martes, 31 de marzo de 2020

Crítica: “The lady always wins”, de Courtney Milan


Un estupendo cuento sobre segundas oportunidades
 
Courtney Milan, 2/2013
DATOS GENERALES

Título original: The Lady Always Wins: A Novella
Subgénero: histórica
Fecha de publicación original en inglés: 2012 (en la antología Three weddings and a murder; independiente, en el año 2013)
Páginas: 74

SIN TRADUCIR AL ESPAÑOL

SINOPSIS (según Fiction DB

El financiero de ferrocarriles Simon Davenant ha esperado siete años para una segunda oportunidad con su mejor amiga y amor de juventud. No va a permitir que la ruina financiera que lo amenaza destroce su oportunidad.
Esta vez, hará lo que sea para asegurarse su mano en matrimonio, incluso si significa que después perderá su corazón para siempre.
The Lady Always Wins es una historia corta de 18.500 palabras (alrededor de 60 páginas impresas).

¿Entra dentro de “Lo mejor de la novela romántica”?
No, es de esas historias que compro sólo porque la autora me gusta, en concreto Courtney Milan ha sido durante bastante tiempo una de mis favoritas.

CRÍTICA
Me he dicho que este año voy a leer (y releer) obras de mis autoras favoritas. Me he dado cuenta de que, de Courtney Milan solo me faltaba hablar aquí de un par de ellas. Así que empiezo por la más antigua: The lady always wins («La dama siempre gana»), que apareció primero en 2012, dentro de una antología publicada por Smashwords Edition (con relatos de otras tres autoras, la más conocida, Tessa Dare), y luego en 2013 Milan se autopublicó.
Es una historia cortita de un reencuentro: el de Simon y Ginny. Él era joven de buena familia, muy sobrado, y ella tiene menos recursos. Mientras fueron niños, corrieron todo tipo de aventuras por los campos. Luego de adolescentes aquello ya era un amor en toda regla.
La cosa se frustró porque él la quería, ya; pero entonces los padres de él lo desheredarían y Ginny, simplemente, no deseaba vivir en la pobreza. Él se lo reprocha pero ella le viene a decir que solo quien no ha pasado hambre puede creerse que el amor lo supera todo.
O sea, que lo de contigo, pan y cebollas, casi que no.
Ella se casó con un hombre que tenía recursos y ahora, ocho años después de que Ginny y Simon se despidieran de mala manera, ella es una virtuosa viuda y él un empresario con pelas.
Y él vuelve a por ella pensando que esta vez no le dirá que no. Aunque claro, hay un pequeño problema: ella sigue decidida a no caer en la miseria y él, aunque es muy rico, está a punto de perderlo todo. Pero antes, quiere asegurarse que ella se casará con él. Cuando le venga la ruina económica, ya le odiará ella, pero no podrán hacer nada porque estarán casados.
Ese es el planteamiento de la historia. Es breve y, como todas las historias en las que ya estaban enamorados de antes, el formato cuento le va muy bien. Milan lo escribe, además, de una manera en que no falta ni sobra una escena, o una frase. Es una distracción preciosa para una tarde.
Como todas las historias de segundas oportunidades, tiene que ser creíble por qué rompieron (lo es) y que eso ahora se resuelva para que su final feliz sea creíble (y también lo logra, gracias a cualidades inesperadas tanto en ella como en él).
No puedo entrar en muchos más detalles. Estos se enamoraron de jovencitos, y no han conseguido olvidar ese amor. Cuando se reencuentran, vuelve con naturalidad aquello que sintieron, solo que más seguros de sí mismos, más maduros, más… adultos.
Entre ellos hay humor, pasión, un poco de tensión… Narrado de la manera más amena posible. Y con un giro muy relevante en la trama que no, no lo vi venir. Ni de lejos. Lo cual es fabuloso. ¿No os encanta cuando los autores os sorprenden? Yo adoro eso.
Cierras el libro con una sonrisa en la boca, recordando, siempre, lo fabulosa que es Milan para los relatos cortos. No conozco en romántica a nadie que lo haga tan rematadamente bien, una y otra vez.
No me explico por qué esta historia pasó tan desapercibida. Para mí tiene un gran encanto, los personajes son de esos a los que coges cariño, toda la trama está bien hilvanada,… no sé, la verdad. A mí me hizo mucho tilín cuando la leí hace años y la he vuelto a disfrutar como gocho en lodazal ahora que la he releído.
Me siento triste, porque ya solo hay una obra de Milan que leer y comentar aquí: su participación en la antología del Hamilton's Battalion: A Trio of Romances (2017). Y luego, a esperar a ver si aparece algo suyo que me quite el amargo sabor de boca de sus dos últimas publicaciones, auténticos pestiños.

