Recordar que hace
una década que Laura Kinsale no saca
novela, me ha hecho pensar en mis favoritas. ¿Qué se fizo dellas?
Empecemos por el «conceto».
¿Cómo sabes que
una autora es «favorita»? Después de pensarlo un poco, creo que el criterio que
no falla es el auto-buy.
Si compro sus
libros sin fijarme en la sinopsis, a veces incluso en pre-venta, entonces es
una de mis autoras preferidas. Puede que no lo compre nada más salir, quizá
espere unos meses a que aparezca el libro en rústica, o a que la versión Kindle
se abarate, pero tarde o temprano, el libro cae.
En el año 2015 dediqué un artículo por mes a cada una de ella, así
que ya he dicho cuáles son. Como dije antes, cinco años después, releer El profesor de francés me ha hecho reflexionar,
¿siguen siendo mis favoritas…? Porque claro, todos cambiamos, también ellas.
En líneas
generales, sí que sigo considerándolas lo más, pero no todos los casos son
iguales.
Sandra Brown, fotografía de su página web |
Las
que siguen al pie del cañón
Empiezo con las
que son mis favoritas indiscutibles: Sandra Brown en suspense
y Lisa Kleypas en
histórica. Siguen publicando espléndidas novelas, una al año, con la precisión
de un reloj suizo y sin bajar el nivel.
En 2019
Sandra Brown publicó Outfox y está
previsto que en septiembre de este año aparezca Thick as thieves. En el caso de Kleypas, fue Devil’s daughter, y este mismo
mes de febrero aparece Chasing Cassandra,
la quinta de los Ravenel.
Otras parecen
seguir escribiendo romántica, aunque no con regularidad anual. Así, Rachel Gibson publicó en 2018 The art of running in heels y para mayo
tiene anunciado How Lulu lost her mind.
Hay que remontarse
un poco, hasta 2016, para que encontrar la última
novela publicada por Susan Elizabeth Phillips, La primera estrella de la noche; se supone que
en junio llega Dance away with me.
Las
que siguen, más o menos, pero de otra forma
Meljean Brook publicó el
relato corto Frozen en 2014,
y desde entonces, silencio. Me temo que nos quedaremos sin The Blacksmith (The Iron Seas #5). Ha optado por seguir otra línea,
la fantasía épica, con dos novelas de bárbaros este mismo año bajo el
pseudónimo Milla Vane: A heart of
blood and ashes (en febrero) y A
touch of stone and snow (julio, creo). Como habéis visto por mi crítica, me ha
encantado esta versión suya de la novela de magia y brujería.
Sherry Thomas. Fuente: Amazon.com |
Otra que ha cambiado
de registro es Sherry Thomas, que ahora
cultiva, con bastante éxito, la novela de misterio histórico, con la serie Lady
Sherlock. No he leído ninguno. The art of
theft fue la entrega de 2019 y en septiembre
aparecerá Murder on Cold Street. No
sé si alguna vez volverá a escribir novela romántica histórica. No parece que
sea esa su intención. Intentó otras cosas, fantasía juvenil, futurista,
contemporánea,… pero ha alcanzado el éxito gracias a su Sherlock con enaguas, y
no creo que vaya a bajarse de este burro.
Tampoco parece que
tenga muchas ganas de seguir haciendo lo que hacía (suspense romántico) Suzanne Brockmann. Lo último
que publicó en su línea de siempre fue SEAL
Camp (2018). Ese mismo año sacó una de
suspense-paranormal-gay, Out of body y
el libreto de una obra de teatro de 2010, Looking for Billy Haines; creo que han
pasado sin pena ni gloria. No sé si alguna vez volverá al género, es como que
ya no se siente inspirada para ello.
Un caso muy
especial, para mí, es Courtney Milan, a la que
tengo en strike dos. Me explico. Lo
último fue algo cortito, Mrs. Milan’s incomparable adventure (2019). Pero tanto
este relato como la novela anterior, After the wedding (2018), me
parecieron unos pestiños. Tengo la impresión de que, como a Sherry Thomas, lo
de escribir romántica histórica ya no le llena; estaría explorando otras cosas,
otros temas, otro tipo de protagonistas, visitar a paisajes y paisanajes a los
que yo, sinceramente, ni puedo ni quiero acompañarla.
Es verdad que,
según ella ha comentado en un reciente podcast de Smart Bitches, estar en el
consejo de la RWA, le quitó tiempo (y dinero) de su obra narrativa. No tengo ni idea de si su estado de ánimo actual, según interpreto yo de esa entrevista, está para muchas florituras.
