viernes, 29 de septiembre de 2017

Crítica: “Más allá de la inocencia”, de Emma Holly

Una erótica de las de antes, o sea, más una histórica muy sensual que una maratón de gimnasia sexual.
 
Titania, 2003
DATOS GENERALES

Título original: Beyond Innocence
Subgénero: erótica/histórica

Fecha de publicación original en inglés: 2001
Parte de un dúo: Beyond Duet (Mäs allá) #1

1.ª edición en español
Traductor: Alberto Magnet Ferrero
Fecha Edición: 12/2003
Publicación: Titania

SINOPSIS (según la Casa del Libro)
Ella debía ocultar su vulnerabilidad y controlar la atracción que existía entre ellos desde el primer momento…
Edward Burbrooke y Florence Fairleigh tienen dos cosas en común: el mismo abogado y un interés urgente en encontrar a la persona adecuada para sus respectivos planes. Edward necesita una mujer que se case con su joven hermano Freddy para acabar con el escándalo que suponen los escarceos homosexuales de éste. Florence busca un marido amable, dulce, y, sobre todo, con la suficiente fortuna como para alejar de ella para siempre el fantasma de la pobreza. Con lo que ninguno de los dos contaba es con la tórrida atracción que surgirá entre ellos, un deseo irrefrenable que puede cambiarlo todo.

Ella buscaba un matrimonio sin amor
Cuando pone pie en Londres, Florence tiene claro que no viene en busca de amor, sino de un marido que solucione su vida, y está dispuesta a emplear la mitad de la exigua herencia que le ha dejado su padre para conseguirlo. El matrimonio de conveniencia que le propone su abogado con el joven Freddy Burbrooke le parece una solución práctica, casi ideal. Pero si el amor no entra en sus planes ¿por qué no puede evitar estremecerse cada vez que está cerca de Edward, el frío y distante hermano mayor de Freddy?

Él lo calculó todo, menos su propia y arrolladora pasión...
Desde muy joven, Edward se ha visto obligado a cuidar de su querido hermano pequeño, y se ha convertido en un verdadero padre para él. Eficiente y calculador, le ha buscado incluso una esposa para salvaguardar su honor tras el último escándalo. Pero Edward no lo tiene todo controlado. Quizá si no hubiera visto a su futura cuñada aquella tarde, cambiándose ante el espejo, podría sacársela de la cabeza. Pero ahora, cada vez que está cerca de ella, todo su planeado esquema parece desmoronarse ante una pasión que no conoce límites.

¿Entra dentro de “Lo mejor de la novela romántica”?
Sí, de hecho aparece en el puesto 580 de mi lista de las Mil Mejores Novelas Románticas. En la página web The Romance Reader tuvo crítica de FHK (Five Hearts Keeper). En la encuesta de All Abot Romance ganó en la categoría de historia de amor más luscious (sabrosona), y luego apareció en su mini-encuesta de 2006 sobre “Mainstream Sexy”, o sea, historia sensual no específicamente erótica, en el puesto 10. Cuando RomanceNovelsMe hizo su lista de las mil mejores novelas románticas, estaba incluida en el puesto 723. Hay otra encuesta de “las mil mejores novelas románticas” que no sé de donde salió, pero yo la vi en la página web de Book Binge, y allí estaba la 796.