Valoración personal: notable, 4

Se la recomendaría a: quienes quieran un relato corto histórico con encanto.

Otras críticas de la novela:
AztecLady le puso 8.75 sobre 10 en su crítica. 
4 estrellas para Under the Covers
Another Look Book Reviews la considera una gema y le pone 4 corazones
Otras sólidas 4 estrellas para el blog The Write Thought
3.51 estrellas en Good Reads (a día de hoy). 
Por si queréis saber algo más de la antología, Mrs. Giggles la comentó y le dio 3 OogiesPublicó esta crítica en octubre de 2019, y creo que a Mrs. Giggles le pasa un poco lo mismo que a mí, que percibe que quizá a Milan ya no le interesa seguir trabajando en esta línea. Solo que Mrs. Giggles lo dice de una manera, ejem, más franca.

sábado, 28 de marzo de 2020

Crítica: “La princesa”, de Gaelen Foley


Demasiado irregular para recomendarla
Bolsillo (Terciopelo), 2/2013

DATOS GENERALES

Título original: Princess
Subgénero: histórica / 1805

Fecha de publicación original en inglés: 1999

Parte de una serie: The Ascension's Principality Trilogy (Los príncipes del mar) #2
Páginas: 416

TRADUCCIÓN EN ESPAÑA
Título:  La princesa
Traductora: Diana Delgado Jiménez
Edición: 1ª ed., 1ª imp.
Fecha Edición: 2/2007
Publicación: Terciopelo

SINOPSIS (de la contraportada)

La hermosa y sensual princesa Serafina está enamorada de Darius Santiago, su protector y hombre de máxima confianza del rey, desde que era una niña. Pero Darius, que fue rescatado de la nada por el rey para convertirse en un espía, no cree merecer el amor de la joven -aunque también la ama- y durante años esconde sus sentimientos. Así, cuando el rey decide que Serafina debe casarse con el príncipe ruso Tyurinov para que su país proteja la pequeña isla de Ascensión del ataque de Bonaparte, Darius se desespera y, para evitar el matrimonio, prepara un complot contra Napoleón que supondrá un desafío a su amor y una amenaza para sus vidas y la supervivencia del reino.

¿Entra dentro de “Lo mejor de la novela romántica”?
Estaría entre las dos mil mejores, más o menos. Estuvo en dos Top 1000: la 270 de RomanceNovels.Me y la 811 en Book BInge. Ha tenido crítica de 5 estrellas en The Hope Chest Reviews y, además, en cierta ocasión apareció entre las «favoritas de todos los tiempos» de los lectores de All About Romance.

CRÍTICA

Hace año y medio publiqué crítica de la primera novela de esta trilogía, El príncipe pirata. He tardado año y medio en hincarle el diente a la segunda. La tenía por casa, lo que significa que la compré y leí hace años, pero no recordaba nada de la historia, así que ha sido como leerla de nuevo.

La protagonista de la novela es princesa de la imaginaria isla de Ascensión, en algún lugar cerca de Sicilia y Córcega. Es una niña bastante mimada, hermosa (sí, de esas con ojos violetas) y unánimemente admirada por todo varón que la conozca.

Ahora su padre, por buscar un aliado que mantenga a raya las ambiciones napoleónicas, ha decidido casarla con un príncipe ruso.

Lo que pasa es que la joven de veinte años hace tiempo que le entregó su corazón a un oscuro caballero español, un bastardo que ha hecho fortuna como mano izquierda del rey, su padre. Asesino, espía, y lo que se tercie.

No hay demasiado misterio en cuanto a que estos dos se gustan, aunque cada uno recela de los verdaderos sentimientos del otro. Les separa la posición social, la edad (él es catorce años mayor que ella), y el propio interés de su país, que exige esa boda foránea.

Aquí hay mucha pasión reprimida, acción, espionaje, idas y venidas, que si me quieres, que no, que si no soy bueno para ti, que en realidad no me amas, que no, tonto, que en realidad eres tú quien no me quieres a mi… manipulaciones diversas de él y de ella, y luego, cuando acaban cediendo a la tentación, sexo bastante explícito.

