sentimental, no es una novela que yo recomendaría.

Con esto termino la serie Golfistas. Ya me quedan muy poquitas novelas pendientes de leer (o releer) y comentar aquí de SEP. Si he calculado bien, cuatro novelas incluyendo la última.

Valoración personal: mñé, 2


 

Se la recomendaría a: quienes gusten de lo sentimental.

 Otras críticas de la novela:

 Como siempre que no me gusta un libro, recomiendo leer otras críticas más entusiastas, para hacerse una imagen más completa de la historia, que puede que a ti te funcione, aunque yo no haya conectado con la historia.

En español, tenemos cuatro críticas en El rincón de la novela romántica, todas favorables. 

Igualmente encantada de la vida se quedó D. C. López, que firma la reseña en El club de las escritoras, aunque admite que se le hizo un poco larga. 

Más tibia es la reseña en Revista Krítica

Paso a las críticas en inglés. Como mi gusto en romántica está formado más en la blogosfera en inglés que en la española, no es de extrañar que muchas veces –y esta es una de esas ocasiones–, mi experiencia con el libro se alinee más con la de allí afuera que la de aquí. No me pasa siempre, pero sí a menudo, que me identifico más con lo que cuentan de un libro en inglés que en español.

All About Romance, una C+

DearAuthor, un C. 

Smexy Books, una C –

∞ ∞ ∞ ♠ ♠ ☼ ♣ ☼ ♠ ♠ ∞ ∞ ∞

Con esto he terminado con esta serie, que encontrarás denominada de varias formas: 1) Wynette, Texas; 2) American’s Lady; 3) Koranda; 4) Golfistas. Y además, no todas las páginas incluyen los mismos libros. Os dejo aquí un cuadro comparativo, por si os sirve de utilidad.

Título

GR

FDB

RNR

SEP

Glitter Baby (Un chica brillante, 1987)

0.5

1

 

Fancy Pants (Una chica a la moda, 1989)

1

2

1

Lady Be Good (Amor o chantaje, 1999)

2

3

2

First Lady (Primera Dama, 2000)

3

4

3

«My Secret Service Valentine» (2003)

3.5

 

What I Did for Love (Lo que hice por amor, 2009)

4

5

7

 

Call Me Irresistible (Llámame irresistible, 2011)

 

5

6

5

4

The Great Escape (La gran fuga, 2012)

6

7

6

5

 

GR=Good Reads 

FDB=Fiction Data Base 

RNR=El rincón de la novela romántica 

SEP=Página web de la autora 

viernes, 28 de agosto de 2020

Crítica: “Lady Hattie y la bestia”, de Sarah MacLean


Histórica ligerita de esas que te lees en un suspiro

 


 

DATOS GENERALES

 

Título original: Brazen and the Beast

Subgénero: histórica / años 1830

Fecha de publicación original en inglés: 2019

Parte de una serie: Bareknuckle Bastards (Los bastardos Bareknuckle) #2

Páginas: 400

 

NO TRADUCIDA AL ESPAÑOL (¿AÚN?)

 

SINOPSIS (de FictionData Base)

El plan de la dama

Cuando Lady Henrietta Sedley declara que su vigésimo noveno año será suyo, planea heredar el negocio de su padre, hacer su propia fortuna y vivir su propia vida. Pero antes, su intención es experimentar el placer al que renunciará como solterona confirmada. Todo va a la perfección… hasta que descubre al hombre más hermoso que haya visto atado en su carruaje, lo que amenaza con arruinar «el Año de Hattie» antes de empezar.

… La propuesta del bastardo…

Cuando se despierta en un carruaje a los pies de Hattie, Whit, un rey de Covent Garden conocido por todos como «Bestia», no puede evitar preguntarse por la extraña mujer que lo libera, especialmente cuando descubre que se dirige a una noche de placer… en su territorio. Está más que dispuesto de ofrecerle a Hattie todo lo que desea… por un precio.

Una pasión inesperada

Pronto, Hattie y Whit serán rivales en los negocios y el placer. Ella no renunciará a sus planes; él no renunciará a su poder… y ninguno de los dos se da cuenta de que, si no tienen cuidado, no les quedará otra opción que renunciar a todo… incluyendo sus propios corazones.

 

¿Entra dentro de “Lo mejor de la novela romántica”?

