domingo, 11 de enero de 2015

Crítica: "Ligeramente peligroso", de Mary Balogh



Portada Debolsillo



TOP 10


La obra más apreciada de Mary Balogh. Para pasar un buen rato en la Regencia.

DATOS GENERALES

Título original: Slightly Dangerous
Fecha de publicación original en inglés: 2004
Subgénero: histórica – Regencia
Puesto en la lista AAR 2013: 07
Parte de una serie: 6.ª de la Saga Bedwyn

Traductoras del inglés: Ana Isabel Domínguez Palomo y María del Mar Rodríguez Barrena.

SINOPSIS

La llegada de Wulfric Bedwyn, duque de Bewcastle, a la fiesta campestre por excelencia de la temporada ha revolucionado a la alta sociedad londinense. Es uno de los hombres más ricos, poderosos e influyentes del reino; también el más altivo y distante. Pero en esta deslumbrante tarde de verano, mientras todas las miradas femeninas convergen en el apuesto y arrogante duque, él solo parece tener ojos para la única mujer que de ninguna manera querría llamar su atención.

Christine Derrick es inmune a su título y su posición. Lo desconcierta y lo exaspera con su vitalidad y sus francas maneras. Es absolutamente inadecuada para él. Pero a su lado, por primera vez en su vida, Wulfric siente que ese muro de frialdad y reserva que ha levantado entre él y el mundo se empieza a resquebrajar.

CRÍTICA

Esta novela culmina la Saga Bedwyn, con la historia del mayor de los hermanos Bedwyn, Wulfric. Poco a poco todos sus hermanos han ido encontrando el amor y han construido sus propios hogares; los sobrinos empiezan a rodearle por todas partes. Este tipo es tan estirado y serio que, según dicen, cuando entra en una habitación, la temperatura baja varios grados. Siempre controlado y frío, no quiere compañía ni aspira a casarse. Ahora está un poco más alicaído que de costumbre pues su amante de muchos años, Rose, ha muerto. Sin saber muy bien por qué él, que huye de los actos sociales, ha accedido a una fiesta campestre.

Allí conoce a la viuda Derrick, de nombre Christine. Se casó con un aristócrata, su marido murió y la dejó bastante pobre. Así que volvió a casa de su madre, donde lleva una vida bastante feliz. Ha llegado a la fiesta a última hora, para que le cuadren los números a la anfitriona.

Su primer encuentro no puede ser menos auspicioso. Y en el segundo, él quiere ponerla en su sitio mirándola desdeñosamente a través de su monóculo. Pero Christine le mantiene la mirada sin pestañear.

Por alguna extraña razón se sienten atraídos el uno por el otro. Claro que Christine ya no es una jovencita que se deje llevar por sus pasiones. Tiene que asegurarse de estar con el hombre afín a su carácter, y Wulfric es totalmente opuesto a lo que ella quiere. Tampoco Christine resulta adecuada para él. Se trata de una de esas personas desenfadadas, algo torponas, que acaban poniéndose en ridículo más de una vez. Puede parecer increíble que alguien tenga tantos “accidentes” de los que es convenientemente rescatada por Wulfric, en papel de renuente caballero andante. Como conozco gente así de torpe en la vida real, a los que les pasan una y otra vez cosas que no le ocurren a nadie más, no me ha parecido tan irreal como a otros lectores.

Cuando vi que ocupaba nada menos que el 7.º puesto de la lista AAR, no me lo podía creer. Pasé un buen rato con este libro, pero no me pareció para tirar cohetes. De no ser por este “Desafío AAR”, creo que no lo hubiera leído. Es el sexto de una saga, y no he leído los cinco anteriores. Una experiencia desconcertante. Supongo que si los hubiera leído, habría ido anticipando el momento en que el glacial Wulfric “cayera” en las redes del amor. Pero como no sabía nada de la historia, no entendía por qué había tanto secundario metido con calzador sin hacer nada relevante. Es como cuando estás en una reunión y alguien se pone a hablar de gente que el resto conoce y tú no. Te sientes desplazada, un poco incómoda, algo fuera de lugar.

Pero quienes siguieron toda la serie, quedaron encantados con esta culminación. Obtuvo las máximas calificaciones en las críticas de The Romance Reader y All About Romance. Ganó dos premios otorgados por los lectores de AAR: a la mejor novela romántica histórica ambientada en Europa y al mejor héroe del año, Wulfric Bedwyn, of course! En otra categoría no ganaron pero sí obtuvieron una mención honorable, a la mejor pareja de 2004. Ha aparecido en las distintas encuestas AAR, en los puestos 55 (2004), 6! (2007) y 7 (2010). Por último, cuando en 2008 hicieron una mini-encuesta sobre las mejores novelas históricas ambientadas en las Islas Británicas, tuvo el puesto 5. A estas alturas, hay que considerarla como la novela más apreciada de Mary Balogh.

