Un enemies to
lovers bien majo
DATOS GENERALES
Título original: The Hookup Plan
Subgénero: contemporánea
Fecha de publicación: 8/2022
Parte de una serie: The
Boyfriend Project #3
1.ª edición: 8/2022
Págs.: 400
Grand Central
ISBN13: 9781538716687
SINOPSIS (según Fiction Data Base)
La exitosa cirujana pediátrica London Kelley solo necesita encontrar un poco de equilibrio y desestresarse. Según sus amigas Samiah y Taylor, lo que London realmente necesita es un rollo casual. Una noche de diversión sin ataduras. Pero nadie, y menos London, esperaba que sucediera en su reunión de la escuela secundaria con Drew Sullivan, millonario, dueño de unos abdominales deliciosos y, oh sí, su archienemigo.
Ahora London está segura de que el camino al infierno está pavimentado con
buen sexo, porque descubrió la verdadera razón por la que Drew está de regreso
en Austin: para decidir si su amado hospital permanece abierto. Peor aún, Drew
está haciendo todo lo posible para demostrarle que es un tipo decente al que
realmente le importa. Pero Londres no va a caer en la trampa. Porque si bien
dormir con el enemigo es una cosa, enamorarse de él definitivamente no es parte
del plan.
¿Entra dentro de “Lo mejor de la novela romántica”?
Acaba de salir y la tengo bien arriba ya en mi base de datos, la 1221. No me extrañaría que a final de años la escogieran entre lo mejor del año y entrara entre las mil mejores. Ha tenido crítica de DIK A- en All About Romance, 5 estrellas en The Romance Dish y 4.5 estrellas en Smitten by Books. Es uno de los libros recomendados por Urban Book Reviews y starred reviews en Kirkus y LibraryReads. Tiene ese tópico que nos encanta tanto de enemies to lovers.
CRÍTICA
Un libro que te brinda el malsano placer de ver cómo dos discuten, y se pican... o el enemies to lovers en perfecta acción. Así me alegró la parte final del verano, en septiembre.
En realidad, la parte de enemigos la pone más bien ella, London la que es hostil a Drew desde los tiempos del instituto.
Se esforzaba por ser la mejor, conseguir las máximas notas, era la número uno del instituto. Hasta que llegó él: guapo, simpático y cañón, no solo bueno en el deporte, no, ¡encima tiene notas fantásticas!
Entraron así en una rivalidad por ser el mejor alumno, el valedictorian ese que da el discurso de graduación.
La resentida London le coge una tirria inmediata… Y así sigue, ¡quince años después!, odiándolo a muerte.
¿Y Drew? Pues no. Un tipo ideal en todos los sentidos: inteligente y majo, y físicamente atractivo. Aunque ella no lo sepa, siempre fue su fan número uno.
Se reencuentran años después, en una fiesta de antiguos alumnos. Drew es la estrella. Ha triunfado en vida, se hizo millonario en uno de esos hedge funds que manejan dinero ajeno con alegría. Ahora tiene su propia empresa.
Cuando se vuelven a ver, a London se le revuelven todas las tripas de hostilidad contra Drew. Y se le alegran los ojos con su físico.
London está en un momento de estrés. Es cirujana pediátrica divina de esas adoradas por pacientes y enfermeras por igual. El hospital público donde trabaja tiene problemas. Y ella tiene que decidir qué hacer cuando acabe su residencia.
Añádele tensiones familiares y que no se cuida nada, hipertensión…
Sus amigas le recomiendan que se relaje, que mira, oye, que desfogue un poco dándole una alegría al cuerpo.
Así que decide tener un rollo de una noche, pura fantasía, con sí, su némesis, Drew. Piensa London que Drew se largará después de la reunión de antiguos alumnos.
No es así, pero él se lo calla. Resulta que como el hospital tiene problemas, antes de privatizar o no, encargan una auditoría para ver si es posible seguir siendo públicos y económicamente viables. ¿Y quién está al frente de los auditores…? Sip, Drew.
Otro motivo más para chocar.
Aunque… lo advierto, el enemies to lovers, eso que tanto nos gusta de ver a dos chinchándose, y diciéndose de todo, esa deliciosa hostilidad… dura más bien poco.
Sí, la chispa esa de enemigos se apaga pronto.
Pero para entonces puede que te pase como a mí, que les había cogido cariño a los personajes… Quieres ver cómo el adorable Drew consigue enamorar a una mujer tan intensa.
