Una novia por correo
contemporánea
DATOS GENERALES
Título original: Duncan’s bride
Subgénero:
contemporánea
Fecha de publicación
original en inglés: 1990
Series: Patterson-Cannon
#1 / Silhouette Intimate Moments #349
Páginas: 254
1.ª edición en España:
Traductor: Elías Sarhan
Assy
Fecha: 5/2002
Editorial: Harlequin
Ibérica
Páginas: 320
Colección: Harlequín
grandes autoras, 12
Otras ediciones:
Colección Linda Howard Nº 1 (2008) - eBook (2017).
SINOPSIS (en
Harlequineras)
Madelyn había viajado hasta la salvaje tierra de Montana para
casarse con alguien a quien ni siquiera conocía. Una vez allí, ¿se conformaría
con menos de lo que podía ofrecerle Gideon
Reese Duncan, que era absolutamente todo?
¿Entra dentro de “Lo mejor de la
novela romántica”?
Sí, en mi lista de Las mil mejores novelas de romántica aparece en el
puesto 303. Y lo mismo en otros dos
Top 1000, el de Book Binge (la n.º 62),
y el de RomanceNovels.Me (la n.º 349).
Apareció la 68 de una lista de cien
mejores novelas románticas de la página web The Romance Reader. En la encuesta
de 1997 de All About Romance sobre los favoritos de toda la vida, estaba la 26. Tuvo crítica de DIK A en All About Romance. No es de
extrañar que más de una vez, la consideren como una de sus favoritas.
CRÍTICA
Tenía yo ganas de leer
algo cortito y me encontré en el Kindle con este Silhouette de 1990 escrito por
una de las grandes, Linda Howard. Una de las grandes aunque ahora esté de capa
caída, no por sus méritos o deméritos como autora, sino por comentarios sobre
el género que han sido considerados poco inclusivos y hasta hay quien la considera
racista. Al parecer, sus miras son algo estrechas respecto a qué debe ser
considerado novela romántica.
Vamos a hablar de esta
novela viejuna. Se supone que es contemporánea, hay automóviles, y equipos
estéreo, pero tiene un aire muy anticuado, un poco como me pasó con otra
novelita genérica de Howard, Lecciones privadas. Se
ambienta en Montana, un estado del Oeste de los EE. UU., en la parte montañosa.
Bueno, de hecho el nombre «Montana» viene del español montaña, según dice la Wikipedia
Reese Duncan tiene un
rancho. Anuncia en el periódico que quiere una esposa para tener hijos y
compartir el trabajo. El agro es lo que tiene, que resulta muy sacrificado
y por lo tanto no hay tiempo de ir de bares a ver si te ligas a alguien.
El periódico acaba en
manos de Madelyn, una muchacha muy mona y estilosa ella, y con dinero, pero que está harta
de vivir en Nueva York y por razones equis le parece bien dar una oportunidad a
este gañán. Es la «novia de Duncan» a la que se refiere el título original.
Lo de estos dos fue insta-lust (por parte de ambos) e insta-love (por el de ella). Ya sé que
el formato harlequinero no da para que te andes mucho por las ramas, pero hasta
a mí me parece excesivo eso de echarse el ojo y en seguida desear echarle la
mano. Acaban casados con lo que encaja en el tópico «matrimonio de
conveniencia».
Reese es, a ver, no hay
otra forma de decirlo, un gilipollas XXL. Controlador, desconfiado, como su
primera mujer lo dejó en la ruina, ya todas son malas. Haga lo que haga
Madelyne, lo va a interpretar mal.
Sí, le ves el atractivo, porque es un vaquero
sexi, alto y cuadrado como un rugbista. Pero fuera de eso, de verdad, es de los
que te hace poner los ojos en blanco cada dos por tres. Parece que al final
aprende la lección, confiará en ella, y se disculpará… no lo suficiente –para
mi gusto– después de lo imbécil que ha sido a lo largo del libro.
Madelyn, en cambio, es
una heroína fuerte y bastante sensata. Este muchacho le gusta, y hace un
esfuerzo sincero por encajar en el rancho, trabajar en lo que le toque, sacar
adelante este matrimonio que contrajo (ella sí) enamorada de él hasta las
cachas. Incluso cuando él se pasa tres pueblos por algo que es una tontería y
en vez de besar el suelo por donde ella pisa, le recrimina que es como su ex,…
incluso entonces Madelyn reacciona de manera razonable, esperando que Reese se
diera cuenta de lo mamón que ha sido y recapacite.
