Bobadita intrascendente de la que no recordarás
nada a los dos días de terminarla. Pero en sí, es muy entretenida, preciosa.
© Books4pocket, febrero 2015 |
DATOS
GENERALES
Título original: How to Seduce a Duke
Subgénero:
histórica / 1815
Fecha de
publicación original en inglés: 2006
Parte de
una serie: Las hermanas Royle #1
1.ª
edición en español: Titania, 2010
Traductora:
Claudia Viñas Donoso
SINOPSIS
(de la contraportada)
Tras la muerte de su tutor, las tres hermanas Royle se dirigen hacia
Londres dispuestas a descubrir el enigma de sus progenitores y encontrar un
esposo acorde con su linaje. Porque, a pesar de parecer sencillas campesinas,
estas bellas jóvenes albergan un secreto que puede cambiar el futuro de
Inglaterra.
Con el inicio de la temporada social londinense, Mary, la mayor de las tres, emprende la conquista del apuesto
vizconde lord Wetherly, en quien ha posado sus ojos desde su llegada a la
capital.
Sin embargo, su juego de seducción no será fácil: el hermano del vizconde,
conocido como el Duque Negro por su
reputación con las mujeres, no permitirá que ningún Wetherly caiga en la trampa
de una damisela cazafortunas, aunque ésta sea tan fascinante como Mary. Coqueteará
con ella, le robará el corazón y luego lo romperá en mil pedazos para nunca más
volvería a ver, a pesar de que, tal vez, después de conocerla, eso sea lo
último que desee.
¿Entra dentro
de “Lo mejor de la novela romántica”?
No, pero sí dentro de “lo bueno”, allá por el puesto dos mil y pico. O
sea, que tampoco es de las mejores-mejores, pero está muy bien. Fue uno de los
Top Picks del año 2006 para la página web Romance Readers at Heart. Y ha estado
en el puesto 32 de las Top 100 Joyas románticas del Club Romántica (ahora no sé
cómo estará, porque suele ser una lista que varía).
CRÍTICA
Otro libro
comprado en una oferta con otros del mismo sello.
Como puede
verse por la sinopsis, la cosa va de la Regencia, un duque libertino, una joven
bella y honrada con un misterioso pasado… Nada original, pero contado de forma
muy entretenida.
Las tres
hermanas Royne han crecido en el campo, y consideran su padre a un médico que
fue quien las crió. Pero en realidad, no eran hijas suyas, sino que siempre
creyeron que habían sido abandonadas. Ahora su “padre” ha muerto y han dejado
Cornualles para dirigirse a Londres, con una pariente lejana.
Pasarán la
temporada londinense, lo cual ya sabemos muy bien lo que significa: bailes,
patios, terrazas, jardines a la luz de la Luna, sí, tampoco es nada original.
Aprovecharán
para dos cosas, la primera es buscar marido, y la segunda, investigar a ver si
averiguan cuál es su verdadero origen, quienes fueron sus padres biológicos.
Mary, la
mayor de las hermanas, es la más responsable, la que anda siempre mirando que
no se malgaste, porque ella es bastante escéptica del resultado de sus
indagaciones. Ella pronto pone sus ojos enamorados en un lánguido petimetre, un
vizconde de dorados cabellos y ojos azules que es todo lo que ella sueña en un
caballero. Héroe de guerra, guapo, encantador,… ¡es perfecto! Y parece que es
correspondida. Mejor que mejor.
Pero Mary
topa con un obstáculo formidable: el hermano mayor del vizconde, Rogan, el
duque de Blackstone, a quien todos llaman el Duque Negro por su mala
reputación. Os lo podéis imaginar: típico duque de la Regencia, libertino de
esos a los que nunca les ves hacer nada particularmente perverso, que desconfía
de las mujeres porque en una ocasión conoció a una que era una ambiciosa
cazafortunas, etc. etc.
Así que
viene a ser algo así como una historia de “enemigos a amantes”, porque Rogan y
Mary no se tragan, y están todo el rato chocando. Se engañan el uno al otro,
fingen coqueteos, Rogan procura alejar a su hermano de esta chica campesina a
la que considera una cazafortunas,…
Pero esto de andar vacilándose el uno al otro hace que acaben no
conociendo ni siquiera sus propios sentimientos.