El planteamiento es muy atractivo, y el argumento tiene su intriga. Tiene además el punto positivo de buscar una ambientación un poco diferente, mediterránea, lejos de la Regencia británica. Los personajes son atractivos. Sobre todo ese sombrío Darius, con su pasado doloroso, su personalidad decidida y despiadada, la lealtad sin fin hacia la casa real de Ascensión y esas cosas.

Quizá cueste más aceptar a Serafina, que resulta realmente una muchacha caprichosa, que parece que quiere a Darius solo porque es el único hombre que parece tratarla con indiferencia y que está fuera de su alcance. Quizá la autora quería demostrar cierta evolución en el personaje, de jovencita mimada a mujer adulta y enamorada. No lo sé, no estoy segura. Me acabó resultando un personaje un poco cansino.

Esta trama con su intriga y los atractivos personajes merecían, a mi juicio, una autora con otro estilo. No me refiero a que sea un poco old skool. Es más bien aburrido de tanta comedura de tarro de los personajes, que ralentizaban todos los diálogos. Habría agradecido algo más de agilidad.

Y a pesar de toda esa verborrea mental, más de una vez me pregunté si estos dos realmente se conocen, ¿se han mirado realmente bien? ¿O solo están enamorados de la imagen de fantasía que se han elaborado? Ella, de un héroe bigger than llife, y él, de una muchacha pura e ideal.

Añado que había escenas que no tenía yo muy claro que fueran a ninguna parte. Creo que el libro habría mejorado con una vigorosa edición que metiera tijera. Parafraseando a José II de Austria: demasiadas palabras, señora Foley.

Me pasó lo mismo que con la primera de la serie, de la que también dije que me habría gustado más si hubiese tenido cien páginas menos.

Otrosí digo: la traducción. Tiene esa manía de dejar en inglés los nombres propios y, la verdad, me da un poco de grimilla leer Genoa (por Génova), los zares Alexander (por Alejandro I) y Paul (por Pablo I) o Pauline y Lucien Bonaparte (Paulina y Luciano, en la historiografía de toda la vida). La traductora lo remató, en la nota final, aludiendo a la Corsa de procedencia de Napoleón.

De la españolidad del héroe casi mejor que no hablamos. «Darius» parece nombre improbable para un español de principios del siglo XIX; y, de permitirse tan pagana denominación, sería Darío. Si tenía medio hermanos legítimos y mayores que él, no veo forma de que él pudiera heredar el título de conde. Sale en un momento una «licencia especial»… muy anglicano, ¿no? A menos que el Derecho Canónico de la época fuera diferente, claro. Y siendo español, of course salen menciones al toreo y la guitarra, la gitanería y olé.

Mi experiencia con este libro ha sido demasiado irregular para recomendarlo. Había cosas muy buenas que me tenían intrigada con otras que me hacían los ojos chiribitas y párrafos y párrafos que, simplemente, me salté. Ahora entiendo por qué leí esta novela de Gaelen Foley hace años y no volví a intentar ninguna otra obra suya.
Ivy, 7/1999

Así que no sé muy bien si voy o no a leer la tercera de la serie, la verdad.
Valoración personal: allá tú, 2

Se la recomendaría a: quienes gusten de héroes sombríos y heroínas caprichosas.

Otras críticas de la novela:

Hay tres críticas, en español, en El rincón de la novela romántica. A Azalea le costó encontrar algo positivo que decir de la novela, pero las otras dos comentaristas no tuvieron ese problema y una le dio un 5 y a otra le deleitó.

Perfecto caso le da puntuación de 4.5 sobre 6. Considera que el romance fue «perfecto».

En La comunidad del libro parece que también gustó. 

En inglés 5 estrellas en The Hope Chest Reviews

The adventures of an intrepid reader la puntúa 4 sobre 5. 

Menos halagüeña fue la opinión de All About Romance, donde le cascaron una D al libro y una C+ al audiolibro narrado por Elizabeth Wiley

miércoles, 25 de marzo de 2020

Crítica: “Outfox”, de Sandra Brown


No todo es exactamente lo que parece… y a los lectores de suspense nos encanta

DATOS GENERALES
Título original: Outfox
Subgénero: suspense
Fecha de publicación original en inglés: agosto de 2019

NO TRADUCIDA AL ESPAÑOL

SINOPSIS
Un hombre con múltiples identidades.
Ocho mujeres que desaparecieron sin dejar rastro.
La siguiente víctima probablemente sea… su esposa.

