Divertida y
sexy, en tercera persona
Como este es un libro de varias portadas, aquí os pongo dos de ellas, correspondientes, si lo he entendido bien, a ediciones digitales.
La del caballero vaquero con camisa a cuadros es la del ebook y audio, de 2019. La de la derecha, colorinchi, es de una edición más actual, de cuando les ha dado por esas cosas. Abajo os pondré la del mass market paperback.
DATOS GENERALES
Título original: The Trouble with Christmas
Subgénero:
contemporánea
1.ª
publicación: Entangled Publishing, 2019
Parte de
una serie: Credence, Colorado #2
Páginas: 400
ISBN13:
9781640638198
NO
TRADUCIDA AL ESPAÑOL
SINOPSIS
(según Fiction DB)
Todo
lo que quiere Suzanne St. Michelle son unas vacaciones exageradas a base
de ponche de huevo con su mejor amiga en Credence, Colorado. Pero cuando sus
estirados padres insisten en que ella vuelva a casa, a Nueva York, por Navidad,
les suelta que su sexi casero es, en realidad, su novio, y que no puede
dejarle, porque Joshy «adora» la Navidad. Cuantas
más luces centelleen, mejor.
No, el
ranchero Joshua Grady no «adora» la Navidad. Ni la compañía, ni las mujeres
parlanchinas. Desafortunadamente para él, la mujer más habladora que jamás haya
alquilado la cabaña en su rancho, invitó a sus ricos padres, estrellas de la
escena artística, y ahora insiste en que interprete al «falso novio ranchero» en
una producción de Las Navidades Más Cursis del Mundo. Y de alguna manera...
ella consigue que él acepte.
Al
parecer, hará cualquier cosa para recuperar su vida tranquila. Al menos hay
muérdago cada dos pies y besar a Suzy es sorprendentemente fácil. Pero en medio
de metros y metros de espumillón, demasiados jerséis navideños horteras y un
árbol que se puede ver desde el espacio, está empezando a querer lo que perdió
cuando era niño: una familia. Lástima que sea con una mujer que se volverá a Nueva
York antes de que suenen las campanadas…
¿Entra dentro
de “Lo mejor de la novela romántica”?
Pues, sin entrar en las mil mejores, la tengo muy arriba en mi lista,
en el puesto 2092 a día de hoy, gracias a que ganó el premio de novelistas
románticas de Australia de 2019 en la categoría de small town. Tuvo críticas estupendas: fue un Guilty
Pleasures Purest Delight y le dieron cinco estrellas tanto Harlequin Junkie como Jo Reads Romance. Aparte de eso,
obtuvo una starred review en Kirkus Reviews. Tiene ese tópico tan atractivo de mysterious/moody loner dude
CRÍTICA
La australiana Amy Andrews escribe
contemporáneas en tercera persona, con buena dosis de humor y sus escenas
sexis. Esta es una de las más apreciadas. Si eres de las de LOL, te
arrancará más de una carcajada. Como no es mi caso, ya que mi sentido del humor
es algo particular, sí puedo decir que lo leí con una sonrisita boba todo el
rato.
Se ambienta en Credence, Colorado,
uno de esos sitios que se parece mucho a las extravagantes localizaciones de Rachel
Gibson o Jennifer Crusie. Hubo en el pasado una especie de caravana de mujeres,
a ver si pillaban cacho entre los recios vaqueros de la zona.
Allí llega Suzanne St.
Michelle (29), pintora en busca de inspiración. Ha alquilado una cabaña en el rancho de
Burl Grady, que lleva su sobrino Joshua Grady (35). A éste no le hace ni
pizca de gracia porque es un tipo callado, solitario, que lo último que quiere
es compañía ahora que se aproximan las navidades.
Alucina cuando llega su Mystery
Machine, y en vez de aparecer Shaggy y Scooby-Doo, surge esta mujer, de caderas
rotundas y aire de vecinita de al lado. Justo con las redondeces que tanto le
atraen a Joshua, lo cual es peor.
Por un momento cree que es de las
que ha venido a buscar marido.
No sé lo
que te habrá dicho mi tío, pero no estoy en el mercado en busca de una mujer.
Ni para cenar, o tener una cita, ni siquiera para un revolcón rápido entre las
sábanas. Me gusta la paz y la tranquilidad. Me gusta la soledad. He dicho más
palabras hoy que en toda la semana. Así que tú te quedas aquí —inclinó la
cabeza hacia la cabaña— y yo me quedaré allí —apuntó al porche trasero de su
casa— y nos llevaremos bien.
Algo que a ella le cabrea.
Mira, señor.