 Sí, actualmente la tengo la 138 en mi lista de mejores novelas románticas, así que sin duda entraría en una próxima edición de Las mil mejores novelas románticas. Tuvo en su momento críticas estupendas: es una de las favoritas de Natalia is a Book Junkie, tuvo crítica de A en Smart Bitches Trashy Books, Smexy Books y Twimom (esta última, al audiolibro narrado por Justine Eyre); y 5 estrellas en Harlequin Junkie y Latte night reviews. Starred reviews le hicieron tanto en Library Reads como en Kirkus Reviews, y un Top Dish para The Romance Dish. Al final del año 2019, las escogieron como lo favorito del año Suzanne (Love in Panels), Adrian Liang’s (Amazon), Bookish, Kirkus, Angela (Smexy Books), ML Lenker (ew.com), LibraryReads Hall of Fame, Rowena’s (Book Binge) & Latte nights Best Books of 2019, aparte de aparecer en el Salón de la Fama de Library Reads. Ah, y quedó finalista en los premios #readRchat.

 

CRÍTICA

Después del buen sabor de boca que me dejó la primera de la serie, Lady Felicity y el canalla, que salió en español en la primavera de este año, me apunté las dos novelas siguientes. Mi idea era leerlas y publicar crítica el mes que aparecieran en español.

Sin embargo, como pasaban las semanas y no las veía entre las novedades, me las compré en agosto. Me apetecía saber qué pasaba con la historia y quería algo así: históricas ligeras y sexis, sin complicaciones, perfecta contraposición a otras novelas de ficción literaria más serias que me tenían ocupada en esos días.

Esta me ha gustado tanto como la primera... la última, un poquito menos.

Los títulos de la serie se forman con un adjetivo y un nombre, definiendo a los personajes. Aquí son Brazen descarada») y the Beast («la Bestia»).

La descarada de la historia es Henrietta, Hattie para los amigos, una solterona que ha renunciado al matrimonio y que quiere dedicarse al negocio de su padre: el comercio marítimo.

La Bestia del título, por su parte, será Saviour Whittington, abreviado Whit, un poquito irónico, dado que es monísimo, luce el rostro más bello del mundo, sobre un corpachón formato armario empotrado: alto y fuerte, musculado, un auténtico luchador (literal, cuando se agobia acaba boxeando a lo bestia – nunca mejor dicho). Se dedica al contrabando junto a su hermano Devon, protagonista de la anterior entrega.

Para cumplir sus planes y que su padre pierda toda esperanza de casarla, Hattie asume que tiene que renunciar a su virginidad. Así, le dejará encargarse del negocio. Hattie es más hábil comerciante que su hermano, un tarambana metido en cosas turbias.

Para deshacerse del maldito himen no se le ocurre otra cosa que recurrir a la prostitución masculina. Camino del burdel, aparecerá en su carruaje un hombre atado e inconsciente. No es otro que Whit, uno de los bastardos Bareknuckle que dominan los bajos fondos de Covent Garden, y que ha acabado de esa guisa por un lío de esos en los que se ha metido el hermano de la prota.

Esto torcerá el plan de perder el virgo con un hombre prostituido.

Lo que sigue es una novela ligerita, con largas escenas de entretenidos diálogos entre Hattie y Whit, momentos sexis muy explícitos, amenazas contra el «negocio» de Whit, así como contra la propia Hattie… y, cuando te quieres dar cuenta, has acabado de leerla.

En Hattie tenemos una heroína de esas que no son conscientes de su propio atractivo, mujer con rotundas curvas y bastante sensata, hábil para los negocios, que tiene que luchar contra los prejuicios de la época con las armas que tiene a su alcance. ¡Ah, y es de esas heroínas tan de novela romántica de ojos violetas! Diría aquello de «… y van…» si no fuera porque la propia MacLean es consciente de lo ridículo de la sobreabundancia de estas Elizabeth Taylor de pacotilla, y habla de que esta es su heroína de ojos violeta.

Whit es tu héroe taciturno, un tanto distante, que se expresa muchas veces en gruñidos que Hattie tendrá que aprender a descifrar. Protege a toda costa a aquellos que son más débiles. Cuando se enamora de Hattie, lo que más le aterra es precisamente que ella corra peligro por su culpa.

Y es que aquí seguimos con el mismo malote, Ewan, un aristócrata desquiciado que hará lo que haga falta para vengarse de los Bareknuckle. Le consumen el odio y la desesperación por la pérdida de su amada. Ya lo conocimos en Lady Felicity y el canalla, pero no voy a profundizar en esa parte de la trama por no hacer destripes innecesarios para quienes se animen a leer esta serie. Baste decir que, en este caso, Ewan usará como un peón al hermano de Hattie.

De nuevo, el estilo de MacLean hace que te impliques totalmente en la novela, siendo muy difícil dejar de leer. La leí totalmente atrapada, aunque sea de esas historias que al cabo de pocos días, apenas recuerdes de qué iba. Es gracias la forma en que te cuenta la historia, más que ésta en sí.