Al agente del FBI Drex Easton solo le mueve un objetivo: superar en astucia al estafador conocido en el pasado como Weston Graham. A lo largo de los años, Weston ha asumido innumerables nombres y disfraces, atrayendo a ocho mujeres ricas para hacerse con sus fortunas antes de desaparecer sin dejar rastro.
Drex Easton está convencido de que estas mujeres han sido asesinadas, y que el hombre al que él conoce como Weston Graham es responsable. Pero cada vez que Drex está cerca de capturarlo, Weston cambia de personaje. Ahora, por primera vez en su largo juego del gato y el ratón, Drex tiene un sospechoso a la vista.
Atractivo y encantador, Jasper Ford está recién casado con una exitosa empresaria, Talia Shafer. Haciéndose pasar por un nuevo vecino, Drex intenta acercarse a la pareja.
Esta es la única oportunidad de Drex de ser más astuto que su ingenioso archienemigo antes de que él vuelva a matar. Pero antes debe determinar si la deseable Talia es una despiadada cómplice… o la siguiente víctima.

¿Entra dentro de “Lo mejor de la novela romántica”?
No. Es de las que compré (¡y en papel!) solo por ser de Sandra Brown. No obstante, sí que estaría entre las, digamos, 20.000 mejores, por aquello de que ha tenido una crítica de A en The Good, the Bad and the Unread.

CRÍTICA

Outfox es la novela de suspense que Sandra Brown sacó en agosto de 2019. He esperado hasta que he tenido la versión rústica o tapa blanda, que ha salido en febrero de 2020. Tapa dura o Kindle me resultaban caras. Y me alegro porque, aunque me ha gustado mucho y he pasado un buen rato leyéndola, lo cierto es que no me parece de las mejores de su producción.
Ahora me toca hablar de esta novela sin revelar nada, porque es problemático esto del suspense romántico. Parte del disfrute lector viene de las sorpresas que te va dando la autora. Y Sandra Brown es fantástica en eso de ir girando el argumento para un lado, y otro, y acabar sorprendiéndote con algo que no veías venir.
Así que solo voy a hablar, más o menos, del planteamiento.
Drex se hace pasar por un escritor para vigilar a los moradores de la casa de al lado: Jasper Ford y Talia Shafer. Él sospecha que Jasper es un asesino en serie, responsable de la desaparición y muerte de ocho mujeres, de cuyo dinero se ha apropiado.
Finge ser un tipo relajado, sin más problema que ir escribiendo su novela sobre la Guerra de Secesión estadounidense, pero no pierde detalle de lo que pasa entre ellos. Se hacen conocidos, interaccionan como amables vecinos… Y nada más echarle el ojo a Talia Shafer, siente un intenso deseo por ella.
Y eso que no sabe si ella realmente ignora que su esposo puede tener tenebrosas aficiones, o si no será más bien su cómplice.
Luego hay un tipo en el FBI que considera que Drex es simplemente un fantasioso, que ve un asesino en serie donde no existe, y entonces dedica su tiempo más a amargarle la vida a Drex que a intentar resolver los asesinatos… Porque una vez que no se trata solo de mujeres desaparecidas, sino de cadáveres, ya no es ninguna fantasía.
Cuando se comete un asesinato, y Talia ve, asombrada, que el vecino escritor, por el que se siente atraída a su pesar, con quien ha compartido algún beso apasionado… va y suelta «Mi nombre es Drex Easton… Agente especial del FBI Drex Easton», ya no sabe qué pensar.
No será la única sorpresa que tenga. La labor a la que se enfrenta Drex es complicada: 1) intentar atrapar a un tipo muy resbaloso; 2) ir un paso por delante de un gilipollas con placa para quien Drex es una pesadilla; 3) resistirse (o no) a la intensa atracción sexual que siente por Talia...
A Drex le ayudarán dos tipos muy peculiares, que son tu típico espía que sabe fundirse con el paisaje y el friki de la informática entrado en carnes. Aparte de eso, Drex recurrirá a todo lo que tiene a su alcance, incluida la manipulación psicológica del que se ponga a tiro.
Es una de esas novelas que tiene bastante dosis de competence porn. El malo es listo a rabiar, y te hace dudar. Drex demuestra sus habilidades como criminólogo. Al principio el argumento va poco a poco, mientras Drex se va introduciendo en el mundo de sus vecinos, pero en cuanto aparece un cadáver, la cosa se acelera y complica hasta el final en el que, sí, la autora te guarda alguna sorpresa.
Te quedas con la impresión de que la trama tiene bastantes agujeros, cosas que no te explicas del todo, y que acaba con revelaciones que no ves venir, y todo es lindo para la pareja que queda junta al final. Yo cerré el libro muy satisfecha, porque no hay nada que nos guste más a los lectores de suspense que nos sorprendan.
Como dije respecto a Tailspin,el libro de 2018, Sandra Brown escribe tan bien, con tal soltura,… sabe crear personajes tan a su estilo, y llevarte por sus intrincados argumentos,… que lo hace parecer fácil. Y creo que con eso cuesta ver lo buena que es. Si esta historia de la cuenta una novata, alucinaríamos.
Outfox es, dentro de esas novelas de Sandra Brown, una más, muy buena, sorprendente, cumplidora, te tiene al borde de la silla mordiéndote las uñas… pero luego me temo que la olvidaré rápido. No es como Lethal o Sting, que se me quedaron clavadas y me parecen muy-muy brillantes.
Advierto que Outfox tiene algo que puede echar para atrás. Drex es un héroe de moral dudosa, que sabe que Talia está casada pero no pestañea ante la posibilidad de adulterio. Un poquito como el Griff de Juega sucio o el Burke de Fat Tuesday, y, claro, con heroínas a las que no puedes admirar del todo porque al fin y al cabo se casaron con tipos que no lo merecen. La heroína casada con un personaje negativo, en contemporánea, se hace difícil de tragar
Admito que Outfox me ha gustado bastante más que esas otras, quizá porque Drex me pareció más listo, más celoso de una misión por cumplir, hacer justicia a esas mujeres que, no tiene la menor duda, han sido asesinadas por este psicópata. Hay que ser muy astuto para superar a un asesino tan escurridizo.
Frente a ello, Talia es una heroína desdibujada, que no sugiere nada, quedas con bastantes dudas de qué persona es, por qué se casó con un hombre treinta años mayor que ella,… Cuando ella es guapa, tiene treinta años, ha alcanzado el éxito en su empresa, goza de un círculo de amistades y de clientes… He acabado el libro con su final feliz, con lacito sentimental y todo… y sigo sin conocerla en absoluto.
Valoración personal: buena, 3.

