Emocionalmente intenso y con unas páginas del mejor “mal sexo” que
recuerdo.
DATOS GENERALES
Título original: The Duchess War
Subgénero: histórica /
1863
Fecha de publicación
original en inglés: diciembre 2012
Parte de una serie: #1 de
los hermanos siniestros
En español: La guerra de la duquesa
Traductora: Ángeles
Aragón López (Traductora)
Editor: Courtney Milan
(20 de abril de 2014)
SINOPSIS (según Amazon.es)
La señorita Minerva Lane era una mujer retraída y
callada que se escondía detrás de sus lentes. Después de todo, la última vez
que había sido el centro de atención, había acabado muy mal. Hasta tal punto
que se había cambiado el nombre para huir de su escandaloso pasado. Si pasaba
desapercibida, seguramente no sería la reina de la fiesta, pero tampoco se
haría enemigos. Por eso, cuando un apuesto duque llegó a la ciudad, lo último
que quería era que se fijara en ella.
Pero eso fue exactamente
lo que ocurrió.
Porque Robert Blaisdell, el duque de Clermont,
no se dejó engañar por su timidez. Cuando aquella mujer adivinó lo que se
proponía, comprendió que había algo más en ella que sus anteojos y sus modales
cohibidos. Y decidió adivinar todos sus secretos antes de que ella descubriera
los de él. Pero al final, la señorita retraída demostró ser la horma de su
zapato y algo más.
¿Entra dentro de “Lo mejor de la
novela romántica”?
Definitivamente,
sí, dentro de las mil mejores, allá por el puesto doscientos y pico. No sólo
obtuvo críticas excelentes: DIK A en All About Romance, también A en Smart
Bitches Trashy Books, y A- en Rosario’s Reading Journal, sino que ganó el
premio RT 2012 en la calegoría de romance histórico “Indie Press/Self-Published”,
o sea, independiente o autopublicado. Además, toda la serie de los hermanos
Siniestros consiguió estar en el Top 100 de las mejores novelas/series
romántica que publicó NPR. En la encuesta Top 100 de All About Romance de 2013
estuvo dentro de “lo mejor del resto”, en el núm. 153. Para redondear la valía
de esta novela, recuerdo que tiene dos tópicos de los que gustan mucho:
“mejores enemigos” y “amistad entre personas del mismo sexo”.
CRÍTICA
Como ando algo decaída en
la novela romántica histórica, he decidido releerme una de mis sagas favoritas,
los hermanos siniestros de Courtney Milan. Seguiré probando autoras nuevas, claro.
Pero está bien reencontrarme con estas cositas que leí hará cosa de tres años.
Courtney Milan publicó La guerra de la duquesa en diciembre de
2012. Era la primera novela larga de la serie. Como el núm. 0.5 estaba El affaire de la institutriz,
y después están:
1.5 “A Kiss for Midwinter”,
2 La ventaja de la heredera,
3 La conspiración de la condesa (mi favorita),
Como se ve, de algunas he
hablado y de otras no, así que aprovecho la relectura para hacer críticas,
nuevas o retoques de las que ya publiqué en El rincón de la novela romántica.
La historia comienza
cuando Robert Blaisdell, el duque de Clermont, está fumando tras el cortinaje
de una biblioteca. Ha escapado de obsequiosos invitados a una fiesta que sólo
quieren tratarlo porque es un duque.
Allí también va a parar
Minnie, una joven que quiere alejarse de su impresentable casi-prometido. Este patán la persigue, no la encuentra y habla de ella de manera
bastante ofensiva.
Básicamente, que será una
esposa complaciente que guardará silencio ante sus aventuras porque, al fin y
al cabo, es insignificante como un ratoncito.
No es rica, ni de buena
familia, nada le garantiza una oferta mejor. Sólo el matrimonio podrá darle
estabilidad y seguridad económica. Su atormentado pasado ha dejado cicatrices,
y no sólo físicas.
Robert, por su parte, a
pesar de sus malas experiencias personales, no se regodea en un cinismo hostil
hacia el mundo. No, él se guarda sus frustraciones y como se sabe un
privilegiado, prefiere dedicarse a la reforma social.
Cuando aparecen panfletos
incitando a los obreros a unirse, las sospechas del oficial de la milicia
recaen sobre Minnie. Lo cual es un desastre. Sus expectativas matrimoniales se
irían al garete. Peor aún: podría descubrirse quién es ella, en realidad. Lo
que más teme del mundo.
La mejor manera de eludir
las sospechas es averiguar quién está detrás de aquellos incendiarios
panfletos. Y se fija entonces en Robert como posible autor. Decide
chantajearlo: los panfletos deben cesar, o ella lo pondrá en evidencia.
Como dije antes,
una de las listas de tópicos romanciles en las que está La guerra de la duquesa es el de “mejores enemigos”. Aquí hay un
enfrentamiento, una oposición de intereses entre Minnie y Robert. Ella le
extorsiona descaradamente.
Robert no se deja
amilanar, y le hace una contraoferta: ¿qué tal si eleva el valor de Minnie en
el mercado matrimonial?
