Crítica: “Secret service”, de Tal Bauer

 

Vaya descubrimiento

 

DATOS GENERALES

Título original: Secret Service

Subgénero: suspense/gay

Publicación: 6/2022

Páginas: 423

 

SINOPSIS (según Goodreads) 

Un romance gay autoconclusivo, apasionado, emocionante y adictivo.

El presidente Brennan Walker me cautivó desde el momento en que entré en su Despacho Oval.

Es un misterio que estoy decidido a descifrar. No sé qué se esconde dentro de la mirada de Brennan cuando mira en mi dirección, o por qué siguen brillando relámpagos negros entre nosotros. Es una tormenta a medianoche, una luna oscura saliendo, problemas en el horizonte.

Estoy a punto de deslizarme hacia descubrimientos y verdades para los que tal vez no estoy preparado.

Nunca he estado con un hombre, ¿pero ahora? Sueño con sus ojos azul claro y me pregunto cómo se sentiría si sus labios tocaran los míos. Hay algo aquí, algo entre nosotros, como si el oxígeno que respiramos se encendiera antes de cada inhalación.

Pero él es el presidente. Soy su agente del Servicio Secreto. Él es el trabajo.

Él está prohibido.

Si cruzamos esta línea, Brennan podría perderlo todo.

Sé que tengo que alejarme.

Pero no puedo.

¿Cuánto estamos dispuestos a arriesgar?

Y, ¿cuán mal acabará esto, envuelto en llamas?

◆ ◆ ◆ ◆ ◆

Secret Service es un romance MM autoconclusivo, repleto de pasión, suspense y placeres prohibidos. Enamórate de la agente especial Reese Theriot y del presidente Brennan Walker... y agárrate fuerte para el viaje de tu vida.

 

¿Entra dentro de “Lo mejor de la novela romántica”?

No, la tengo como mucho entre las quince mil mejores en mi lista, por aquello de que Perhaps, Maybe Not la incluyó entre las mejores novelas de 2022. Y una crítica de cinco estrellas en Love Bytes.

 

CRÍTICA

Este libro lo descubrí gracias a la lista de «lo mejor de 2022» que publicó la página Perhaps, Maybe Not.

Vaya descubrimiento, tiene romance, pasión, acción sin parar, personajes atractivos… Hasta le perdono la narración en primera persona dual, porque distingues perfectamente cuándo habla cada personaje. Generalmente lo cuenta en primera persona Reese, pero hay unos cuantos capítulos desde la perspectiva de Brennan.

Con esa portada parecería erótica gay pero no, es suspense romántico aunque con alguna escena de sexo explícito, las justas para que tengan sentido en la historia, ponerle pasión y no están de relleno.

Nada más empezar, ves a Reese Theriot (37) agente del Servicio Secreto a cargo de la seguridad del POTUS, morreándose alegremente con éste, Brennan Walker (cuarenta y tantos, entre 44 y 48 le calculo, ponle 46). Inmediatamente, hay un... atentado, diría yo, y entonces es cuando empieza la narración en dos tiempos.

Hay unos capítulos que te cuentan, en flashback, cómo se conocieron, mantuvieron las distancias antes de intimar. La atracción es insta, pero reconocerla y actuar sobre ella,… les lleva su tiempo.

Reese procede de Luisiana, de los pantanos oscuros con sus caimanes. Fue policía en Nueva Orleans y luego entró en el Servicio Secreto, no solo por su cara bonita.

Años después, ha visto pasar a varios presidentes. Unos mejores y otros peores. Nada le preparó para la inmediata atracción que siente por el nuevo, Brennan Walker.

El californiano Brennan sabe que es gay de toda la vida. Llegó un momento en que se dio cuenta de que lo suyo era el servicio a los demás. Para poder hacer las cosas bien, primero en trabajo humanitario y luego en la política, tenía que olvidarse de una vida gay. Renunció, hace décadas, a tener una vida afectivo-sexual con otro hombre. Por lo menos no miente, simplemente, no tiene relaciones.

Esto le supone un coste emocional. Toda la soledad del mundo le cae encima en cuanto entra en la Residencia de la Casa Blanca.

Ninguno de los dos busca una relación, ni sexo. No va bien eso de ligar en el trabajo con el jefe, y menos cuando este tiene cosas importantes a las que enfrentarse, como el tirano ruso.

Es lógico que se lo piensen mucho. Las cosas no son fáciles, a veces están juntos, a veces se le hace todo muy cuesta arriba…

Mientras vemos cómo se desarrolla su historia de amistad, pasión, amor, en el pasado, con sus altibajos, volvemos al «ahora»: la investigación de Reese para saber qué es lo que ha pasado con su amante, ¿está muerto, secuestrado, desaparecido...?

