viernes, 30 de agosto de 2024

Crítica: “Good as gold”, de Sarina Bowen

 

La que es buena, es buena, y se nota


 

DATOS GENERALES

 

Título original: Good as Gold

Subgénero: contemporánea

1.ª publicación: Tuxbury Publishing LLC, 6/2023

Parte de una serie: Giltmaker #1

Páginas: 310

ISBN13: 9781950155644

 

NO TRADUCIDA AL ESPAÑOL

 

SINOPSIS (según Fiction DB)

Leila:

Lo que quería hacer: divorciarme silenciosamente del patán de mi marido y luego tener un hijo yo sola.

Qué es lo que, en cambio, sucede: la persona que me gusta regresa a la ciudad cuando estoy en mi momento más vulnerable. Después de demasiados cócteles, le pido que sea el padre de mi bebé.

En mi defensa, debo decir que han sido un par de meses difíciles. Ver a Matteo Rossi de nuevo después de catorce años ha afectado mis emociones. Y mi libido.

Por la mañana espero que se haya olvidado de todo. Pero no hubo tanta suerte. De hecho, Matteo tiene algunas preguntas aclaratorias. Y también algunas ideas traviesas...

 

Mateo:

Lo que quería hacer: visitar Vermont para la boda de mi hermano. Hacer las paces con mi familia y llorar la pérdida de un amigo.

Qué es lo que, en cambio, sucede: un romance apasionado con la chica que perdí. Pero no puede durar. Mi vida está a tres mil kilómetros de distancia y Leila se lo merece todo. Ella es tan buena como el oro.


¿Entra dentro de “Lo mejor de la novela romántica”?

No, para mi gran sorpresa, no ha tenido críticas estratosféricas, y eso que me parece una novela estupenda. La tengo perdida en mi base de datos más allá del puesto 10.000 y eso porque es, a su modo, un friends to lovers, tópico que me gusta muchísimo.

 

CRÍTICA

Este verano, ya os lo he contado en otras críticas, gracias a una newsletter de Mira Lyn Kelly, me apunté a un medio reto veraniego, un «Summer Romance Reading Challenge», consistente en leer al menos diez de una serie de novelas gratis de autores superventas que participaban y tienes que contar que lo has hecho y se supone que te mandan luego una pegatina «Romance & Pizza».

Normalmente me apunto a estas cosas para ver si encuentro nuevas autoras que me puedan enamorar. Con esta novela, obvio es decirlo, no andaba yo a la caza de ningún descubrimiento, porque de Sarina Bowen he leído unas cuantas y ya sabéis que me suele gustar mucho.

Tanto, que este libro ¡¡ya lo tenía yo en mi Kindle desde hace tiempo, pendiente de leer!! Al final, mira, lo leí en Book Funnel, en el móvil, mientras estaba de vacaciones lejos de mi Kindle.

En contraste con otras novelas flojitas que he leído en este reto veraniego, con Sarina Bowen tuve que quitarme el sombrero y empezar diciendo en Goodreads que «La que es buena, es buena, y se nota más cuando acabas de leer libros malonchos».

Bowen es de las pocas escritoras de romántica con un mundo propio (fuera de la romantasía), el Vermont de True North. Es tan generosa que hasta otras autoras ambientas sus novelas en él. Ha sido una gozada volver a True North.

La serie empezaba por los Shipley, pero luego se iba ampliando a otras familias, como los Rossi. Y ahora a los Giltmaker con esta especie de spin-off situado en ese mismo mundo.

En esta novela tenemos al mayor de los Rossi, el ausente Matteo (36). Vive en Colorado, dedicado a su negocio de esquí de alta montaña, que montó con su socio.

La boda de Alec y May hace que Matteo vuelva a casa después de tres lustros sin aparecer por Vermont.

Ahí se entera de que la chica que siempre le gustó, Leila Giltmaker (35), se ha divorciado. Es cosa de verse de nuevo y conectan con naturalidad, como si no hubieran pasado años sin hablarse.

Es un friends to lovers variedad «dos tontos muy tontos»: de esos que siempre estuvieron enamorados el uno del otro y nunca se lo dijeron.