La próxima, The devil’s comes courting, estaba
anunciada para finales de 2019 y aún estamos a
dos velas. Ya veremos… Si tampoco me engancha, lo consideraré strike tres y como en el béisbol, fuera.
Fue bonito mientras duró pero ya no conecto contigo así que, ¡que corra el
aire!
Tampoco es para
tanto. Hubo un tiempo en que me compraba todo lo que veía de Jayne Ann Krentz o de Nora Roberts, y llegó un momento en que
ya no me decían nada. Dejé de comprar sus novelas. Ahora, años después, voy
poco a poco leyendo algunas de suspense de La Nora.
Como suelo decir,
muchas veces no sos vos, soy yo.
Missing
total
Finalmente, están
las missing total. Cecilia Grant publicó un
relato corto, A Christmas gone perfectly wrong, en 2014,
y ya nunca más se supo. He estado mirando no vaya a ser que la pobre haya
fallecido o algo así, pero no he conseguido saber nada.
Joanna Bourne, de su página web |
Laura Kinsale después de
intentar ser graciosa, con El profesor de
francés (2010), ya no ha publicado nada más que los
audiolibros de sus novelas con la fantástica voz de Nicholas Boulton.
La última novela
de Jennifer Crusie apareció también
hace diez años: Maybe this time (2010). Después ha escrito o colaborado en un par de
ensayos. Deduzco, por su página web, que sigue viva y escribiendo, pero qué y
cuándo publicará algo, ni idea.
De Joanna Bourne comento un
poco lo mismo: sé que sigue viva y escribiendo, pero sin publicar, porque la he visto activa en Typepad y en el blog de las Word Wenches. Su último spymaster, Beauty like the night, es de agosto
de 2017, y entendí que era el cierre de la serie.
¿Alguna
nueva favorita?
Nalini, I love your contemporaries Fuente: Wikimedia Commons |
A estas alturas
puedo considerar una de mis favoritas a Julie
James, porque me he leído todo lo suyo y me ha encantado, aunque ninguna de
sus novelas sea de las de 10 para mí. Y Nalini
Singh, estrictamente en contemporánea, es también auto-buy.
Durante un tiempo creí
que KJ Charles se iba a convertir en
una de mis favoritas, porque ha escrito novelas espectaculares (A seditious affair y An unnatural vice, desde luego).
A día de hoy, sin embargo, no me apetece nada acercarme a algo que lleve
su nombre.
He probado otras
autoras: Cara McKenna, Talia Hibbert,
Roni Loren, Pamela Clare, J. T. Geissinger, Alisha Rai, Cat Sebastian… Sin
embargo, no son de compra automática: unos libros me han encantado y otros no
me han dicho gran cosa. Alguno hasta me ha desagradado. Por eso no las
consideraría, a día de hoy, como favoritas-favoritas.
Y, ¿qu'est-ce que c'est de la lengua de
Cervantes?
¿En español? Pues…
A ver cómo os lo digo. A diferencia de otros géneros (como la ficción literaria
o la novela histórica), dedico poco tiempo a la romántica en nuestro idioma.
Confieso, no
obstante, que he leído más que las novelas que comento en mi blog. Solo traigo
a «Romántica, no rosa» las que más o menos he terminado y de las que pueda
decir alguna cosa agradable, aunque sea un detallito insignificante en un mar
de cursilerías, por si a alguna lectora le llama justo eso.
Del resto escribo para
mí misma un «diario de lecturas románticas en español» totalmente impublicable,
en el que me gotea el colmillo cosa mala. Por eso puede extrañar que algunos de
los nombres que voy a mencionar sea la primera vez que aparezcan por aquí.
Me han gustado
mucho África Ruh (hasta el sopapo
que me di con Escrito con sangre y seda,
que dejé a las pocas páginas), Elena
Bargues y María Montesinos. Lo
que he leído de ellas no me resultaron experiencias 10, pero sí bastante
satisfactorias. Lo dejamos en un 8.
Hay otros nombres
que, en un tiempo, pensé que producían justo lo que yo estaba buscando en
romántica en español (Ángeles Ibirika,
Anna Casanovas, Florencia Bonelli, María
José Tirado…). Al final, me he ido dando sapazos con una u otra de sus
novelas y… va a ser que no. No digo que escriban mal, no, al contrario: creo
que objetivamente son buenas escritoras de romántica.
Lo que digo es
que, de momento, no son para mí (Ya lo he dicho: No sos vos…).
A día de hoy, creo
que la única autora en español que puede que se convierta alguna vez en auto-buy sería Marisa Sicilia. Cuando lea unas cuantas más de ella, os lo cuento.
Ese sería el
estado actual de mi «favoritismo». Si alguna sabéis algo más respecto a
mis preferidas, pasadas o futuras, me lo contáis. Igual me he despistado y sabéis vosotros más que yo.
