Parafraseando a Lineker, el rugby es un deporte de
XV contra XV que siempre gana Nueva Zelanda.
Acabó el mundial de Inglaterra y es día de
difuntos. Triste.
Ante esta penosa situación, voy a hacer una
excepción y no voy a hablar de lo mejor de la novela romántica, sino de lo
peor, lo que da mala fama al género, lo que no puede ser la novela favorita de
nadie porque es mala con avaricia.
Pero mala-mala. Ni siquiera mala que te ríes, no:
mala en versión soporífera.
Estuve dudando si publicar o no crítica de esta
gilipollez, ya que al fin y al cabo mi pretensión es traer aquí sólo lo mejor
de lo mejor de la novela romántica, el 10% que se puede salvar, y no el 90%.
Pero luego me dije, ¿por qué no? Vamos a dar un paseo por el lado oscuro.
Una novela tan inane y sacarinosa
que te entran ganas de salir corriendo a meterte en vena Jude el oscuro o cualquier otra cosa literaria
y deprimente, sólo para saber que las neuronas siguen funcionando.
Padecido en formato Kindle |
DATOS GENERALES
Título original: Bought: Destitute Yet Defiant
Subgénero:
genérico
Fecha de
publicación original en inglés: 2010
Editorial: Harlequin/Mills & Boon
Harlequin Presents Large Print (HPLP) – 2902 / Mills & Boon Modern
Romance (MMR) – 955
192
páginas
Publicación en español: La cantante y
el millonario
Fecha: 2010
Editorial: Harlequin Ibérica
Sello / Colección: Bianca 2039
Él es un siciliano sexy y marcado por su pasado... Ella, una joven rebelde,
muy atractiva... ¡y nada obediente!
Silvio Brianza había abandonado los barrios bajos donde había crecido, pero
aquella época le había dejado profundas heridas. Jessie subsistía a duras penas
fregando suelos de día y cantando en un sórdido bar por las noches.
Silvio le había dado la espalda a ese mundo de pobreza y bandas callejeras,
pero tenía un asunto pendiente: debía sacar a Jessie de allí. Jessie era
incapaz de resistirse a Silvio, pero tenía que recordar que era su enemigo y
había renegado de su pasado; jamás podría amar a una chica pobre como ella.
¿Entra dentro
de “Lo mejor de la novela romántica”?
Ni de coña. Al contrario, precisamente la traigo como ejemplo de lo
peor del género. Pero de verdad. Mala malísima.
CRÍTICA
Este libro llegó a mi kindle porque estaba gratis en Amazon. Si no, ¿de
qué?
Eso ya te da una idea de que debes desconfiar de lo que aparece “gratis”.
Puedes pensar que “bueno, no te cuesta nada”. Error. Te cuesta tu valioso
tiempo, que no es infinito. Porque lo que he perdido yo leyendo esta “cosa” lo
podría haber empleado en algo más digno como, no sé, leer las instrucciones del
sacapuntas.
Sarah Morgan no es una desconocida, al contrario, es una autora muy
apreciada y premiada en Gran Bretaña y EE. UU., y una y otra vez lo intento con
sus libros, y no puedo. Me resultan infumables. Y no porque sean harlequines. Es
verdad que la inmensa mayoría de estas novelas genéricas me parecen perfectamente
prescindibles. Pero puedes encontrar raras joyas escondidas entre miles de
historias formulaicas.
No hay más que ver el título original para que se te revuelva el estómago
“Comprada: pobre pero aún así desafiante”.
Es la prototípica historia harlequin de virgen asustadiza, insegura, pero
de buen corazón, que enamora al millonario sexy que:
a)
la
salva de los malos,
b)
la
traslada en su jet privado hasta Sicilia,
c)
le
compra un vestuario nuevo,
d)
la
lleva a un spa para que le hagan la manicura, pedicura y peluquería,…
e)
en
fin, el makeover completo.
Silvio es un chico siciliano que creció en las calles de Londres y que se
ha hecho a su millonario construyendo hoteles y otros edificios. Tu latin lover estándar que no se ha
enamorado nunca hasta que se reencuentra con aquella jovencita que conoció en
el pasado.