Se dejan ver juntos,
coinciden en eventos, dialogan con ingenio... Compartiendo besos, alianzas y
traiciones. Así, Minnie conoce a Robert, la persona, y no el duque. Y él es el
único que comprende la brillantez y el atractivo real de Minnie.
El otro tópico (“amistad entre
personas del mismo sexo”) domina en realidad toda la serie, pues la protagoniza
un grupo de amigos varones: los hermanos siniestros. Apodados así no por nada
terrible sino simplemente porque son zurdos.
Y la verdad es
que es estupendo cuando los hermanos siniestros entran en escena.
Frente al dramatismo y la
intensidad emocional de la relación entre Robert y Minnie, son estos irresistibles
secundarios proporcionan el toque de humor.
Especialmente hilarante
es una escena en un tren, cuando Robert implora a sus amigos Violet y Sebastian
que, por favor, no hablen ni lo avergüencen delante de Minnie. Por supuesto,
acaban comportándose justo de manera opuesta a lo que Robert quiere. Cuando leí
este libro por primera vez me quedé con ganas de leer sus historias “especialmente el parlanchín Sebastian
Malheur, un inteligente darwinista perseguido por la sociedad de la época, una
especie de Sheldon Cooper sorprendido de que haya todo un mundo de perfectos
ignorantes que no reconozcan su superioridad intelectual”.
(¡Ay, sí que la escribió,
La conspiración de la condesa, mi
favorito de la serie!)
Sigo, que me disperso. La
sensualidad de este libro es alta, pero original. La autora toma un camino poco
frecuentado en las novelas románticas, y francamente, me encantó. Recordaba
esas escenas años después de leerlo por primera vez y ahora que lo he releído,
me ha gustado todavía más.
Las heroínas en la novela
romántica suelen ser tan virginales que no es que no tengan experiencia sexual,
es que ni siquiera han tenido un pensamiento lujurioso en la vida. Los héroes suelen
ser granujas muy experimentados pero sanos, a pesar de vivir en épocas de
amplia difusión de las enfermedades de transmisión sexual y sin medios fiables
de protección. Cuando la muchacha inexperta cae en los brazos del cínico
libertino, de repente todo sale perfecto y maravilloso.
Pues no.
Courtney Milan baja de
esas cumbres fantasiosas a una narración algo más realista. El sexo, como todo,
se aprende. Sin experiencia, es difícil que las cosas salgan perfectas a la
primera. El placer hay que currárselo, solo o en compañía, y como la telepatía
aún no se ha inventado, para que las cosas vayan bien hay que hablar, compartir
experiencias, experimentar…
Creo que es el mejor “mal
sexo” virginal que he leído en una romántica.
Es un aspecto más del
realismo que caracteriza las recreaciones históricas de Milan. No se ocultan
los aspectos desagradables, las desigualdades de clases, la condición obrera o
las limitadas posibilidades de las mujeres.
Vale, el sexo explícito y
la crítica a los privilegios de la nobleza y la explotación de los obreros
igual no entusiasman a los más conservadores.
Y sí, no es una novela
intrigante que te atrape y no puedas parar de leer hasta el final. Pero a cambio, se relee estupendamente.
Es, creo yo, porque estamos en
una novela de personajes, más que de
trama. Resultan tiernos, y te conmueven hasta las lágrimas. Acabas la última
página suspirando de satisfacción. Virgencita, que se queden como están.
Valoración personal: muy buena, 4
Se la recomendaría a: todos los aficionados a la novela
romántica histórica con conciencia social.
Otras críticas de la novela:
En español, tenemos dos
críticas en El rincón de la novela romántica hay dos críticas, una es una versión
anterior a esta mía. En Vuelve la página la recomiendan "si te
gusta la histórica pero [advierte] no esperéis ninguna maravilla". Mamen habló de esta novela en su antiguo blog
“Mis libros y otras historias”.
4 estrellas
le dieron en La alfombra roja de la lectura.
En inglés Smart Bitches Trashy Books no lo dudan: una A+. En All About
Romance hay dos críticas una de DIK A
(la del audiobook) y otra de B+. Y ya dije que Rosario’s Reading Journal, la calificó con A-.
Leí el 0.5 de esta serie y me gustó bastante cómo escribe Courtney Milan así que quiero seguir con la serie. Una pregunta, la leíste en español o en inglés? Porque aprovechando un par de ofertas de Amazon la tengo en los dos idiomas y no sé qué tal está la traducción.
ResponderEliminarGracias por la reseña!
Lo siento, no puedo ayudarte. No sé cómo estará la traducción porque la he leído siempre en inglés. Cuando la descubrí no había empezado a autopublicarse en español, y me gusta tanto que ahora me bajo los libros al Kindle el mismo día que los saca. Creo que es la única autora con la que hago eso.
EliminarSiempre puedes probar la muestra gratuita.
Courtney Milan es excelente, de veras.
ResponderEliminarBona, viste en SmartBitches el 'guest squee' sobre Trial by Desire? Es uno de mis libros favoritos de ella, a pesar de que se nota que es uno de los primeros que escribio.
No lo había visto. Este finde estuve ocupada y no pude pasarme por todas mis páginas habituales en Internet. Gracias por indicármelo. ¡Me encanta esta nueva sección/graduación de libros Squee...! Toda una idea.
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