CRÍTICA

Hubo una época en que la erótica romántica era así, relatos históricos con unas escenas más explícitas y subidas de tono que la media. La definiría con la palabra sensualidad, se describe con cierto detalle lo que los protagonistas perciben por sus sentidos: olores, sonidos, visiones…Así es Más allá de la inocencia.
Por un lado tenemos a Florence, hija de vicario que va a Londres a pillar un buen marido, que le asegure la vida pero, al menos, que sea alguien agradable. No espera encontrar el amor ni mucho menos deseo sexual. Para ello, visita a su abogado.
Y éste, como es un ladino, considera que esta joven tan guapetona, recién llegada del campo, sanota cual vaquera de la Finojosa, puede ser la opción ideal para resolver el problema de otro cliente.
Entra en escena Edward: noble rico, protector de su hermano menor Freddie, que tiene el problema de ser gay y de que lo hayan pillado con un lacayo. A Edward no se le ocurre otra cosa que buscarle novia, confiando en que si sienta la cabeza, superará esos “pecadillos adolescentes”.
El abogado contacta con Edward para informarle de que ha encontrado a la candidata perfecta: Florence. Edward tiene que verla antes por sí mismo, y ya empezamos con una escena de voyerismo de lo más sensual que deja a Edward totalmente noqueado. Lo de este hombre será andar palote por la frescachona belleza rural durante el resto del libro.
La sinopsis es un poco equivoca, porque Florence no es consciente de que la están utilizando como posible candidata a la mano del joven Freddie. Cree que una señorona aristocrática la ha cogido bajo su protección para recorrer los salones de la nobleza durante la Temporada.
Florence y Freddie conectan desde el principio, se llevan bien, se gustan como personas, son dos buenos amigos. La estima de Freddy es sincera, y si tiene que casarse para ocultar que es gay, pues nada, su buena amiga Florence parece la mejor opción. A todo esto Florence, claro, in albis, que de la homosexualidad de Freddie no sabe nada, ni que la están usando como pantalla para acallar rumores.
Florence cree que cae mal a Edward, que anda todo el rato por ahí, ceñudo, hostil con ella. Ella no se explica lo mucho que le atrae este hombretón, que le provoca unos deseos carnales totalmente impropios de una dama. Claro, no es consciente de que el sentimiento es mutuo y que la distancia de Edward se debe, en realidad, a que se siente intensamente atraído por ella.
¿Lo mejor del libro? Sin duda, esa tensión sexual mantenida durante un tiempo y, después, la forma tan explícita y sexy de resolverse. Sí, hay un par de escenas que se te quedan grabadas en la cabeza, de lo eróticas que son. Sólo por ellas merece la pena leer Más allá de la inocencia.
Advierto que no hay nada raruno, quizá algo de fetichismo en Edward, sexo oral, algo de bondage,… nada que no sea acostumbrado hoy en día. Lo que en aquella época esto calificaba la novela como erótica, burning, ahora sólo sería una histórica un poco más calentita que la media.
Los personajes principales tienen cierta evolución a lo largo del libro. Quizá Florence sea más tópica, por aquello de ser la improbable pero cien veces vista heroína virginal que a las primeras de cambio se dedica con todo el entusiasmo del mundo al sexo oral. Edward es un poco más complejo.
De los secundarios, sobresale el encantador Freddie, tremendamente desaprovechado (véase más abajo). El resto, son demasiado estereotipados, sobre todo por el lado femenino: la “madrina” benevolente, la modista francesa que dice oh là là (por si no habías pillado su nacionalidad), la vieja amargada o la ex amante vengativa.
El estilo cumple, nada especial, aunque tampoco es de esas novelas desmañadas que parecen más un guion de serie de televisión que un verdadero relato. Ya digo que cuenta con una parte muy evocadora, de mucha sensualidad, de deseo puro e intenso que obnubila a los personajes; eso hay que saberlo escribir y Emma Holly lo logra con nota. Hace tres lustros estas cosas se cuidaban más.
Quizá lo más flojito es el argumento en sí. Realmente no pasan demasiadas cosas. Edward quiere a Florence como novia de su hermano, pero la desea, y ella a él. El misterio es sólo saber cuándo se dará cuenta de que la quiere para sí mismo y qué pasará cuando Florence descubra que quienes la están ayudando a abrirse paso en sociedad no son gentes desinteresadas, sino que tienen sus propios fines.
Se desaprovecha la historia de Freddie. No entra en detalles de lo terrible que resultaba la homosexualidad, que era delito que podía poner en peligro su vida. Todo gira en torno a que no se descubra, a que “supere” esa etapa juvenil, pero no se especifican las razones por las que debe ser así. Quizá la autora no quería que la novela resultara muy dramática, sino mantener un tono más ligero.
En segundo lugar, Freddie protagoniza una historia de amor secundaria que, hoy en día, se habría contado de otra manera, con más tensión sexual, y encuentros explícitos que le añadirían más erotismo a la historia. Creo que es sólo cosa de la época: lo del male/male romance en una novela mainstream, contada con pelos y señales, no se incluye mucho ahora, pero en 2001 era impensable.
Creo que es la primera que leo de Emma Holly. Es una autora que me la apunto. En conjunto me ha gustado muchísimo. Ya digo, una novela erótica histórica “a la antigua”, cuando aún se esforzaban en hilar una historia más o menos sólida en torno a los episodios sexis.
Como leí este libro en inglés, no sé qué tal estará la traducción.
Valoración personal: notable, 4

Se la recomendaría a: los que gusten de enaguas subidas de tono.

Otras críticas de la novela:

Hablan de esta novela en Cazadoras del romance, también en el blog Un viaje a los sueños y en Romántica en libros le dan puntuación de 9.5 sobre 10.
En inglés, tenemos crítica de B- en All About Romance, donde señalan algunas inexactitudes en cuanto a la ambientación histórica, AztecLady la puntúa 8.5/10 y Mrs. Giggles, por su parte, 76/100.
Ya veis que todos andamos más o menos por el notable. Está francamente bien pero podría haber mejorado algunas cosas para convertirse en una historia inolvidable.

4 comentarios:

  1. Hubo una época en que la erótica romántica era así, relatos históricos con unas escenas más explícitas y subidas de tono que la media. La definiría con la palabra sensualidad, se describe con cierto detalle lo que los protagonistas perciben por sus sentidos: olores, sonidos, visiones…Así es Más allá de la inocencia.
    Con esto ya me has ganado por completo, la voy a buscar ahora mismo porque dices justo las palabras mágicas para que me dé la ansiedad lectora.
    Muchas gracias por la reseña y la recomendación! Cuando la lea me paso por aquí a comentarte.
    Besotes!

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    1. Pues nada, a ver si te gusta. Tengo cierta debilidad por estas eróticas a la antigua bien escritas, que no te creas que he encontrado demasiadas.

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  2. Oh, que bueno que la leiste y te gusto! (Y muchas gracias por la liga!)

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    1. Pues sí, solemos coincidir en mucho. Y tus críticas son mucho más detalladas que las mías, así que enlazarlas siempre es un añadido que da valor.

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