Gótico à la Holt, un subgénero en sí mismo
DeBols!llo, 8/2012 |
DATOS GENERALES
Título original: The India fan
Género: suspense
Fecha de publicación
original en inglés: 1988
1.ª edición en español:
Grijalbo, 9/1992
Traductora:
María-Antonia Menini
448 págs.
Colección: Bestseller
oro
SINOPSIS (de la Casa del Libro)
Desde siempre, la vida de Drusilla
ha estado dominada por los arrogantes Framling: lady Harriet y sus hijos, Fabian y Lavinia. Precisamente, un día,
mientras jugaba con estos de pequeña, Drusilla descubrió algo que marcaría su
destino: un abanico de plumas de pavo real. Tras su paso por una escuela de
señoritas en Francia, Drusilla ve su corazón inclinarse hacia Fabian, aunque se
siente a su vez turbada por el joven Dougal, culto y para nada frívolo. Mas su
destino sigue manteniéndola vinculada a los Framling y, como institutriz de la
hija de Lavinia, acepta reunirse con ella en la India, país sensual y
misterioso. Drusilla volverá después a Inglaterra, pero la ciega maldición del
abanico indio no la abandonará tan fácilmente...
¿Entra dentro
de “Lo mejor de la novela romántica”?
Estaría entre las 2.000-5.000 mejores novelas románticas. Es un clásico
de la novela romántica. Tuvo crítica DIK A en All About Romance. Entró en el
Top 100 de novelas románticas que en 2015 publicó NPR. Por último, estuvo en la
lista Top 1000 de RomanceNovels.Me, en el núm. 904.
CRÍTICA
El año pasado hizo treinta años que
se publicó El abanico indio. Se sigue publicando y releyendo. Eleanor Burford
(1906-1993) es una autora favorita de muchos lectores, tanto con este seudónimo
de Victoria Holt como los de Philippa Carr y Jean Plaidy. Si te gusta la novela
romántica y la histórica, sus libros son una buena opción,… siempre que sepas
qué esperar.
Esta novela está narrada en primera
persona. La protagonista, Drusilla, es la hija del párroco de un pueblo
dominado por el casoplón de los Framling. Empieza la novela describiendo esa
localidad, y lo primero que te cuenta es que el hijo de esa familia noble,
Fabian, la secuestró cuando ella era un bebé y que, años después, ella se
convirtió en su esclava.
Y luego te sigue contando otras
cosas, con lo que ya te ha enganchado para saber cómo demonios, con esa
presentación, puede Fabian ser el héroe de esta historia.
Es una novela contada desde la
perspectiva de Drusilla. Muy detallada sobre cómo transcurrió su infancia y su
juventud, como acompañante de la chica joven de la mansión, Lavinia. Son
páginas y más páginas que pueden hacer perder la paciencia al lector más
tolerante, porque esperas una novela romántica y la presencia de Fabian es
realmente limitada.
Pasan así más de cien páginas, con
todas esas cosas, y ahí es cuando tienes que aceptar que este tipo de novelas
no tiene que ver con las románticas actuales. Drusilla es la protagonista y el
80 % de la novela está dedicado a ella: lo que la pasa, lo que siente y piensa.
No está mal estar en su cabeza, porque es joven sensata y sabe no morderse la
lengua frente a los poderosos.
De vez en cuando, aparece Fabian. Es
más bien una sombra que está ahí, en muy segundo plano. Como es propio de la
romántica de la época, el héroe aparece un poco como una amenaza contra la
heroína, pero tú entrevés, sin necesidad de que te lo digan con palabras, y sin
que Drusilla sea consciente de ello, que en realidad Fabian tiene que estar
enamorado de ella, y que la va a proteger y velar por ella en todo momento.
La novela te llevará de Inglaterra a
la India y vuelta. Verás ese mundo desde la perspectiva de Drusilla, muy propia
de una inglesa del siglo XIX, y hasta si me apuras del siglo XX. Por lo tanto,
no es novela apta para el club de los ofendiditos, esos que se empeñan en el
presentismo, sin saber realmente nada de la
historia, ese «cementerio de aristocracias».
A mí me resultó un placer leer esta
historia. Las escritoras de romántica de aquellas épocas, especialmente
británicas, tenían un gran respeto por el lenguaje y la forma. Se esforzaban en
escribir novelas buenas, con heroínas sensatas y contenidas, y cierta firmeza
de carácter. Pienso en Georgette Heyer, o Mary Stewart, o M. M. Kaye.