Me resultaron bastante interesantes los dos protagonistas. Wulfric es un tipo gélido y estirado. Tan prepotente que compartes por completo la idea de la heroína de coger el monóculo y hacérselo tragar. Afortunadamente, sigue siendo él mismo al final de la novela. Enamorarse de Christine le hace abrirse algo más, cambiar un poquito, pero no tanto como para salirse de su personaje. Él es como es y ella habrá de aceptarlo así.

Aunque Wulfric sea el favorito de muchos, me gusta más el personaje femenino. Precisamente por ser optimista y no dudar en reírse de sí misma. Goza del don de la alegría, lo que parece apropiado para Wulfric. Prefiere una vida humilde pero acomodada a sus gustos, antes que dejarse llevar por las perspectivas de elevarse socialmente en un matrimonio con alguien con quien no congenie.

Por algunos momentos, me pareció el particular homenaje de Mary Balogh a Orgullo y Prejuicio. Y al leer otras críticas, veo que no es un pensamiento original, así que sí, sigue más o menos el mismo tópico de aristócrata altivo que cae rendido ante los encantos de una chica alegre de pueblo. ¡La ofensiva proposición de matrimonio que vemos aquí es cien por cien Austen! Y no es hasta que Christine ve Pemberley, perdón, no-se-qué-Hall, no empieza a reconsiderar las cosas. Un chico guapo está bien, pero si viene acompañado de casoplón, mejor. Claro que a Christine le falta el ingenio y yo diría que hasta la inteligencia, de Elizabeth Bennett. En su simplicidad, a veces cae en la bobería. Una cosa es ser alegre y otra, una payasa.

Los secundarios no tienen mayor interés. Hay un montón de ellos, indistinguibles para mí. Supongo que muchos proceden de libros anteriores y es una especie de recapitulación de la serie. Tanta felicidad marital y tanto niño me estragó bastante.

La historia en sí mucho suspense no tiene: idas y venidas de los dos personajes. La única intriga es ver cómo superarán su recelo mutuo. Que con tan escuálida trama te atrape hasta el punto de no poder dejar de leer es algo que sólo puede conseguir una buena cuentacuentos, y Mary Balogh lo es.

¿La ambientación? Nada original. Regencia. Bailes. Paseos. Y el lago Serpentine de Hyde Park (que aquí traducen como la Serpentina). ¿La traducción? Me sonó excesivamente campechanota en más de un momento.

Valoración personal: buena, 3.

Se la recomendaría a: quienes gusten de la novela romántica de la Regencia.

Otras críticas de la novela:

En inglés, se pueden leer las de RT Book Reviews y All About Romance. 

Otras novelas de la autora en el Desafío AAR:

AAR 36. Mary Balogh A Summer To Remember / Momentos inolvidables (2002) 
AAR 53. Mary Balogh More Than a Mistress / Más que una amante (2000) 
AAR 82. Mary Balogh – The Secret Pearl / La perla secreta (1991) 
AAR 92. Mary Balogh – Simply Love /Simplemente enamorados (2006)
  
Ediciones en España:

-       Ligeramente peligroso (2009) Plaza & Janés Editores, S.A. 
-       Ligeramente peligroso (2010) Debolsillo

6 comentarios:

  1. Buenas tardes!
    Comparto contigo la crítica. Pero para estar entre las diez primeras, no la veo. Me la leí todo lo rápido que pude, pues engancha. Y los personajes están bien construidos, me gusta que se acepten tal y como son. Me cuesta entender, pese a que lo explican una y otra vez, que una persona no tenga ni un atisbo de emoción, esos ojos taaaan friosss, pero por lo demás me encanta Wulfric. Pero no me acabó de cuajar la manera en que se van enamorando, se me hizo eterna la parte de Lindsay Hall, ya que no había leído nada de la saga. Demasiadas coincidencias, aunque, como torpe que soy y persona que adora echarse al suelo a jugar con los niños, entiendo perfectamente a Christine, adorable la mayor parte del libro, pero eterna damisela a rescatar siempre por Wulfric. Tal vez influyera que la leí en inglés y me perdería algo. Pero tras La perla secreta, pues pondría está antes en la lista, pero para gustos los colores. Ahora a por Simply Love, en la que tengo puestas muchas expectativas. Gracias por tu crítica y tu trabajo. Me encanta descubrir nuevas novelas y autores. Saludos

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Debe ser de esas novelas que todos los que siguen una serie están esperando, o algo así. Como no lei el resto pues me dejó un poco fría. Yo tampoco la veo entre las 10 mejores de la historia.

