jueves, 8 de febrero de 2018

Crítica: “Sweetest scoundrel”, de Elizabeth Hoyt

La mujer traumatizada sanada por el amor de un buen hombre
 
Grand Central, nov-2015
DATOS GENERALES

Título original: Sweetest Scoundrel
Fecha de publicación original en inglés: 2015
Subgénero: histórica/1741, Inglaterra georgiana

Parte de una serie: libro 9.º de Maiden Lane

NO TRADUCIDA AL ESPAÑOL

SINOPSIS

Ella se pone al mando
Remilgada, educada y ahorrativa, Eve Dinwoody se dedica sólo al negocio cuando se refiere a proteger la inversión de su hermano. Pero cuando se muestra conforme con controlar el dinero del primer jardín de recreo de Londres, Harte's Folly, se encuentra chocando con un canalla de lo más exasperante que no puede ser controlado.
Él es quien dirige el espectáculo
Grosero y audaz, Asa Makepeace no tiene tiempo para una mojigata tacaña como Eve. Como el propietario del mítico jardín, ya tiene bastantes sopranos egocéntricas con las que tratar.

¿Entra dentro de “Lo mejor de la novela romántica”?
Sí, no estaría entre las mil mejores pero sí entre las dos mil, por ejemplo. En la encuesta de All About Romance la escogieron ganadora en la categoría historia de amor más luscious, o sea sabrosona, picante, esas cosas.
Cuando en verano de 2015 NPR hizo una encuesta sobre las cien mejores novelas románticas, toda la serie Maiden Lane se incluyó en el Top 100.
Fue finalista al premio RITA en la categoría Historical Romance: Short, o sea novela romántica histórica de longitud corta. Pero la ganó It started with a scandal, de Julie Anne Long que, esa sí, entró en mi lista de Las mil mejores novelas románticas, en el puesto 751.