Ese es su principal atractivo y no la historicidad del romance porque, bueno, es de esas historias totalmente de personajes del siglo XX disfrazados como de la época victoriana. Aparte de alguna metedura de pata inexplicable, como que Whit desee «levantarla y llevarla como un maldito Neanderthal». A ver, chiquilla, que estamos en 1837, y los huesos de Neandertal 1 no se hallaron hasta 1856. Es el tipo de anacronismo idiota que no aporta nada y a mí me saca de la historia.

Mis objeciones son puramente personales. No me gustan nada los «héroes» delincuentes, y en este caso Whit se dedica a lo mismo que su hermano, un delito relativamente no violento como el contrabando.

También el que se trate con tanto desparpajo de las personas prostituidas me enoja un poco, aunque aquí sean hombres y no mujeres.

Finalmente, veo un poco de inconsistencia en el relato cuando al principio, el padre y el hermano de Hattie resultan secundarios muy importantes y luego desaparecen totalmente. Hay un momento en que Hattie, por motivos de salud, corre peligro, y tutti li mondi la visita… salvo su padre y su hermano, que sería lo más lógico cuando es su única familia, es que ni se los menciona. A mí me parece un descuido de la autora, sin más, que esos personajes le fueron útiles en un momento y luego se olvida de ellos.

Pero vamos, que Lady Felicity… os gustó, o, en general, las novelas de MacLean, podéis darle una oportunidad a esta novela con total tranquilidad, porque te hará pasar un buen rato.

 Valoración personal: notable, 4

Se la recomendaría a: quienes busquen enaguas ligeritas que se leen en un suspiro.

Otras críticas de la novela:

En español, solo he encontrado la crítica en Otro Romance Más, que la considera estupenda. 

 Confío en que, con el tiempo, la vaya leyendo y comentando más gente. Sobre todo si la traducen al español. Si conocéis alguna, la zona de comentarios es toda para vosotros.

Así que pongo algunas de las estratosféricas reviews que he encontrado en inglés:

Harlequin Junkie, 5 estrellas

Natasha is a Book Junkie, 5 estrellas. /

Smexy Books, una A

That’s What I’m Talking About le dio una A tanto a la historia como a la narración que hace Justine Eyre del audiolibro. 

5 tazas de café le dan en Latte Nights Reviews.

30/12/2020. Actualizo para indicar que la traducción al español saldrá el 18 de enero en grande, rústica, editorial Versátil. Aquí, la portada española:



miércoles, 26 de agosto de 2020

Crítica: “Bad boss”, de Jackie Ashenden

 

Un buen romance de oficina siempre funciona



DATOS GENERALES

 Título original: Bad Boss

Subgénero: erótica / genérica

 Fecha de publicación original en inglés: 6/2020

Parte de una serie: Billion $ Bastards #3 / Harlequin Dare-113 / Mills & Boon Dare-113

Páginas: 174

 

NO TRADUCIDA AL ESPAÑOL

 

SINOPSIS (según Fiction DB)

 En esta ardiente entrega final de la trilogía Billion $ Bastards, ¡el irritante billonario Ulysses White cumple las fantasías más oscuras de Morgan Blackwood en la cama!

Necesito a Morgan. Es el corazón de mi negocio, así que cuando me pide unas vacaciones, me niego. Pero Morgan no se da por vencida. Ella quiere una vida, una cita, acostarse con alguien… Afortunadamente, yo le puedo proporcionar dos de esas cosas…

Tal vez no sea capaz de interpretar las emociones de la gente, pero puedo satisfacer todos y cada uno de los deseos físicos de una mujer. Y estoy listo para cumplir las fantasías de Morgan, sin importar lo perversas que ella crea que son. Cuando me dice que me quiere, y no lo hace de una manera muy amable, e propongo un juego: la ayudaré a explorar sus deseos más oscuros, siempre y cuando mantenga el control.

¿Entra dentro de “Lo mejor de la novela romántica?

Es muy pronto para decirlo porque acaba de salir. Pero no creo que llegue a estar entre las mil mejores. Las novelitas genéricas rara vez son de esas que la gente recuerda a fin de año.

CRÍTICA

 Jackie Ashenden es una escritora neozelandesa de novelas contemporáneas, tirando a eróticas, que me ha gustado siempre que he leído algo suyo. Cuando vi que en el mes de junio salía una suya con un romance de oficina, me lancé de cabeza a por él.

 Es la tercera de una trilogía, pero se puede leer perfectamente de manera individual.

 Morgan es una muchacha australiana, que trabaja desde hace años como asistente personal de Ulysses, uno de esos ejecutivos financieros de la City londinense especialista en encontrar patrones y ganar con ello una pasta gansa.

 Ulysses es representado algo así como un poco TEA, de los que se coge las cosas literalmente, que no pilla los chistes, que es muy serio en su trabajo y no tiene vida fuera. Necesita a Morgan, sobre todo, para que le eche una mano con las personas, que es la parte del negocio que no entiende ni nunca va a entender.

