viernes, 5 de febrero de 2021

Crítica: “Priest”, de Sierra Simone


Sexi, bastante intensa, abstenerse católicos practicantes


 

DATOS GENERALES

 

Título original: Priest

Subgénero: contemporánea/erótica

Fecha de publicación original en inglés: 2015

Parte de una serie: Priest #1

Páginas: 352

 

NO TRADUCIDO AL ESPAÑOL


SINOPSIS (según Fiction Data Base)

Hay muchas reglas que un sacerdote no puede romper. Un sacerdote no puede casarse. Un sacerdote no puede abandonar a su rebaño. Un sacerdote no puede renunciar a su Dios. Siempre he sido bueno cumpliendo las normas. Hasta que vino ella. Entonces descubrí nuevas reglas. Mi nombre es Tyler Anselm Bell. Tengo veintinueve años. Hace seis meses, rompí mi voto de castidad en el altar de mi propia iglesia, y que Dios me ayude, porque volvería a hacerlo de nuevo. Soy sacerdote y esta es mi confesión.

***Priest es una novela larga independiente. Apta solo para un público adulto ***

 

¿Entra dentro de “Lo mejor de la novela romántica”?

No estaría entre las mejores, sino como mucho entre esas diez mil novelas románticas a las que se le puede dar una oportunidad, gracias a la crítica positiva que tiene en Natasha is a Book Junkie, y es una de esas novelas que Sarah MacLean recomienda. De verdad que esta autora tiene un ojo excelente.


CRÍTICA

Cuando leí la segunda de la serie, Sinner, escribí:

No sé si estoy preparada para otra novela de esta autora. He visto recomendada también la primera de la serie, Priest. Igual con el tiempo la leo.

Ese tiempo ha llegado.

El sacerdote del título es el padre Bell, joven y guapo. Se siente tentado por Poppy, una muchacha que aparece por su confesionario. No sólo se siente tentado, sino que cae en la tentación. Una y otra vez que para eso estamos en novela erótica y te lo tienen que contar todo con pelos y señales.

No es solo sexo, es que también se enamoran, pues hay partes de su carácter que se parecen mucho y su visión de la vida coincide hasta cierto punto.

Como Tyler es un cura católico, asumes que la cosa del todo bien no puede acabar. Para él, su trabajo es importante. El sentido de su vida está en su fe y en las cosas buenas que puede hacer, ayudando a la gente. Así que si cuelga los hábitos para conseguir a la chica, pierde algo muy importante para él. 

Si, en cambio, se queda con su trabajo, perderá a Poppy, y eso tampoco está bien.

Como estamos en novela romántica, tendrán su final feliz. Encontrarán una forma de reconciliar el amor con hacer buenas obras.

En la novela erótica me pasa un poco como con el suspense romántico. Tienen que estar equilibradas las dos cosas: el sexo y el romance.

Una novela erótica exige escenas variadas y explícitas de la tríada habitual (vaginal, anal y bucal) que resulten excitantes.

Por otro lado, ha de contar una historia de amor de dos personas que se encuentran, se conocen, se enamoran y acaban juntos. Los personajes tienen que ser diferentes al final del libro, y ese cambio ha de venir motivado precisamente por la relación que se desarrolla entre ellos

Con este libro me ha ocurrido lo mismo que con el otro que leí de Simone: no me encaja el estilo con el tipo de historia que cuenta.

Los personajes están muy bien escritos, sobre todo el de Tyler. Poppy queda un poco más deslavazada. Resulta incoherente porque, al principio, parece no ser consciente de lo que provoca en este hombre y eso no encaja con una muchacha inteligente, preparada, y que se ha ganado la vida como estríper.

Dudo que sea una novela apropiada para un creyente católico. Yo, que simplemente me he educado en una cultura católica, me sentía incómoda con alguna escena. Así que me imagino que alguien practicante pueda ofenderse por cosas como usar el óleo consagrado como lubricante.

Aunque bueno, igual no, al fin y al cabo es solo una fantasía con cura irlandesón y sexi como Pájaro Espino.

Con los escándalos de abusos sexuales de la iglesia católica, puede resultar problemático poner a un cura teniendo sexo con una persona que acude a su iglesia en busca de ayuda espiritual. Puede verse como abuso de superioridad por su parte.

Me parece que la autora intenta evitar esto de dos maneras. Primero, el predecesor del protagonista en la parroquia abusó de niños. Tyler sufrió por ello, es lo que le hizo cambiar de dirección en su vida y está muy volcado contra este tipo de comportamiento.

Por otro lado, Poppy no es católica. Acudió ahí simplemente porque le pareció que un sacerdote podía ayudarla en un momento difícil de su vida. Es como si se igualaran sus posiciones porque, en realidad, no es una persona de su parroquia.

Digo que intenta evitar que se vea como abuso de superioridad, pero no estoy segura de que lo logre. Tampoco ayuda la forma en que él la llama, lamb y little lamb, (“mi corderito”) una forma un poco demasiado sacerdotal de dirigirse a ella.