Leila quiere ser madre, y visto lo cara que es la inseminación artificial con donante anónimo, acaba planteando a su amigo Matteo que le haga el favor. A ver, hay que entenderlo, no está en un buen lugar emocional, ha bebido más de la cuenta y está afectada… Claro que qué más quiere el ciego que ver, el manco que tocas o el hambriento que catar...

El planteamiento es muy de historia loca de Romancelandia. Y, sin embargo, consigue transmitir auténtico amor, y amistad, en personas reales, con sus problemas, sus toques de humor, con tragedias cotidianas y todo ello contado de forma que engancha.

Luego hay mucho de la fatalidad de la vida, la irreversibilidad de los acontecimientos. Hay cosas que pasan y no se pueden arreglar, hay que aceptarlo y seguir adelante, aunque no desaparezca nunca el sentimiento amargo al recordarlo.

Al comparar esta novela con los últimos dos bodrios (de Nana Malone y Adriana Locke) que había leído, me doy cuenta de que hay más lugares comunes que ese que dice que «nadie puede escribir personajes mas listos que uno mismo».

Yo lo ampliaría a que no puedes tampoco escribir personajes más maduros, ni más interesantes. Si el autor no es persona compleja, adulta, sensata, me parece muy difícil que le salga algo que no sea bidimensional, torpe. Es por ello que, a algunos autores me parece a mí que les falta un hervor, o de la vida saben cuatro superficialidades...

O, al menos, los libros les salen así, ñoños y sin gracia ni sustancia. No es el caso de Sarina Bowen. No siempre conecto con lo que escribe. Pero cuando se pone a hablar de gente corriente, me encanta.

Luego hay en este libro curiosidades digamos culturales o sociales que me resultan llamativas. Por ejemplo, que hablen de un plan de financiación para dar a luz, así de pasada, como asumiendo que lo normal es pedir préstamos para pagar el parto. Cosas muy USA, que aquí en España (no me digáis que no) suenan rarísimo.

Obviamente como es propio de la época, utiliza la autora el estilo NA, primera persona dual, de esa en que unos capítulos te los cuenta Matteo y otros Leila. Y como suele pasar, no distingues la «voz narradora» de uno u otro. Pero hay flashbacks sobre lo que ocurrió hace años entre Leila, Matteo y otro amigo, Rory, y eso va en tercera persona, ¡Ay, qué descanso...! ¿Cuándo se les pasará la tontería del dual POV?

Una última cosa para autoras y editoriales en español. Para que veáis que esto de ofrecer libros gratis funciona. A pesar de que yo ya tenía este libro en mi Kindle, no lo leí hasta este verano. Y me ha gustado tanto que acabo de comprarme el segundo de la serie Giltmaker, la historia de Nash y Livia, que se anticipa un poco aquí.

No te digo que estés todo el rato regalando libros, al fin y al cabo los escritores profesionales tienen que ganar dinero con esto. Pero de vez en cuando una promoción como esta no me parece mala idea. Varias autoras se unen para poner gratis a disposición de los lectores una de sus novelas pasadas. De diez novelas igual al final solo un par de ellas son autoras con las que conectas, o sea, que de diez autoras solo dos consiguen nuevos lectores, pero no se pierde nada por intentarlo.

No sé, merece darle una vuelta, a ver.

Valoración personal: notable, 4 estrellas

Se la recomendaría a: quienes gusten de contemporáneas con entrañas.

Otras críticas de la novela:

En español, no he encontrado nada. Así que paso a las críticas en inglés, que salvo AAR, el resto son de blogs poco frecuentes que creo que hasta la fecha no habían pasado por aquí.

All About Romance, una B-.

Totally addicted to Reading, 4 estrellas.

Books another pursuits, 4 estrellas.

Lenoreo, de Celebrity Readers, 3.5 estrellas.

Book Bruin, 3 estrellas.

Reseña en Medium.

jueves, 29 de agosto de 2024

Crítica: “Takeover”, de Nana Malone

 

¡Vaya pérdida de tiempo!


 

 Takeover

 

Por NANA MALONE Fecha: febrero de 2024

 

Estoy comentando las novelas que he leído como consecuencia de un reto al que me apunté, gracias a una newsletter de Mira Lyn Kelly, un «Summer Romance Reading Challenge».