Como él se tiene que quedar en Austin un tiempo, el rollo de una noche pasa a ser de dos, y de tres… y acaba como tiene que acabar, que para eso es romántica. Lo de «solo sexo» nunca funciona.
London se encuentra un poco en una encrucijada. Con su familia hay algún problemilla, su padre, sus medio hermanos… Y profesionalmente va a acabar su residencia y tendrá que decidir dónde trabajar como médico. Varios hospitales por todo EE. UU. reclaman a esta wunderkind de la cirugía pediátrica.
Ya comenté que padece hipertensión, aunque debe ser joven, calculé treinta y cuatro años. Tiene que llevar una vida más sana.
La verdad es que algunas de sus costumbres, sobre todo a la hora de comer, son de lo más insanas. No me extraña que la pobre esté así.
Come de culo, como tantas otras heroínas estadounidenses de romántica. Vaya cultura culinaria más pobre. De eso que te sube el colesterol solo con leerlo.
Si no sabes cocinar, es muy difícil llevar una vida sana. Harás como London, comer fuera, y todo el rato con grasas malsanas, hidratos de carbono a tutiplén, sal por un tubo… Muy palatable, sí, pero funesto para tu salud.
Como esas «patatas bravas» (en español en el original), con lo que ellos llaman aioli, que supongo que sea nuestro alioli.
Parece mentira que sea médico y se maltrate tanto. Ni tiene actividad física, ni come en condiciones, trasega más alcohol que un cosaco,… Lo único bueno es el apoyo emocional que obtiene de sus amigas.
Los issues de Drew vienen por parte de madre. Pero es mejor descubrirlo leyendo.
Me encanta la paciencia de Drew, lo considerado que es con los sentimientos y los propios tiempos de London. Poquito a poco. Él sabe lo que quiere, pero lee en London como un libro, así que está ahí para apoyarla y ayudarla. Le ofrece lo que necesita, no pretende saber mejor que ella lo que le conviene.
Ha sido fantástico volver a una contemporánea narrada en tercera persona, el estilo normal y corriente de toda la vida. Es un placer intuir lo que sienten y piensan, y no que te lo den todo mascadito, con sus rumiaciones, muchas veces inanes.
De esta novela me gustó sobre todo el arranque, y toda la parte intermedia. Quizá el final es más sentimental,… pero se lee bien. Los dilemas profesionales los resuelve London considerando, sobre todo, lo que ella quiere, profesionalmente. Parecería en un punto que es un libro para que ella elija entre progresar en su carrera o quedarse con su familia o su novio… Pero luego no es así. London decide su futuro por motivos estrictamente profesionales, lo que realmente quiere hacer como cirujana pediátrica.
Sí que me pareció raro cómo cuenta lo sexual. Para ser una relación que empieza como un rollo, las escenas sexis del principio te las ponen en plan fundido a negro. Más tarde sí que mete alguna explícita, estupenda, apasionada. No hay raruneces.
No es la forma habitual de contarlo en Romancelandia, que los primeros encuentros sexuales son detallados y luego otros folleteos los pasan por encima.
No había leído nada de Farrah Rochon. Como vi las buenas críticas y estaba a menos de un euro, ni me lo pensé. Ha merecido la pena. Tengo que mirar a ver qué otras cosas están recomendadas.
Valoración personal: notable, 4
Se la recomendaría a: quienes gusten del enemies to lovers.
Otras críticas de la novela:
En español, no he encontrado críticas.
Paso al inglés.
The Romance Dish, 5 estrellas.
En All About Romance, DIK A-.
Smitten by Books, 4 ½ estrellas y Top Pick!
Starred review en Kirkus Reviews.
Culture Fly, 4 estrellas.
Harlequin Junkie, 3 estrellas.
Por malévola curiosidad he echado una ojeada a ver qué dicen de este libro otras de mis páginas habituales, Smart Bitches Trashy Books y Dear Author… Ah. No lo mencionan. Mira que es un libro que está gustando mucho.
Cada vez les saco menos partido a las recomendaciones que hacen estas dos páginas. Yo no sé si es que están ya cansados, todo les estraga y son incapaces de encontrar cosas nuevas que les entusiasmen…
Pero mira, en All About Romance, que tiene más años aún, sí que siguen al pie del cañón y todos los meses te sacan una decena de libros con calificaciones de A o A-.
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