Se la recomendaría a: quien guste de suspense más bien psicológico.

Otras críticas de la novela:

No he visto críticas en español. Y, de las que he encontrado en inglés, son más bien de páginas distintas a las habituales de romántica. El suspense romántico es lo que tiene, se encuentra ahí en un punto intermedio de que no le acogen del todo en la blogosfera romántica ni en la de suspense.
Sandy M, en The Good, the Bad and the Unread, le dio una A
5 estrellas merece para The Book Worm
4.75 estrellas es lo que le pone Maldivian BookReview
Jessica Shuck no sabía si calificarla con 3 ½ estrellas o con 4
Luego están las reseñas en diversas publicaciones, que hablan brevemente del libro, sin puntuar: NY Journal of Books, Kirkus Reviews y Publishers Weekly
Acabo con una entrevista que le hicieron a Sandra Brown en The Real Book Spy con motivo de la publicación de este libro. 

domingo, 22 de marzo de 2020

Crítica: “La misión más dulce”, de Linda Howard


Una genérica que engancha


DATOS GENERALES

Título original: Mackenzie’s mission
Subgénero: contemporánea
Fecha de publicación original en inglés: 1992
Series: Los Mackenzie #2 / Silhouette Intimate Moments #445
Páginas: 254


1.ª edición en España:
Traductora: Victoria-E, Horrillo Ledesma
Fecha: 6/2005
Editorial: Harlequin Ibérica
Páginas: 320
Colección: Top novel, 6
Otras ediciones: Romantic Stars n.º 5 (2007) / Colección Linda Howard n.º 14 (2008) / Los Mackenzie - Top Novel n.º 164 (2014) - eBook (2017)

SINOPSIS (en Harlequineras

El Ave Nocturna, un revolucionario prototipo de avión provisto de un sistema armamentístico de alto secreto, era la prioridad número uno del coronel Joe Mackenzie, alias Mestizo. Y la experta en armas Caroline Evans era su distracción número uno. Aquella mujer se lo estaba poniendo difícil, pero Joe no había llegado a ser el mejor de los mejores por rendirse. Entonces descubrió que alguien estaba saboteando el Ave Nocturna desde dentro, y la experiencia de Caroline y sus largas jornadas de trabajo parecían convertirla en la opción más obvia. Ahora Joe tenía que elegir entre la lealtad a su país y el amor por su principal sospechosa...