Esta es, con diferencia, la peor de las novelas que leí. Y os cuento por qué le doy una estrella

Ya, de entrada, el planteamiento de «matrimonio arreglado» me parece tontísimo en pleno siglo XXI

El padre de Gwen la obliga a casarse con el millonario Atticus Price para asegurar que, tras una fusión por absorción, la empresa siga en la familia. Gwen se supone que es listísima, creó una empresa tecnológica por su cuenta pero luego la puso bajo el paraguas del grupo empresarial de su padre. Éste no lo ha sabido gestionar del todo bien y ella, la audaz empresaria, es tontita la pobre y no se entera de nada. La cosa es que ahora «su» empresa es objeto de adquisición por parte de Price, y para no perderla del todo, pues Gwen tiene que casarse con Price.

Más tonto aún, a Atticus le viene bien el himeneo por uno de esos locos testamentos de romántica, pues si no se casa antes de los treinta, perdería las acciones de una empresa...

Pero, ¿no es tan listo y tan guapo y tan todo? ¿Cómo es posible que se vea arrinconado por algo semejante?

Yo me decía «bueno, es Romancelandia y hemos venido a jugar, suspendamos la incredulidad...». ¡Claro que es absurdo estos millonarios y directivos de compañías tecnológicas, con menos de treinta años, se porten y hablen como chicos de instituto!

A veces cuesta un poco más, pero hay que intentar entrar en la fantasía romántica. 

No ayuda nada eso de narrar en primera persona dual que no sabes quién habla en cada momento, si Gwen o Atticus... De nuevo, esto no es inaudito, al contrario, es la forma de narrar actual. A mí me sigue pareciendo que te pone a los personajes como más simples que el mecanismo de un chupete.

Al menos hay sexo excitante un par de veces...

Claro que para llegar a las escenas sexis tienes que aguantar que una supuesta empresaria brillante sea tan tonta del bote que ni se entere de lo que pasa con su propia empresa, o qué puede ocurrir si pone su patrimonio empresarial bajo el poder de su padre,...

Luego hay una escena súper desagradable en que el «héroe» le pega una paliza a un tipo y le extorsiona para, en definitiva, sacarle los cuartos. No me sirve de excusa que la ganancia no sea para él o que la víctima de su agresión sea un tipejo impresentable.

Lo peor no es nada de todo eso.

No, lo que me hizo bajar de ⭐⭐ a es que llego al final, después de luchar mucho con las gilipolleces de este libro, ¡y encima no es autoconclusivo!

No ESTO NO ES NOVELA ROMÁNTICA.

*spoiler alert*

Acaba la cosa con Atticus rompiendo con Gwen, para que seas tan idiota y te compres el siguiente.

*end spoiler alert*

¡Eso se avisa...! Un libro puede gustarte más o menos, allá cada uno, y habrá a quien le guste este tipo de historias y personajes así, es respetable. Ahora, que no te avisen, en Romántica, de que no hay HEA, eso ya no. Me parece tomadura de pelo y me cabrea.

Me enfado conmigo, por perder el tiempo con esta chorrada. Soy boba por haber perdido el tiempo con esta historia. Ahora, no soy TAN tontorrona como para perder, además, mi dinero. Me da igual si estos dos acaban juntos o no. Así que al segundo libro, o los que haya que sigan la historia, que les vayan dando. Los va a comprar su tía.

No sé si he leído algo o no de esta autora antes. Menos mal que no tuve que pagar nada, que era free. Me dije que bueno, que vale, total, no pierdo nada.

Craso error, nada es realmente gratis, siempre pierdes algo, en este caso, tiempo precioso que podría dedicar a algo más ameno, no sé, ver cómo el robot corta el césped del jardín...

En fin, tengo que apuntarme el nombre de la autora para no volver a probar nada de ella.

Mi experiencia: irritante, 1 estrella.

 

eBook, 306 páginas

Sankofa Girl (febrero/2024)

Parte de una serie: Kings of the Boardroom #1

 

Como en este mundo «hay gente pa tó», que ya lo dijo el torero, en el blog Thindbooks le dan 4 sobre 5.

 

NO TRADUCIDA AL ESPAÑOL