Dos almas torturadas, tal para cual
DATOS
GENERALES
Título
original: Ghost
Subgénero:
suspense
Fecha de publicación original en inglés:
5/2019
Parte de una serie: Linear Tactical #5
Páginas: 296
SINOPSIS (según Fiction Data Base)
Dorian
Lindstrom, nombre en
clave Fantasma (Ghost), sabe que
todos se rompen bajo tortura.
Sus cinco semanas en una prisión enemiga
le enseñaron eso con una precisión despiadada. Ha recompuesto su vida lo mejor
que pudo con la ayuda de sus hermanos en Linear Tactical.
Nunca ha superado su amor por Grace Brandt, la intervención de ella en
su captura o el hecho de que ella muriese.
Pero a veces los muertos no se quedan
así.
Grace sabe que su pasado no puede ser
perdonado. Ha permanecido escondida todo el tiempo que pudo, pero ahora los
secretos que la asfixian lentamente ya no permanecerán enterrados.
Y el hombre al que ayudó a romper, el
hombre al que siempre amó, es el único que puede detener esta pesadilla.
Necesitará un fantasma para luchar
contra sus demonios, y él está más que dispuesto a demostrar que vale la pena
luchar.
El Fantasma se levantará.
¿Entra dentro de “Lo mejor de la
novela romántica”?
La he
leído porque soy fan de esta serie, y sí, está bien, pero diría que está como
mucho entre las 20.000 mejores, gracias a que tiene una crítica de 5 estrellas
en TBQ’s Book Palace.
CRÍTICA
Estaba viendo el otro día (aunque, en realidad, para
cuando publico esta crítica han pasado meses, ya que fue por junio) Capitán América: Civil War. Hacia el final, Tony Stark suelta:
«Manchurian Candidate, you're killing me. We're on a truce. Put the gun down».
No sé cómo lo habrán traducido al español. Pero
vendría a ser algo así como: «Mensajero del miedo, me matas. Estamos en tregua,
baja la pistola».
Me sentí obligada a explicarle a la milenial que veía
la peli conmigo la referencia: Manchurian
Candidate era una película llamada aquí El
mensajero del miedo, en la que los soviéticos hacían un lavado de cerebro a
un tipo para convertirlo en terrorista, igual que a Bucky.
Mi milenial de cabecera contestó que la mitad de las
referencias de Tony Stark no las entendía, pero que le daba igual.
En realidad, Manchurian
candidate fue primero una novela, de Richard Condon, publicada en 1957.
Luego hicieron una película, que es la que he visto yo varias veces, rodada por Frankenheimer. Es una de
esas que rodaron en los sesenta con look
televisivo, incluso en blanco y negro. Estaban Angela Lansbury (nominada al
Óscar como secundaria por este papel), Frank Sinatra y Laurence Harvey. Merece
la pena dar una oportunidad a este thriller político. En 2004 hicieron un remake con Denzel Washington y Liev
Schreiber, dos mocetones de esos que me gustan más que el jaspeado de moka de
Regma.
Ghost, de Crouch, gira en torno al mismo presupuesto: una
serie de personas entrenadas y condicionadas para ser asesinos perfectos. Con
una frase, los dominan a voluntad para que cometan crímenes. Aparentemente,
para el Tío Sam, solo que las cosas no son siempre lo que parecen.
Desde el principio de la serie Linear Tactical, todas
nos fijamos en Dorian, el tipo callado que sufrió indecibles torturas. Casi no
lo cuenta. Le cuesta estar con otra gente, prefiere los bosques y la
naturaleza, estar aislado, consigo mismo. Lo cual no quita que sea totalmente
leal a sus amigos de Linear Tactical.
Tiene sus momentos de pánico en que regresa a esa
horrible celda afgana. El PTSD es lo que tiene, que revives una y otra vez el
evento traumatizante. No es que lo recuerdes, no, es que vuelves a estar allí,
oyendo y oliendo y viendo las cosas que te traumaron.
En otro episodio anterior vimos que lo atacaron con
una ballesta, sin mucho daño. Así confirma que no son alucinaciones: Grace
Brandt, la mujer de su vida, está viva, y no muerta.
Agudiza sus sentidos para encontrarla, sobre todo
cuando esté en el bosque.
Cuando consigue dar con ella, descubrirá qué está
pasando. Alguien está matando a los agentes que formaban parte del grupo de
asesinos de cerebro lavado.
Grace, que ahora se hace llamar Ray, tiene muchos
secretos. A Dorian solo le dice parte. Quiere comprobar que no sea Dorian el
asesino, y marcharse. Dorian le echará una mano en la desesperada búsqueda del
asesino, al que deben detener para que no se acerque a Dorian y destruya esa
nueva vida que ha creado, y a aquellos a los que ama.