¿Entra dentro de “Lo mejor de la novela romántica”?
Sí, en mi lista de Las mil mejores novelas de romántica aparece en el puesto 450. Ha aparecido en varias listas de las mejores novelas románticas: la 30 de The Romance Reader, n.º 90 en el Top 100 de All About Romance en el año 2000, así como en el de Book Binge (la n.º 363). Obtuvo el Premio RT 1993 en la categoría Series W.I.S.H. Hero. Está considerada como una de esas novelas «favoritas de todos los tiempos» tanto en Romantic Times como en Romance.io. Hay que recordar que forma parte de la serie de los Mackenzie, considerada como una de las mejores de romántica en aquella encuesta que se hizo por NPR allá por 2015.

CRÍTICA

A pesar de que se publicó en el año 1992, es uno de esos harlequines por los que no pasan los años y merece la pena que le demos una oportunidad.

Caroline es una científica especialista en el tema de los láseres que acude a una base militar en el desierto de Nevada. Es precisa su intervención en un proyecto secreto de un nuevo avión. Se trata de una heroína que, por su notable inteligencia, estudió cursos avanzados para su edad. Con lo cual, al ser la más chiquitina de la clase, en el instituto y en la universidad, resulta que no tuvo oportunidad para ligar con los chicos.

Y luego, cuando ya tenía edad, no había pasado por esas etapas previas de tonteo con lo cual, a pesar de ser una chica con su atractivo físico y no tener nada en particular contra el sexo, aún es virgen, ¡a su edad…!

Conocerá al coronel del ejército del aire encargado del proyecto, que no es otro que Joe Mackenzie, a quien conocimos, como adolescente, en Lecciones privadas, la primera obra de esta serie. Es un tipo de metro noventa, flamante piloto a quien todos respetan, que tiene hielo en las venas y que puede acongojarte con una sola mirada de sus ojos azules.

En un entorno tan masculino, no tarda en haber insinuaciones que incomodan a la poco experimentada Caroline. La cosa se resuelve rápido gracias a la intervención de Joe, que no quiere tonterías en un proyecto de millones de dólares.

Entre ellos las cosas cobran pasión muy pronto. Caroline se da cuenta de que Joe es una opción estupenda si quiere experimentar esto del sexo con otra persona, y se pone a ello sin muchas alharacas. Las escenas entre ellos dos son realmente muy tórridas, un poco inesperadas para un harlequín. Lo que ocurre es que en realidad era de un sello peculiar: Silhouette Intimate Moments, quizá por eso destacan esos momentos tan explícitos y apasionados. Lo mejor de la novela, a mi modo de ver.

Joe es un héroe sexy, muy atractivo, con esa pasión férreamente dominada porque por su trabajo y su carácter sabe mantener la cabeza fría en todo momento. Establece cierta distancia con la gente, es reservado con sus cosas. Y, sin embargo, no puede evitar sentirse atraído por Caroline. Al final, ella es la persona que le vuelve loco, que le hace perder el control y entregarse por completo.

Personalmente, siento debilidad por los héroes en uniforme. Militares y policías, sobre todo si son tan dedicados como Joe y destacan brillantemente en su carrera.

Esta mujer es una heroína peculiar. Físicamente atractiva, de esas que les gusta ir impolutas, no es precisamente tu científica gañana y despistada. Es muy cerebral en todo, a la hora de analizar la realidad y a sí misma. Muy franca, no despliega ninguna ñoñería: si toca sexo, toca; si se enamora, pues reconoce con honestidad sus sentimientos.

Como es una de estas novelitas cortitas, las cosas pasan de una manera rápida, te deja sin respiración. Lo uno pasa a lo otro. Luego hay un poco de misterio y suspense en relación con el prototipo que están probando, y en esta subtrama todo va también rapidito-rapidito, pero bien planteado ese puntín de misterio.

Leí esta novela en febrero de 2014 y dejé comentario en El rincón de la novela romántica. Le puse como puntuación 7/10. Después de haber releído la novela, le pongo cuatro estrellas. Incluso creo que me ha gustado más en una relectura que la primera vez. Me parece casi perfecta en este tipo de novela, en la que todo ha de ir apresurado porque no hay muchas páginas. No te deja un momento de respiro.

Es de esos harlequines que merece la pena leer, y no me extraña que Harlequín Ibérica la haya reeditado varias veces.