A pesar de todo, me
pareció muy entretenida. Me interesó esa lucha de Reese y Madelyn por sacar adelante
el rancho, cómo luchan contra una naturaleza nada benévola, el frío, la nieve,…
No sé, quizá esa ambientación le dio un punto extra. Así que no puedo decir
otra cosa. Yo lo pasé bien leyéndola, y me gustó pese al cretino del
protagonista.
La tensión romántica
está lograda, ya sabéis cómo funciona el tópico «matrimonio de conveniencia»: a
ver cómo y cuándo se enamoran y cómo se revela. La parte de tensión sexual no
resuelta se extiende poco en el tiempo; en cuanto se casan, la autora nos
regala unas cuantas escenas explícitas bastante apasionadas. No recordaba yo
así los harlequines de aquella época. Igual Silhouette Intimate Moments era un
poco más moderna y subida de tono que Harlequín.
Esta historia, en otras
manos, la habría acabado tirando por la ventana; solo que, al estar contada de
una forma que engancha, te la lees de un tirón aunque tenga un macho alfa tan macho-macho man que da asco como
protagonista.
Y algo de especial
tiene cuando se sigue leyendo y comentando casi treinta años después de su
publicación. Tiene mérito, porque estas novelitas se supone que tienen una vida
corta, de quince días y nada más.
Así que si la veis
baratita, puede merecer la pena echarle un veo. Lo más probable es que no te
decepciones, siempre que tengas en cuenta qué tipo de novelita es.
Añado que es la primera
del dúo Patterson-Cannon, junto con Loving
Evangeline (Amando a una mujer, 12/1994) el SIM n.º 607. El prota es
Robert, hermanastro de Madelyn. Es un secundario destacado en esta historia.
Tiene una frase con su hermana que se me ha quedado en la cabeza:
«Nunca corras si puedes caminar, nunca camines si puedes estar de pie, nunca estés de pie si puedes sentarte, nunca te sientes si puedes tumbarte» y ella añadió «Nunca hables si puedes escuchar».
Esto último, en
particular, me ha hecho pensar en lo mucho que parloteamos, sin mantener
conversaciones, sino monólogos, cada uno soltando su speech pero sin escuchar realmente lo que dice el otro. Voy a
intentar yo escuchar más a los demás, en vez de interrumpir, a ver si me va
mejor.
Valoración personal: buena, 3
Silhouette, 9/1990 |
Se la recomendaría a: los aficionados a las contemporáneas en el Oeste montañoso de
los EE. UU.
Otras críticas de la novela:
En español, tenemos la crítica
de Rosamina en el Rincón de la Novela Romántica, que le pone 3,5 estrellas.
Thersuva, en Críticas Literarias Regina Irae, habla positivamente de la novela.
La biblioteca del sastre le da 6 sobre 10.
Ahora, en inglés.
La calificaron como DIK A en All About Romance a una reedición del año 1998.
En AudioGals puntuaron con una B,
tanto a la historia como a la narración del audiolibro, por Lesa Lockford.
Gracias por traerla desde el saco del olvido.
ResponderEliminarLecciones privadas no repetiré, pues la siento reciente, hará tres años, pero la tengo fresca.
La del hermanastro, la leí, pero trataré de releerla, no me anima mucho, pues de esa hicieron una película, que se ponia sola en tv.
Se te ocurre otra que puedas recomendar, así de cortas??
Gracias!!!!
He leído sobre todo harlequines de hace años. Está muy bien la serie Altos, oscuros y peligrosos de Suzanne Brockmann, la saga de los MacKenzie, o «Tentación» de Sandra Brown. También las de Crusie o Krentz cuando les daba por estas cosas. Ya en inglés me gustan mucho «A whole new light» de Sandra Brown o «Anyone but you» de Jennifer Crusie. De las más recientes, a la gente le gusta mucho Sarah Morgan, aunque a mí se me hace bola.
ResponderEliminarDe todas formas, poco a poco voy poniendo por aquí novelitas genéricas de estas.