La ambientación, ya lo he dicho, es tu Regencia estándar. El tono
general de la obra, ligerito, una cosa a medio camino entre Loretta Chase y
Julia Quinn. Con menos profundidad emocional que las novelas de Chase, es como
una pompita de jabón, pero con un poquito más de sentido de la época que los slapstick de la Quinn.
No cae en la astracanada, y cuando la cosa se va por vericuetos de
“tonto malentendido”, el libro lo resuelve rapidito y acaba con un happy ending bastante creíble. Porque es
más bien cortita, en una tarde te la puedes leer.
O sea, que está bastante bien, te pica, te intriga, y lo lees en
un suspiro. Luego se te olvida pronto (de verdad, entre la redacción de esta
crítica y la publicación de la misma en mi blog, ya no sabía de qué iba el
libro, y no ha pasado ni un mes) y a otra cosa, mariposa.
No había leído nada de Kathryn Caskie, y me ha parecido muy…
entretenida, en ese estilo Regencia ligerito del que sólo puedes esperar un
buen rato. Nada profundo. Flojea un poco en la parte erótico-romántica, pues no
le ves (o, al menos, yo no le encontré) demasiada intensidad emocional ni
chispa erótica entre los protas.
Una cosa que no me gusta es la parte sobre el origen biológico de
las tres hermanas Royce. No destripo nada (porque lo dicen bastante pronto en
la novela) cuando digo que la teoría es que el príncipe regente (quien luego
fuera Jorge IV) tuvo trillizas de su amante (o esposa con matrimonio nulo) la católica
María Ana Fitzherbert, allá por 1795. Se supone que murieron, pero en realidad,
se las entregaron al médico del príncipe, que es quien se las llevó a
Cornualles. Los pocos enterados del asunto, en la corte, piensan que murieron.
Pero no, podrían haber sobrevivido y ser estas chicas.
Así que la hipótesis de trabajo de las hermanas es que son hijas,
en realidad, del príncipe regente y de su antigua amante.
En sí, la historia-ficción no me disgusta, sería algo tan grotesco
que la fantasía no es molesta. No, lo que me cabrea es que este tema no ser
resuelve en el libro. Es un truco tan evidente para que sigas leyendo las otras
novelas de la trilogía a ver si es verdad o no es verdad. Por cierto, que si
alguien quiere seguir, las otras novelas son How to Engage an Earl / Cómo atrapar a un conde (2007) y How to Propose to a Prince / Cómo conquistar
a un príncipe (2008). No descarto leerlas con el tiempo, si las encuentro
baratitas (no merece la pena gastarse mucho en estas boberías enagüiles) pero
me cabrea bastante que hagan estas cosas de novelas que no son autoconclusivas.
En resumen: no aporta nada nuevo, pero es muy entretenida de leer.
Valoración personal:
entretenida, 3
Se la recomendaría a: los
aficionados a las novelas de la Regencia ligeritas e intrascendentes. Si te
gusta Loretta Chase o Julia Quinn, creo que esta te puede convencer.
Otras críticas de la novela:
En
español, tenemos crítica en “El rincón de la novela romántica”
y
la pone como buena. El blog “Mis hermosos libros” le da lo que creo que es una puntuación 4.5/5. En
Cazadoras del Romance hablan
de él como libro muy ligerito, perfecto para leer en un fin de semana
¿En inglés? Hay una breve reseña, pero en general positiva, en Historical Novel Society. Aquí he encontrado otra review
que también parece positiva, valorando la novela en cuatro rosas.
Pero, eso sí, en All About Romance no gustó demasiado. La crítica es
bastante negativa, una D-: le pareció en general absurdo y sin la menor química entre los
protagonistas.
Ay! me gustan las bobadas. Pero de esta autora leí "Las normas de la pasión" y "Dama de honor" (serie hermanas Featherton, edición de bolsillo Books4pocket) y eran demasiado tontas, casi absurdas, y la había dejado de lado. Pero bueno, si te gustó intentaré si la veo. Aunque sea para pasar el rato. Me tenté. Gracias
ResponderEliminarYo es el primero de ella que leo, así que no conozco los otros dos libros que mencionas. Es entretenida pero tan ligerita que no merece la pena (en mi opinión) salvo que estén a precio razonable.
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