Al fin y al cabo, el Servicio Secreto es una fuerza policial, no son solo guardaespaldas. Hay cadáveres que identificar, espías, traidores y misterios, todo ello tiene que resolverse rápido, en menos de veinticuatro horas.

Leí esta novela de un tirón, me tuvo totalmente enganchada, en vilo, ¡no pude parar hasta saber qué pasa con Brennan!

Lo bueno del suspense es que te sorprendan, que haya giros en la trama que no te esperas, que andes preguntándote qué ha pasado, quién es el culpable y por qué… Aquí consigue ese objetivo. Sospechas poco.

Me gusta mucho el estilo de este autor. Encuentro algo refrescante en la romántica gay que me cuesta cada vez más encontrar en la romántica hetero. Aquí no tanta preocupación por ser políticamente correcto, ni hacer activismo, ni se esfuerza en marcar todas las casillas de la diversidad. Queda claro que el autor no tiene nada que demostrar a nadie.

Sus protagonistas son hombres, que hablan y se comportan como tales, adultos, masculinos… no como la prototípica chica de instituto que cotillea con sus amigas, que es lo que a veces parecen personajes gais.

Por ejemplo, cuando un personaje sufre una decepción amorosa, un tipo le dice al otro: «lo distraeré con videojuegos y haciendo pesas, cosas masculinas, así no pensará en el corazón que le has roto».

Es como las de suspense de toda la vida, Sandra Brown por ejemplo. Te cuentan cosas, te intrigan, no pierden el tiempo en tediosas rumiaciones, con una verbosidad que aburre hasta las piedras.

Dos palabras bien puestas transmiten mucha más pasión que páginas y páginas de heroínas neuróticas que te aburren con irrelevancias.

Te cuenta sin montar ningún drama cómo Reese, que hasta entonces solo ha estado con mujeres, acepte su deseo sexual. La interacción de Reese con un secundario te hace entender que no, que lo suyo no es gay for you, sino justo lo que él dice, que igual no era tan hetero como pensaba…

Es como una película de acción y misterio, pasan cosas, o sea, ¡me encanta...! Tiene esa parte de thriller político que me emboba, yo era muy fan de El ala oeste de la Casa Blanca.

Aparte de la inquietante premonición sobre Ucrania y Rusia, encuentro reflexiones sobre esa sangre estadounidense derramada en países a los que los EE. UU. les importa una mierda.

Quizá lo más incómodo es que de fondo hay un tema de una invasión de Ucrania por Rusia, dice el autor que el libro estaba escrito antes y sí, hay cosas que no coinciden, pero desalienta pensar que pase lo que aquí se preveía.

No me resulta creíble que un POTUS al que no se conocen relaciones no haya despertado antes, en algún momento, rumores sobre si es gay o no. Le pasa a todo famoso que no tiene novia o mujer.

Ahora, me ha dejado enamorada de los protas, en una nube.

Me ha dejado enganchada de cierto personaje que, como leo en otras críticas, todo el mundo quiere que tenga su final feliz. Un encanto de chico que a veces deja entrever, por debajo de sus sonrisas, algo frío… como que hay cosas turbias en su interior… 

Por un momento, pensé que acabarían en una relación poliamorosa los tres. 

Ojalá que Tal Bauer se anime a escribir su historia.

Me gustó tanto esta novela que me dije «tengo que probar más cosas de este autor». Ya lo he hecho y sí, tiene cosas geniales, creo que me leeré todas sus novelas, al menos lo que esté en KU.

Le pongo cuatro estrellas por prudencia, porque me da no se qué darle lo máximo a un autor nuevo para mi. ¿Y si hay algo todavía mejor en su bibliografía...? Sería, si diera medias estrellas, un sólido 4,5.

Valoración personal: notable, 4

Se la recomendaría a: quienes gusten del suspense romántico.

Otras críticas de la novela:

No he encontrado nada en español.

Love Bytes Reviews, 5 corazones. 

J. L. Gribble, 5 estrellas. 

Mirrigold, 5 estrellas, y dice que «Tal Bauer hace tan bien los thrillers políticos, tiene conocimiento interno de cómo funciona que se pregunta en qué agencia federal habrá servido este».

Recomiendo totalmente la crítica, muy divertida, que le hacen a este libro en The Smut Report. 

Para una más convencional, las 4.5 estrellas que le dan en Joyfully Jay. 

I Read What You Write! la pone muy bien y además señala lo bien que está tratado el sexo, frente a tanta contemporánea que ponen escenas sexis vengan o no a cuento.