De paso, me
gustaría saber si otros lectores tienen alguna autora que guste en este mismo
sentido: ¿hay alguien cuyos libros compréis de manera automática, sin ni
siquiera mirar la sinopsis?
Lo de Courtney Milan no acabo de entenderlo. Yo lo leo en inglés, así que cuando dejó de publicar sus novelas en español para mí desapareció. Creí entender que se pasó a la autopublicación porque decía que vendía más que publicando con editorial. Pero claro, así no nos llega.
ResponderEliminarY después están las decisiones editoriales, hace bastante tiempo que las editoriales ya no apuestan por las veteranas. A excepción de Nora Roberts y alguna más, y nos traen novelas de autoras más noveles, pero que a mí me dejan bastante fría.
Yo tampoco entiendo lo de Milan. Lo que publicó en español (los Hermanos Siniestros) ya era autopublicado. Se ve que no vendió lo que quería. Tengo que leer alguno traducido, a ver si es que en español no acertó con la traductora (a veces pasa).
EliminarYo miro las novedades todos los meses en El rincón de la novela romántica, a ver qué os puedo recomendar, pero la verdad es que tengo la impresión que cada vez se separan más la blogosfera editorial en español (traducida) con lo que triunfa fuera. Solo en juvenil creo que mantienen el nivel.
Hola!!!
ResponderEliminarSupongo que la edad no pasa, ni tan siquiera para ellas. a mí, ni la última serie de la Kleypas me está pareciendo a la altura. Sí, West es ♥ pero es una novela muy de manual, cómoda aunque es una serie que va a más y estoy con muchas ganas de leer a Cassandra.
Las relecturas a veces juegan esas pasadas, a mí Kinsale siempre me ha parecido a otro nivel, pero cuando leí su última publicación con tema BDSM incluído pensé que no me gustaba nada que se hubiera sumado al carro de las 50 sombras. Hay novelas que no las leeré otra vez nunca, sé de bien cierto que no me gustarán, hablo de las ochentiles. Otras creo que siguen siendo joyas. Hay autoras nuevas que a mí me están encantando, por ejemplo Tessa Dare y su última serie, te la recomiendo, de Joanna Shupe también hablan muy bien, pero todavía no me he lanzado de lleno. cuento con la ventaja de que apenas empiezo ahora a leer en inglés y, claro,tengo todo un mundo abierto de cosas que no se han publicado que me permite no «actualizarme»
De las mías de siempre tengo todavía muchos libros por leer, tantos que no creo que los termine.
Del mercado nacional, mejor no hablar. Marisa Sicilia es auto-buy como dices, para mí... pero también Nuria LLop y Anna Casanovas, Elena Bargues me endanta y María Monteninos me gustó mucho, te recomiendo también Beatriz Manrique y su Al abrigo del mar, una historia dulce que transcurre en Almeria.
Me paseo por tu blog, genial, de vez en cuando para echar un vistazo a esas novelas que nunca llegarán a España.
Un besote y mil gracias por compartir este espacio
A mí Kleypas me sigue convenciendo. Reconozco que Chasing Cassandra me ha gustado menos que la anterior de los Ravenel, pero aún así sigue teniendo maestría para que la novela se sostenga simplemente con un protagonista atractivo y unos diálogos que enganchan.
EliminarTessa Dare no me acaba de convencer, me gusta y me entretiene, pero no me llena. De Joanna Shupe no he leído nada, y sí que la ponen muy bien.
Intentaré a Nuria Llop, ya que la mencionas y no he probado su obra, porque parece que en español nuestros gustos son parecidos. Salvo Beatriz Manrique: lo que he leído de ella, «Hasta que llegaste a mi vida» no me gustó nada y la he desechado.
Hola Bona, me ha sorprendido que no nombraras a Lucy Parker.No sé si se te ha pasado o es que todavía no la consideras entre tus favoritas.Besitos
ResponderEliminarPues ahora que lo dices sí, tengo que meter a Lucy Parker entre mis nuevas favoritas. La primera que leí me pareció mñé, pero ha ido ganando con cada nueva novela suya que he leído.
EliminarHola Bona! Lo que yo daría por leer ese diario de lecturas románticas en español... De las escritoras españolas la única que leo y que me recuerda mucho a las escritoras de siempre es Adriana Rubens, su última trilogía histórica me encantó. Marisa Sicilia también me gusta pero hace ya tiempo que no leo nada suyo.
ResponderEliminarSandra Brown también es de las que no me lo pienso, también me gusta el género de intriga así que, a ver si algún día publica algo en español...
y Keyplas lo que dicen por ahí, los últimos libros tampoco es que sean para tirar cohetes.