Todo ese postureo de vaquero taciturno puede que funcione con algunas mujeres,
pero creo que podré contenerme alrededor de tu masculina tontería de
machote. Noticia de última hora para ti. Estoy aquí para pintar, no para enrollarme
con nadie o liar a ningún… vaquerito para que me ponga un anillo. Todo
esto que tuuuu tienes —puso un acento deliberadamente sureño al tiempo que
hacía gestos locos señalando lo que les rodeaba— es realmente encantador, pero
soy una neoyorquina. Así que sí, tú te quedas allí, y yo intentaré
resistir el impulso de dejarte cada mañana cartas de amor en el porche.
Todo lo callado que es él, lo
compensa ella con su charlatanería, que le pone aún más de los nervios. No ayuda
nada que para pintar ponga la música a tope, y menos ver el tema que ella ha
pintado.
Lo peor viene cuando ella lía la
cosa con sus padres. Se supone que Suzanne quiere vivir unas Navidades
auténticas, en el Oeste. Sus padres son muy exquisitos y artísticos, así que su
idea de decoración navideña es muy fría, y Suzanne desea algo genuino. Por
eso ha aceptado la invitación de su amiga Winona de ir a Credence.
Sus padres le piden que, como El
Almendro, vuelva a casa por Navidad. Suzanne dice que no, y como excusa pone
que es que tiene un novio que es muy sentimental en cosas navideñas y por eso
se queda allí, en Colorado, a celebrarlo con él, con música, luces, espumillón
a raudales y jerséis horteras.
Craso error, porque entonces la
madre decide que sean ellos, sus progenitores, los que vayan allí. La mamá es
una artista de renombre, una Barbara Hepworth dedicada a temas de alta
sensualidad. Parece que su matrimonio está en crisis. Así que Suzanne acepta
que vengan, a ver si pueden salvar su relación.
Claro que esto implica que Joshua
Grady acepte hacerse pasar por su novio. Y no solo eso, sino encima uno al que
le apasiona la Navidad (con música, luces, espumillón, etc. etc., véase más
arriba). Cosa que no puede ser más lejana a la realidad.
Como esto es Romancelandia, ya
sabéis cómo sigue, la fake relationship acabará haciéndose realidad,
después de unas cuantas escenas hilarantes y otras de lo más sexis por la
química que hay entre estos dos.
Me pareció muy divertida la parte en
que, como ellos dos están pez sobre lo que es una «auténtica Navidad», se ponen
a ver películas Hallmark para saber qué es lo que hay que hacer. Después de
leer este libro, las navidades de 2024 las pasé dándome un atracón de esas
películas cursis, sentimentaloides y romanticonas en que todo al final sale
bien entre gente monísima. Hay unas cuantas en Prime Video.
The trouble with Christmas es una novela de esas en que los protagonistas
son opuestos que se atraen mucho:
👉 Ella, una neoyorquina artista, habla hasta por
los codos.
👉👉Él, un ranchero callado más áspero que el papel de lija, es huérfano y ha pasado por la guerra, solo quiere que lo dejen tranquilo
en su rincón de Colorado.
Ratón de campo/ratón de ciudad, podría decirse.
Entre ellos hay chispa, diálogos
divertidos, y pensamientos de lo más inadecuados. Dos que se enamoran muy a su
pesar, sí, tiene eso tan divertido de ver cómo van cayendo en el amor a pesar
de que se resisten con uñas y dientes.
Aparecen unos cuantos secundarios
atractivos, unos dan color local, y otros te hacen desear sus historias, como
Tucker, el camarero con complejo de asistente social, o Arlo, el estirado
policía hostil a Winona, la escritora de novelas eróticas. He mirado y
remirado, y aunque veo que muchos queremos leer la historia de Arlo y Winona,
la autora no ha tenido a bien, después de seis años, escribirla.
Me leeré las otras de Credence que
me faltan y cruzaré los dedos para que en algún momento saque la historia de
estos dos.
Valoración personal: notable,
4 estrellas
Se la recomendaría a: quienes
gusten de contemporáneas graciosas y sexis.
Otras críticas de la novela:
En
español, no he encontrado nada, lo cual no es de extrañar porque no está
traducida. Yo la descubrí, además, porque tiene una serie sobre una modalidad
de rugby australiano, y no es algo que aquí atraiga mucho, tampoco.
Pero allá afuera gusta. Quien la prueba, repite.
Harlequin Junkie, 5 estrellas.
Jo Reads Romance, 5 estrellas.
Sincerely Karen Jo, 5 estrellas.
Starred review en Kirkus Reviews.
Reverie society, 4 estrellas.
Will Read for Booze, 3 estrellas.
Y tal como anticipé, aquí os dejo la que entiendo que es portada original, o así aparece en Fiction Data Base como la original del libro en papel (formato mass market paperback*) en septiembre de 2019.
* Mass market paperback es un tipo de libro bolsillo, rústica, tapa blanda, de unos once por dieciocho centímetros.