CRÍTICA

El mes pasado hablé de la entrega 7.ª de la serie Maiden Lane, y ahora salto a la 9.ª He releído la del medio, Dearest rogue, de la que ya hablé en 2016, y que en una relectura ganó bastante. Creo que es mejor leída en el marco de toda la serie.
He resumido esta novela diciendo que ella es una mujer traumatizada a la que sana el amor de un buen hombre, un poco dándole la vuelta al tópico de romántica de muchachas virtuosas que redimen a héroes torturados.
Pero la novela va un poquito más allá.
La mujer traumatizada es Eve Dinwood, medio hermana del malévolo duque de Montgomery. Este infame tipo fue uno de los secundarios de las novelas anteriores, especializado en chantajear a todo hijo de vecino. No es buena persona, no, y ahora ha tenido que irse del país.
Deja a su medio hermana (hija bastarda del duque, su padre, otro impresentable) encargada de su inversión en el jardín de placer Harte’s Folly, del que es inversor. Para Eve, después de su destrucción por el fuego, intentar reconstruirlo a lo grande, como pretende el dueño, Mr. Harte, es una pérdida de tiempo y dinero, así que se plantea seriamente vender a un tercero la parte de su hermano.
Mr. Harte es un hombre bien viril, algo salvaje, de hombros anchos y con su misterio. Porque en realidad, estamos ante Asa Makepeace, hermano de otros protagonistas de entregas anteriores y que se separó de su muy religiosa familia hace años. Al parecer, a su padre eso del teatro le parecía de lo más pecaminoso.
Ama el teatro. Para él, es lo primero, lo segundo y lo tercero. Lo ama con gran pasión, que consigue transmitirte. En cierta ocasión dice algo así como que tú ves el vestuario de trapillo, lo feos que son los actores y actrices, lo mezquino de todo,… pero que cuando se suben al escenario, les iluminan las candilejas y abren la boca, entonces la magia obra y son dioses y diosas en el escenario.
Un tipo así de apasionado, que además tiene su mal genio, no parece lo mejor para ayudar a Eve a superar sus problemas. Es un hombretón francamente sensual, muy seguro de su cuerpo y del placer que con él obtiene.
A Eve le aterran los perros y los hombres. No soporta que la toquen. Va a todas partes con su guardaespaldas, Jean-Marie. Asume que nunca será normal ni tendrá una familia, a pesar de que le gustan los niños.
A sus problemas psicológicos derivados de un trauma sufrido en su infancia, se le suma que no es particularmente atractiva. Es más bien normalita, y por mucho que su padre fuera un duque es hija bastarda. Gracias a que tiene a su medio hermano, ese tipo tan cínico, cruel y manipulador, que sin embargo la protege y la mantiene. Y con un poco de dinerillo y su cerebro para inversiones, consigue tener el riñón cubierto.
Son una pareja de lo más dispar. Ella tirando a inteligente, refinada, sutil. Él, una fuerza de la naturaleza, carnal y potente. Como si una damisela Austen se encontrara con un franco y alegre Tom Jones.
Eve y Asa chocan un poquito. Por aquello de que ella no quiere invertir dinero en el teatro, y Asa lo necesita desesperadamente para poder reabrirlo de manera espléndida.
Si no hay dinero, y encima se empiezan a sufrir accidentes y problemas que se ve que son intencionados,… lo de la inmediata reapertura del teatro queda en entredicho.
Así que Asa necesita que todo vaya bien. Seguir teniendo dinero. Que se ponga en escena una ópera estupenda. Que todos los suyos (músicos, cantantes, cuerpo de baile) estén a salvo,…
No tiene tiempo, simplemente, para esta mujer tan irritante.
Y sin embargo,… no puede evitar fijarse, sentirse atraído, respetar su inteligencia, su juicio, quedar desconcertado por sus terrores repentinos,… Y acabar colado por ella, sin remedio.
Eve siente atracción física por Asa, pero guarda las distancias, porque esto del traumita tiene su cosa. Lo bueno es que se siente tan segura a su lado, que no teme hacerle preguntas claras sobre las cosas que suscitan su curiosidad sobre el tema sexual. Cómo es el cuerpo, cómo funciona,… y cuidadosamente va poniendo en práctica lo que aprende. Pasito a pasito.
Y ese hombre tan enorme, tal fuerza de la naturaleza, enorme y potente, es capaz de contenerse y dejar que sea ella, Eve, la que marque el ritmo, la que determine qué y cómo hacer las cosas.
Las escenas eróticas como es costumbre en Elizabeth Hoyt, son bien sexis y logradas. No, de verdad, normalmente están bien, pero aquí yo creo que se luce verdaderamente.
Me gustan los personajes, la trama, la parte amorosa, y la sexual, y también por una vez, me interesó el cuento que iba contando al principio de cada capítulo. Y tiene el atractivo añadido de ambientarse en el teatro de mediados del siglo XVIII, sobre todo las óperas.

Valoración personal: notable, 4

Se la recomendaría a: los aficionados a la novela romántica histórica con su toque sexy y aficionados al tópico de «los opuestos se atraen».

Otras críticas de la novela:

No está traducida, así que no es extraño no encontrar críticas en español. No obstante, en inglés hay bastantes, y pongo aquí unos cuantos de blogs y páginas reconocidos.
En All About Romance, una B+
Smart Bitches Trashy Books, no convenció tanto, hubo dos críticas, una de C+, y otra de B.
También mereció una B en la página Fiction Vixen.
En RT Book Reviews la calificaron con 4 ½ estrellas y Top Picks! y estuvo nominada en sus premios anuales en la categoría de mejor histórico largo. Ganó Say yes to the Marquess, de Tessa Dare, una novela que también entró en mi lista de Las mil mejores novelas románticas, en el puesto núm. 824.
Heroes and Heartbreakers le dedicó uno de sus artículos First Look.
Y acabo con Miss Bates, a quien esta novela le gustó.

No hay comentarios:

Publicar un comentario