 A Morgan le gusta su trabajo, aunque eso le obliga a adaptarse a las rarezas de Ulysses, a cortarse a la hora de hablar, controlar que las cosas no tengan doble sentido, porque él siempre la entiende al pie de la letra. La ventaja es, también, que resulta brutalmente lógico y franco.

 Por eso cuando ella, un poco cansada, le pide unas vacaciones, Ulysses le dice que no. Le parece algo obvio: él la necesita en el trabajo, así que no puede irse. Cuando ella insiste, él quiere saber el porqué.

 Un poco harta, le responde que se lo merece, que quiere una vida, tener citas, y sexo.

 Algo que no debió hacer porque claro, ella responde así airada, cansada, y él se lo toma como un problema a solucionar. Sus rarezas no le han impedido nunca tener relaciones sexuales, que afronta como otra actividad más, algo que estudiar y ejecutar de la mejor manera posible para lograr el mayor placer a sus parejas.

 Estupefacta, Morgan, que no había hablado del todo en serio, acabará probando eso del sexo con el jefe. Más que nada porque su vida sexual ha sido muy limitada y ella tiene ciertas fantasías de dominación, de ser dominada, que sabe que puede explorar con él en la seguridad de que no le hará daño y procurará maximizar su placer.

 Como esto es Romancelandia, lo de solo sexo nunca funciona y acabarán enamorándose, si bien a Ulysses, con sus limitaciones emocionales, le cuesta entenderlo, y tampoco le ve la lógica de que Morgan se enamore de él.

 Siendo esto una novelita genérica de menos de doscientas páginas, tampoco hay mucho más que decir. Esta línea de Harlequin, la Dare, se reserva a las novelitas de sexo explícito, y es el lugar perfecto para que encajen estas historietas eróticas de Ashenden.

 Es una autora muy buena contando la parte sexi de la historia, totalmente recomendable cuando te apetece algo subido de tono que tiene cierta miga. Eso es lo que destacaría de la historia, eso, y el personaje de Ulysses, al que se ha esforzado en no convertir en un cliché, dotándolo de su propia historia e intentando ver el mundo desde el punto de vista de alguien que no ve ni siente las cosas de la misma forma que la mayoría de las personas.

 No tengo ni idea de por qué el romance de oficina me gusta tanto, la verdad. Suele haber cierto desequilibrio de poder, y eso normalmente no me va. Aquí el planteamiento haría chirriar los dientes a cualquier abogado de lo social, ¿cómo que «no te deja» cogerte vacaciones…? Ni que fuera tu padre y tú una cría de cinco años.

 Algún día tendré que reflexionar al respecto. Lo que sí sé es que he visto romances de oficina mejor contados, como la inolvidable Rock hard de Nalini Singh

 Está contado desde la primera persona dual: un episodio lo cuenta Morgan, el siguiente Ulysses. Hasta cierto punto, sí que consigue que la narración de cada uno sea un poco diferente, algo en lo que naufragan la mayor parte de las autoras que usan esa forma de narrar. Pero sigue sin ser mi forma favorita de contar las cosas.

 Para mí, parte del libro que lees es siempre lo que tú le pones, lo que imaginas o sospechas, lo que creas en la cabeza… en la actividad lectora hay un poquito de creación, hasta el punto de que muchas veces no sabes distinguir si algo está en realidad en el libro o te lo has inventado tú… Y la narración en primera persona dual corta bastante las alas. Todo está demasiado mascadito.

 Otro aspecto por el que este libro no fue una experiencia redonda para mí es toda esa fantasía del millonario. Sé que a mucha gente le gusta, pero a mí no es el prototipo de personaje que me guste especialmente. Aquí tiene escenas muy trilladas de esas en plan «cierro… [póngase aquí tu lugar público favorito, por ejemplo, la Alhambra, o el palacio de Aranjuez] para que tú y yo podamos follar in situ». O la archiconocida de que él le compra ropa a ella, incluida lencería y taconazo… Uf, lo sé, es una fantasía muy repetida, y por algo será, pero conmigo justo no encaja.

 En fin, que si quieres algo corto, hot, con un protagonista masculino especial, y te van los romances de oficina o la fantasía de millonario, esta novela es para ti. Yo la disfruté mucho, la verdad, aunque menos que otras de Jackie Ashenden. Mi referencia, cuando de esta autora se trata, es Having her, una novela erótica rematadamente buena.

 Valoración personal: buena, 3

 Se la recomendaría a: quienes gusten de romances de oficina o fantasías con millonarios.

 Otras críticas de la novela:

 De momento no he encontrado mucho, porque es reciente y también porque este tipo de novela tan corta no suele llamar la atención.

En Good Reads, 3.93 estrellas.

En Harlequin Junkie, 4 estrellas y lectura recomendada.