Ella sobrevive como cantante en clubes londinenses de mala muerte. La
persiguen unos malos para cobrarse la deuda que dejó su hermano, un yonqui.
Sueña con cantar ante multitudes, grabar discos y toda la parafernalia, pero de
momento no ha tenido suerte.
El hermano yonqui murió. Jessie culpa de ello a su amigo Silvio, que le
daba dinero para drogas. Pero en el fondo, se siente también culpable ella. Y
Silvio también se siente mal por aquello y respetó su deseo de no volver a
verla… Hasta que descubre que la amenazan los malosos. Entonces se reencuentran
y… lo dicho: se deja arrebatar por esa vida de amor y lujo.
En fin, no es mi tipo de libro. Aunque de vez en cuando disfruto de estas
novelitas cortas, el esquema simplón de “virgencita inglesa sosainas y millonario
mediterráneo rendido a su virtud” es un tema que me deja bastante fría.
Después de mucho pensar, he llegado a la conclusión de que Sarah Morgan es,
sobre todo, una escritora de fantasías exóticas para consumo interno anglosajón,
con esa idea poco realista de Sicilia o de cualquier cosa ajena a su mundo
conocido. En ella todo es cliché: las tramas, los personajes, y las culturas
(para ella) extranjeras. De lo que he leído hasta la fecha, su chef francesa es
un cliché, su millonario siciliano otro cliché, y no quiero ni pensar cuán clicherosos le saldrán esos jeques que
también veo que tiene en su producción.
De verdad, que se dé una vuelta por Magaluf o Ibiza, para que vea lo que puede
producir, a veces, el tema de las jovencitas inglesas que descubren el Mediterráneo.
Todo muy digno y elegante. Y virginal, sobre todo.
Valoración personal: allá
tú, 1
Se la recomendaría a: nadie,
la verdad. Bueno, sí, a algún anglosajón despistado que no tenga ni pijotera
idea de lo que es el Sur de Europa, ni ganas de saberlo.
Otras críticas de la novela:
Me ha cabreado tanto esta historia que paso de poner críticas. Hay unas
cuantas en Goodreads, donde tiene puntuación media de 3.44,
y en RT Book Reviews le ponen cuatro estrellas, pero tampoco es tan raro, ellos le ponen cuatro estrellas al 90% de los
libros que reseñan.
¿Por qué me
cabreo tanto? Porque es un insulto a la inteligencia y a las otras culturas de
las que da una imagen tan distorsionada e irreal. Me resulta desproporcionadamente
irritante, lo sé. Pero es lo que pasa cuando nos tocan la identidad, que
sobre-reaccionamos.
Lo peor es que
soy tan tonta. Me conozco. Seguiré dándole oportunidades a esta autora, porque
como todo el mundo dice que es tan
buena,...
La idea de que post-Berlusconi a esta señora le pareció buena idea llamar Silvio a su héroe italiano te dice clarísimo qué tanto sabe del mundo fuera de su esfera inmediata.
ResponderEliminarLeí uno de sus harlequins (Doukakis´Apprentice), que vino bien recomendado, y la verdad que me gustó. Pero probé un par más (incluídos sus single titles) y me parecieron horribles.
PD - Mi parte preferida de tu reseña;
"De verdad, que se dé una vuelta por Magaluf o Ibiza, para que vea lo que puede producir, a veces, el tema de las jovencitas inglesas que descubren el Mediterráneo. Todo muy digno y elegante. Y virginal, sobre todo."
Jajajaj!
Gracias por el comentario, me alegro de ver que no soy la única que ante una de Sarah Morgan se pregunta qué le ven. No había caído en lo inapropiado del nombre del protagonista y tienes toda la razón.
EliminarPero como soy así y en la lista Top 100 NPR han incluido esa, Doukakis's Apprentice (París en el corazón), la tengo apuntada para leer.
El comentario me salió solo. Me parecen ridículos los personajes tan poco realistas. No digo que pongan a una ladette o un personaje tipo "Vicky Pollard" en las novelas románticas, pero podrían poner a mujeres un poco más actuales.