      Eliminar
  2. Hola, soy Marta, que a veces publico como Jotaher, en efecto, parece que la serie Bedwyn está pensada para la historia de Wulfric y Christine. Me he leído 4 libros y en todos ellos nos cuentan la historia de Wulfric, poco a poco. Parece que el objetivo de Balogh hubiera sido crear las anteriores historias para él. Por eso creo que está entre las diez mejores. Pero en realidad, debería ser toda la serie la que en todo caso estuviera tan alto. Aunque ya te digo, ha ganado en mi estima la novela (que he vuelto a leer en español), porque por fin entiendo mejor a este personaje, que como bien dices, parece un calco de Darcy en la novela, pero que tiene una personalidad muchísimo más compleja.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Gracias por comentar y dejarnos la experiencia de quien sí se ha leído la serie completa. Parece evidente que este libro provoca una emoción diferente según hayas leído los anteriores o no.

      Eliminar
  3. Acabo de terminar de leer la novela y me encantado, pero ay, siempre encuentro peros en lo que escribe Balogh. Y es que hay varias partes que a mi me parecieron no creibles, en este caso es la heroina, me gustó su caracter tan abierto y que se deje llevar por el entusiamo tanto que termina metida en embrollos, pero ¡a los 29 años! Quiero decir no es que alguien incluso en sus 30, 40, 50 o más no pueda ser así, pero vamos a los 29 ya vas teniendo una idea de cuando hacerlo y cuando no, no vas a estar frente a un público en una reunión de paseo y te pones a subir a un arbol frente a personas que recién te presentan, además si en realidad la señora sube a los arboles, con 29 años ya habrias encontrado el truco para bajar de él sin romperte el vestido y justo frente al protagonista, vamos, eso le dicen en mi país escritura perezosa. Y es que toda esa impulsividad sin inhibiciones me resultaría más creible en alguien de 17 años. El caracter de la protagonista me gusta pero en alguien más joven. Dicho esto creo que esta mejor trabajado el caracter de Wulfric, yo he leido antes ligeramente casados y la verdad llama la atención el duque que para con sus monóculos y el cuello estirado. Podría ser facil decir que es otro Mr. Darcy pero aquí Wulfric aunque es orgulloso, creo que resalta más su aspecto frío que tiene todo calculado en su vida. La historia se va desenvolviendo de forma bastante interesante y en la mayor parte de la novela tambien bastante original, salvo una que otra parte que definitivamente salieron de orgullo y prejuicio, es inevitable darse cuenta, ojalá y la autora hubiera ido por otros senderos. Pero para compensar pasaron cosas que me dejaron impactada por que no las vi venir. En el encuentro en el laberinto, cuando Wulfric le propuso lo que le propuso no lo vi venir, en serio, me dejó wtf! es un hijo de P**!! que miserable!!! La verdad que tuvo un montón de partes en que pasaron cosas que no esperaba como cuando al final se resuelve el misterio de el pasado de la heroina, a mi también me hubiera gustado darle un patadón al susodicho. Terminó con un final que me encantó y bueno que más puedo decir, es una historia que recomiendo mucho y la que me gustaría que la autora corrigiera esas partes poco inspiradas, con un buen arreglo de esos pequeños detalles, esta historia subiría a niveles más destacados.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Bien por tu comentario. Enriquece esta página porque señalas cosas distintas a las que a mí me llamaron la atención. Es verdad que tanto accidente parece raro en alguien de su edad, pero lo cierto es que yo conozco mujeres, incluso de la mía que son así de torponas, aunque claro, eso a veces te hace parecer –como insinúo en la crítica– payasa. Mr. Darcy en realidad es un hombre tremendamente tímido y que no quiere llamar la atención sobre si mismo, importante a su pesar; en cambio Wulfric, si lo recuerdo bien, es un tipo más bien controlador, que no tiene el menor inconveniente en sacar a pasear su ego y aniquilar a la gente con el peso de su importancia. Así que Balogh, aunque sigue las líneas de Orgullo y prejuicio, lo hace con un héroe más frío que Darcy y una heroína menos ingeniosa que Lizzie.

      Eliminar