Como suelo decir, estas novelitas previstas para una vida hábil de quince días en el kiosco y, sin embargo, seguimos leyéndolas décadas después, es que tienen algo especial.

Así que si la veis baratita, puede merecer la pena echarle un veo. Lo más probable es que no te decepciones, siempre que tengas en cuenta qué tipo de libro es.
Valoración personal: notable, 4

Se la recomendaría a: los aficionados a novelas genéricas con sexo explícito y los héroes militares.

Otras críticas de la novela:
En español, tenemos la crítica de LadyZarek en el Rincón de la Novela Romántica, que le pone 4,5 estrellas
Niusa, de La voz que vive en mí, la puntúa 7,5/10
A la cama con… un libro deja esta novela en 3,5 Gandys. 
Ahora, en inglés.
Smitten by Books, 5 estrellas, comenta que posiblemente sea la novela que más le gusta de los Mackenzie. 
Stranded in Chaos le da 4,5 estrellas, redondeado a 5 para Good Reads. 

Summary and Study Guide en AllReaders.com.

jueves, 19 de marzo de 2020

«Casar lejos de casa es beber en calabaza»


Este año he decidido comentar algunos tópicos de romántica. Voy a dar preferencia a los que a mí me gustan. Explicar un poco por qué creo yo que funcionan y luego poner ejemplos, por si os gustan.

Al recordar hace poco los clichés de las novelas de Sarah Morgan, he pensado en un tema de romántica que se refiere a esos casos en los que la pareja protagonista perteneciente a culturas distintas.

Yo lo llamo «romance intercultural».

Reconozco que es difícil de tratar. Afecta a nuestra identidad, y también a cosas que nos cuesta percibir, como los estereotipos que todos tenemos en nuestras cabezas.  

Por eso es fácil que nos hagan pupita si están mal llevados.

Me refiero a la «cultura» en el sentido antropológico: lo que la gente cree, piensa o hace por formar parte de una determinada población.

Proceder de diferentes lugares, tener diferente color de piel, o creencias religiosas, o cualquier otro elemento diverso, suele implicar contrastes muy interesantes, que son caldo de cultivo perfecto para la tensión romántica.

Al hilo de esto, querría mencionar lo ilustrativos que son los vídeos de españoles por el mundo y de extranjeros en España, a los que me confieso adicta. Al contar lo que les llama la atención te das cuenta de que cada uno tiene sus costumbres, que cosas que tienes por naturales son, en realidad, culturales.

Para explicar a qué me refiero, podéis ver este pequeño vídeo de una pareja mexicana que visitó España.


¿Por qué funciona?

Como siempre, hay que preguntarse cuál es la tensión interna en estas narraciones que te impulsan a seguir leyendo.

En los romances interculturales creo que ese contraste entre lo que uno vive y tiene por normal y lo del otro abre expectativas, choques, enriquecimiento mutuo. Conocer a tu pareja no es solo descubrir a una persona de la que enamorarse, sino toda una forma de comportarse ajena que, a veces, fascina, y, otras, provoca enfrentamientos.

Para que el final feliz sea creíble, tendrán que haber aprendido el uno del otro y aceptarse tal cual, sin que ninguno de los dos se imponga al otro.

Si pertenecen a poblaciones rivales, puede aparecer junto al tópico de «enemigos a amantes», o con una venganza de por medio. Puede tratarse también de «segundas oportunidades»: personas a quienes sus familias separaron de jovencitos y ahora se reencuentran y se dan cuenta de que su procedencia ya no es tan importante.

Ojo, puede ser un campo de minas si no se trata bien. Es muy fácil caer en el estereotipo y de ahí al prejuicio va solo un paso. Es lo que, creo yo, ocurre con muchas autoras anglosajonas. Me rechinan los dientes cuando ponen a alguien de cultura mediterránea (griego, italiano, español, francés) y es un puro cliché. Verbigracia, la ya mencionada Sarah Morgan.

Como dice un buen amigo, ninguno somos cultura con patas, que luego cada uno tenemos nuestra personalidad. Ni a todos los españoles nos gustan los toros y el flamenco, ni todos los franceses visten boina y camiseta a rayas. No hay nada más ridículo y pobre que construir un personaje solo en torno a su nacionalidad, idioma, religión o color de piel.

Cuando se hace bien, sin embargo, resulta muy enriquecedor. La narrativa de género es un tipo de ficción que tiende a repetir caminos trillados. Así que protagonistas diversos aportan originalidad, un poquillo de aire fresco.