Para disfrutarla tienes que aceptar
que...
... el héroe va a aparecer muy poco,
... no vas a saber lo que piensa o siente
porque será tan misterio para ti como para la heroína,
... no habrá sexo.
Cuando digo
que no hay sexo quiero decir que, aunque sí se alude a que algún personaje
tiene relaciones sexuales, no se describe. Y tampoco lo hay entre la pareja
protagonista.
¿Y romance, hay algo? Pues muy poco,
más lo que tú te imaginas que lo que hay sobre el papel.
¿Y qué hay, entonces, sobre el
papel? Pues la aventura personal de Drusilla, su crecimiento como persona,
tanto biológico como por lo mucho que ve y vive, y sin perder el oremus en
ningún momento.
También habrá aventura, misterio,
más de una muerte violenta, extorsión, el motín de los cipayos y algún que otro
niño.
A mí me ha gustado, es una novela
buena, que me entretuvo una vez que superé ese primer tercio de la novela que
es realmente pesado, de cuando Drusilla es una niña, y luego acompaña a Lavinia
en su nursery, y más adelante van
juntas a un internado, primero en Inglaterra y en Francia después.
Si le quieres dar una oportunidad a
esta novela, creo que te puede gustar, pero siempre que no esperes nada
parecido a Kleypas o Julia Quinn. Este tipo de novela no tiene nada que ver con
esas ligerezas sensuales. Si prefieres algo ágil y ligero, pues no, te va a
parecer un tostonazo.
Creo que la mejor manera de
acercarse a Victoria Holt es buscar alguna novela suya en la biblioteca más
cercana. Seguramente encuentres alguna, con este nombre o con los de
Plaidy o Carr. Así le puedes dar una oportunidad y ver si te puede ir o no su
estilo.
A mí me mereció la pena, porque me
gusta la historia, y puedo aceptar cuatrocientas páginas sin una escena sexual
y solo una o dos románticas, si el resto está bien tan bien escrito como esta
novela.
La he leído en inglés. En su
momento, hace años, la leí en traducción española, que me imagino que estuviera
bien, pero francamente no lo recuerdo.
Valoración personal: notable, 4
Se la recomendaría a: los aficionados a las historias bien escritas.
Otras críticas de la novela:
En el foro Romántica y Misterio comentaron este libro.
Y lo mismo en el foro ¡Ábrete libro!
Reseña que le da 5
tréboles en Juliana: This is my life / Esta es mi vida.
En inglés, tenemos crítica de DIK A
en All About Romance.
The Lit Bitch la califica con un 5 sobre 5.
Dear author le pone una B.
Hola.
ResponderEliminarInteresante el presentismo histórico. Para evolucionar y juzgar con perspectiva es necesario conocer y aprender del pasado, es algo que tengo presente como lectora. En otro caso grandes obras literarias se hubieran echado a la pira.
Como el panorama en romance histórico está como "para darle una patada a lo Charlot" (grandes frases las de mi madre 😂), estoy tirando de novelas antiguas que tengo por casa con más miedo que vergüenza. Todavía me quedan unas cuantas de Victoria Holt. Acabo de leer La leyenda de la Séptima Virgen, la verdad es que me ha tenido bastante entretenida. Y a mí que en parte me ha recordado esa aspereza que recoge los ambientes rurales en las novelas deThomas Hardy...
Reconozco el estilo que comentas, estoy de acuerdo contigo, son historias que están bien escritas. Tengo otra pendiente, El ópalo negro. Pero también me apunto El abanico indio por si se me cruza.
Un 😘
¡Me encanta la frase de tu madre! «Para darle una patada a lo Charlot», a ver si me la quedo, porque es rebuena. Sí que son un poco herederas de esa tradición novelística británica que sabe ser entretenida pero dura. Se esforzaban en escribir romántica pero bien, digna, en condiciones.
ResponderEliminarThomas Hardy es un escritor que me encanta, pero... buf, no es para todos los días, me parece durillo, ¿eh? Cada novela era más naturalista, más deprimente que la anterior. Creo que el único final feliz es el de «Lejos del mundanal ruido» y vaya, después de que los dos las pasen canutas.