Mi única autora imprescindible de la que compro todo lo que publica actualmente, y sin mirar la sinopsis, es Kristan Higgins. Rezo para que sigan llegando sus libros a nuestro país.
Saludos.
Ja ja ja,... no. El diario es impublicable, créeme.
EliminarNo he probado a Adriana Rubens, la apunto a ver si encuentro alguien más en español que me vaya.
Gracias por compartir que Kristan Higgins es tu auto-buy, siempre me gusta ver qué atrae a la gente, aunque entiendo que es algo muy personal.
Añado, para aclararme, la última saga histórica que mencionas de Adriana Rubens, ¿es la de los Richmond?
EliminarEsa es, la trilogía Whitechapel. El primero está pasable pero el segundo y el tercero, Detrás de tu mirada y Detrás de un beso, los devoré. Me gustaron que sus personajes fueran peculiares, de los que se salen de lo típico para la época.
EliminarLas autoras que compro por inercia sin tener en cuenta argumentos ni opiniones son, además de Kinsale, que si volviera a la palestra la seguiría comprando sin vacilación, Georgette Heyer, Mary Balogh y Robin Schone. De Robin Schone no tengo ni idea, no sé si seguirá escribiendo o es que las editoriales españolas se han olvidado de ella, para mi gusto una pérdida lamentable ya que esta autora tiene un estilo muy particular que en erótica no encuentro. Kleypas fue una de mis favoritas pero cuando se pasó a contemporánea dejé de comprarla con regularidad y solo leo libros sueltos de sus series posteriores publicadas en nuestro país. De la Brown me voy de cabeza a ella jaja, mientras que se deciden a seguir traduciendo sus novelas me dedico a tirar de las antiguas suyas que aún tengo pendientes de leer. Hecho mucho en falta a Sherry Thomas y a Courtney Milan. Y sobre las españolas mi fija es Marisa Sicilia. He leído otras autoras que me han gustado más o menos pero de momento no para tenerlas de cabecera. Tomo nota de las que se están nombrando, igual me llevo una sorpresa.
ResponderEliminarUn saludo.
Cuánta razón tienes: yo tampoco he visto nada parecido a la erótica de Robin Schone; si encuentro algo parecido, ya lo contaré por acá. Veo que nuestros gustos son, por lo demás, se asemejan. Sin ser mis favoritas, Mary Balogh y Georgette Heyer son siempre una apuesta segura.
EliminarHola, ya he puesto este blog en mis favoritos!. Acabo de leer a una escritora española que me ha encantado Ruth M. Lerga. Te recomiendo su serie "Los Tres Mosqueteros", sobre todo el segundo libro, "Cuando la Pasión espera", te enamorarás de James!. Y otra serie suya también estupenda "Los Knightley", dos libros a cual mejor. En cuanto a tu listado de novelas imprescindibles, estoy casi de acuerdo con todos los libros salvo excepciones puntuales, quizás con novelas que leí hace ya muchos años y que no han envejecido bien. Gracias por tu trabajo del cual me beneficio!!!! Sigue porfa!
ResponderEliminarY me olvidaba!, también te recomiendo a otra española Carmen Santos, leí El Sueño de las Antillas y me gustó mucho.
ResponderEliminarMe apunto las sugerencias de histórica en español, a ver si tengo suerte y descubro a una autora que me haga tilín. Por lo demás, no siempre podemos coincidir porque cada lector somos un mundo. Creo que, a veces no es mérito o culpa del libro en sí, que te guste o disguste, sino del momento lector en que te encuentres.
EliminarGracias por respoderme.
ResponderEliminarEstoy totalmente de acuerdo contigo en que el momento por el que pases influye en que te guste un libro más o menos y obviamente con los años tu gusto cambia. En general te vuelves mas exigente y selectiva. Quizás antes me fijaba más en la trama y ahora ya no me es suficiente, ahora también quiero que literariamente tenga un nivel y que esté bien editada y corregida.
En fin, creo que con los años en unas codsas te cuelves más tolerante y en otras mucho mas intransigente. Tonterias las mínimas.
¿Si lees a Ruth M. Lerga me dirás si te gustó? y también a Carmen Santos?. Me interesa tu opinión, a ver si coincidimos!.
Cuando las lea, si encuentro algo de mi gusto, sí que haré crítica. Pero si no puedo rescatar absolutamente nada, siempre prefiero no comentarlas. Es una de esas autocensuras que me hago, solo en relación con autoras en español: no las comento si no tengo algo positivo que decir, aunque sea solo una cosa entre un mar de cosas negativas.
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