Las cosas son todavía más complicadas de lo que el lector cree. La historia dará un giro inesperado. Una parte la sospeché, pero otra
no la vi venir y, francamente, me encantó: es lo que nos gusta a los lectores de suspense,
que nos sorprendan.
Una historia de suspense romántico de las que a mí me
gustan, que entrelaza muy bien el romance con la intriga, y su poquito, o
muchito, de sexo, que no todo va a ser darse guantadas.
Disfruté como una enana de la ambientación, en plena
naturaleza de Wyoming. Para mí tiene de especial esos protagonistas,
imperfectos, pero que saben defenderse en la naturaleza, orientarse y sobrevivir
con lo que tengan a mano. Habría preferido, eso sí, menos peleas y más trucos
de supervivencia.
En su nota final, la escritora cuenta que el público
le pedía «el libro de Dorian». Ya sabéis cómo va esto, que un secundario atrapa
tu imaginación desde el principio y estás deseando saber más de él. Luego puede
chafarse la cosa y que su libro te decepcione (como me pasó con Daisy Bowman o Colin Bridgerton), o puede cumplir (como el libro de Alyssa y Sam)
o ser espectacular (como ocurrió con Adrian & Justine en The Black Hawk).
Cuenta Crouch que a mitad del libro le entraron dudas
de cómo iba la gente a recibir a Grace/Ray, una heroína tan dañada como Dorian,
¿no merecería él alguien más sencillo y dulce? Recomenzó la historia, con otro
tipo de heroína, pero vio que no funcionaba. Así que retomó la historia de Ray
y Dorian, dos personas perjudicadas, que han cometido crímenes, aunque no
fueran voluntarios sino manipulados por otros.
Se merecen su final feliz, uno apropiado para ellos.
No, no es un final tipo harlequín, de amor y lujo con grandes mansiones, ciudades
cosmopolitas y elegantes vestidos. Es, más bien, el sueño normal de encontrar
la persona que te entiende, que está a tu lado, con la que te entiendes
perfectamente, desde el punto de vista físico y emocional. Creas con esa
persona la vida adecuada para ti, apartada, rodeada de las cosas y la gente que
amas, y prescindiendo de lo superfluo.
No es mal plan.
Ahora, todo el planteamiento del lavado de cerebro y
convertir a la gente en marionetas insensibles con solo soltar una palabra, la
verdad es que me sigue pareciendo poco creíble, sea El mensajero del miedo, Bucky o los protas de esta historia.
Como dije antes, este libro lo leí en junio. Aproveché la prueba de Kindle Unlimited para leérmela todas de una tacada. Están escritas de tal forma que en cada una está el inicio de la
siguiente, con lo que te picas totalmente. Son adictivas.
A pesar de estar interconectadas, se pueden leer
perfectamente de manera separada.
De toda la serie creo que esta es la mejor, lo que no recuerdo es por qué no le puse 5 estrellas. Será que no me dejó resacosa.
Valoración
personal: notable, 4
Se
la recomendaría a: fans
del suspense romántico y sexi en formato corto.
Otras
críticas de la novela:
Solo he visto críticas en inglés, así
que os pongo las referencias que he encontrado.
TBQ’s Book Palace, 5 estrellas.
Sinfully wicked, 5 estrellas.
Books & Spoons, 5 cucharas.
The Reading Café, crítica positiva.
The Book Disciple, 4 estrellas.
Bitch N Books, positiva, pone el énfasis en el PTSD.
Cuando sea rica voy a tener un traductor de cabecera. Otra que me quedaré con las ganas de disfrutarla porque aunque la lea, en inglés, será a trancas y barrancas y no será lo mismo. Con lo que me gustan las de este tipo (suspense y naturaleza)...
ResponderEliminarJe, je. Buen plan. Siempre puedes mejorar tu inglés, aunque eso no siempre es posible, porque la vida nos tiene ocupadas en otras cosas.
EliminarYo tengo una idea parecida: si yo fuera rica, haría un «Siruela de romántica». Publicaría en español aquellas novelas de romántica que me parecen excepcionales y no están traducidas. Hasta las tengo ya pensadas, y son de géneros diversos. Empezaría por Julie James, Joanna Bourne, las históricas de Sherry Thomas, la serie Iron Seas de Meljean Brook y Flashpoint de Rachel Grant. Luego ya seguiría con cosas como esta Linear Tactical, las no traducidas de Jennifer Crusie, Alexis Hall o Cat Sebastian. También metería en el lote algunas de Kennedy Ryan, KJ Charles, Talia Hibbert, Lorelei James y Roni Loren, ahí sería más selectiva con las obras concretas que traduciría. Completaría los Troubleshooters de Brockmann. Y, por supuesto, haría la integral de Sandra Brown, porque estamos hablando de que yo sería rica y podría permitírmelo. ¿A que sería bonito...?
Precioso. Cruzo los dedos para que suceda!!!
Eliminar