Añádele que el sexo entre ellos es… duro… sucio (en sus propias palabras), con elementos de dominación de Tyler sobre Poppy. No llega a ser sadomaso, pero incluye spanking y bondage muy leve.

También es verdad (y Poppy lo dice en un determinado momento) que una cosa es cómo te gusta el sexo y otra distinta cómo quieres que te traten en la vida real. En este sentido, el ex de Poppy no sabía diferenciar y no la trataba bien fuera de la cama. En cambio, Tyler es más en plan: lo hacemos así porque es lo que nos pone a los dos, pero fuera de la cama, respeto total.

Resumen: una novela erótica con mucho contenido espiritual católico y carnal, lo que incluye altares, iglesias, óleos y otras cosas sacras a las que no les da exactamente el uso litúrgico.

Te puede gustar si te van las novelas emocionalmente intensas con mucho sexo, con algún toque raro. Muy bien escrita. No es, sin embargo, para que leas todos los días; es un viaje emocional muy fuerte, intenso en el sexo y acongojante en lo anímico. Estas dos personas han sufrido antes de conocerse, y lo pasan mal.

No creo que te arrepientas si le das una oportunidad, siempre que tengas muy claro que es lo que puedes esperar.

Mi valoración de cuatro estrellas obedece a que creo que se consigue muy bien el equilibrio entre lo erótico y lo romántico. Mi duda, repito, es cómo se la va a tomar alguien católico: comprenderás mejor muchas cosas pero al mismo tiempo cabe la posibilidad de que las rechaces más.

Valoración personal: notable, 4

Se la recomendaría a: quienes no les importe mezclar (mucho) sexo y religión (católica).

Otras críticas de la novela:

Empiezo con lo que he encontrado en español.

Lluvia de letras le da 4 estrellas

Leyendo estoy libros y chocolate le da 4 chocolates

Ambas señalan la naturaleza controversial de la historia, y que posiblemente no sea una novela para todo el mundo, pero queda claro que les ha gustado tanto como a mí.

Paso al inglés.

5 estrellas en Natasha is a Book Junkie

Las dos comentaristas de The Saucy Wenches Book Club le dieron lo máximo, 5 y la etiquetan The best books you aren’t Reading.

4.5-4.75 estrellas le dan en Ana’s Attic

3 estrellas en Dirty Girl Romance: disfrutó mucho del estilo con el que está escrito y lo encontró entretenido, aunque le faltaban algunas cosas para convertirse en una lectura de 4 o 5 estrellas.

8 comentarios:

  1. La tengo apuntadísima desde hace siglos porque, sin querer spoilear, me recuerda a los Original Sinners de Tiffany Reisz, así que voy a intentar leerla rápido. Soy consciente de que precisamente el hecho de me recuerde a una serie que me gusta tanto puede hacer que la esté comparando todo el tiempo, veremos a ver si logro no hacerlo.
    Estupenda reseña, como siempre.
    Besotes!

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    1. No he leído nada de Reisz, así que no puedo comparar. Las dos que he leído de Simone me gustan, aunque encuentro esa desconexión entre el fondo y la forma, es muy erótico para la historia que cuentan. Leeré con interés a ver tu experiencia con esta autora.

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  2. A mi en lo personal no me van las novelas eroticas, me aburre tanta escena sexual 😅 pero con esta me ha picado la curiosidad, tengo debilidad por los romances prohibidos e igual le doy una oportunidad pronto. Gracias por la reseña, saludos!

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    1. Pues ya nos contarás, aunque si no te gusta lo de sexo todo el rato, no sé si esta te irá... La erótica sí que es un subgénero que leo, aunque sea de tarde en tarde. Necesito que equilibren bien el aspecto erótico con el emocional, y que no haya sadomaso sangriento, que me revuelve el estómago. Algunas de las novelas que he leído en los últimos años y que más recuerdo, son de este tipo, como las de Cara Mckenna (especialmente After hours, Unbound y Willing victim), Raw, rough and ready de Lorelei James o Having her de Jackie Ashenden.

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  3. Excelente tu reseña y muy de acuerdo es una novela un poco fuerte para quien no sea de mente abierta pero si me gusto mucho, y como comentas hay buen equilibrio entre lo erotico y el romance.

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    1. Me alegro de que coincidamos en esta. Hace falta un poco de mente abierta, sí.

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  4. Hola Bona!! Leí tu reseña y estoy en shock jajajajaja me crié en la religión católica, no asisto a misa todos los domingos, ni le rezo a la virgen, así que no se si se me sigue considerando católica; pero siento que tengo que conseguir leer este libro y darme cuenta que tan "shockeante" me resulta, creo que todo radica en que tan mente abierta puedo ser y que considero como falta de respeto hacia la religión. En cuanto lo lea, escribo por aqui mi comentario. Gracias una vez más!

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    1. Sí, por favor, cuéntanos aquí. Estoy deseando leer tu opinión. Yo lo llamo «ser de educación católica», aunque uno no sea practicante o creyente. Por eso ciertas cosas las entiendes mejor pero chocan, claro que chocan.

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