Por subgéneros

Creo que predominan las novelas contemporáneas con personajes distintos, reflejo de las sociedades actuales: más abiertas y complejas. Claro que no faltan históricas de muchacha anglo que marida con un buen o mal «salvaje», ¡incluso hay fantasía o ciencia ficción entre personas de especies antropomorfas distintas!

Mis preferidas de este tema

Voy a empezar enumerando las que he comentado aquí en mi blog y más me han gustado.

Destacaría la serie contemporánea de Forbbidden Hearts de Alisha Rai. Al hablar de la primera, comenté: «La diversidad es un plus añadido, personas todas estadounidenses pero de diferentes culturas, ¡japonesa! ¡¡pakistaní!! ¡¡¡griega!!!». Mis mejores puntuaciones fueron para Hate to want you (7/2017)  y Wrong to need you (12/2017).


Luego tenemos a Talia Hibbert y su habitual esquema de BWWM (Black Woman White Man), alguna vez con BWAM (Black Woman Asian Man). La que más me ha gustado ha sido A girl like her (2018) aunque me ha parecido estupenda la historia gay de Olu, Work for it (2019).

También es diverso el elenco de la serie Cyclone, NA de Courtney Milan. En la primera, Trade Me (2015),  él es anglo y ella de origen chino; reaparecen en The year of the crocodile (2015). En la segunda, Hold me (2016) ella es de ascendencia hispana y él chino-tailandés. Estupendas las tres.

Inolvidable me resultan los Troubleshooters de Suzanne Brockmann: Roger/Ringo/Sam es blanquito y la heroína, Alyssa, mulata, una de mis parejas preferidas de romántica ever. Su novela es Gone too far (Demasiado lejos, suspense de 2003), pero su romance se coció a fuego lento (con estallidos muy sensuales) en los libros precedentes.  Brockmann repite pareja diversa en Some kind of hero (suspense de 2017), ella es morena y él no. 

En español no puedo pasar por alto la fantástica trilogía Caballo de fuego de Florencia Bonelli, protagonizada por un chico que es franco-saudí-argentino y una muchacha argentina: 1 Caballo de fuego: París (2011, suspense), 2 Caballo de fuego: Congo (suspense, 2011)  y 3 Caballo de fuego: Gaza (2012). Nunca la recomendaré lo suficiente: un paisaje, un paisanaje y una perspectiva que jamás encontrarás en una novelista anglosajona.

Otras contemporáneas con protagonistas de origen diferente que me han encantado son:
·         Cheryl Reavis: A crime of the heart (1988, contemporánea) SSE-487; amish/anglo. 
·         Linda Howard: MacKenzie’s mountain / Lecciones privadas (1989). SIM-281 / Los Mackenzie #1. Él indio-escocés, ella anglo. 
·         Ruth Wind: Meant to be married (1998) SSE-1194, hispano/anglo. 
·         Shamim Sarif: I Can't Think Straight / No imagino otra vida (2008, lesbi) palestina-cristiana / británica de origen hindú-musulmana. 
·         Maisey Yates: The highest price to pay / Atraída por su enemigo (2011) MMR-1102; Franco-malauí/estadounidense anglo. 
·         Meg Maguire: Taking him down (2013) HBZ-762; hispano/anglo. 
·         Rainbow Rowell: Eleanor & Park / Eleanor y Park (2013, juvenil) ella anglo y él de madre coreana. 
·         Helen Hoang: The Kiss Quotient / La ecuación del amor (2018, contemporánea) The Kiss Quotient #1; vietnamita-sueco/anglo. 
·         Christina Lauren: Josh + Hazel’s guide to not dating (2018) surcoreano/anglo. 
·         Sierra Simone: Sinner (2018) Priest #2; blanco/negra. 
·         Nalini Singh: Rebel Hard (2018, contemporánea) Hard Play #2; aquí los dos son hindúes de origen fiyiano y el contraste es más bien de mentalidad, él tradicional, ella moderna. 
·         Rebekah Weatherspoon: Rafe (2018) Loose Ends #1; blanco/negra. 
·         Lucy Parker: Headliners (2020, juvenil) negro/blanca. 


Vamos a por las históricas «diversas»:
·         M. M. Kaye: The Far Pavillions / Pabellones lejanos (1978, siglo XIX) Inglés/indio-rusa. 
·         Meredith Duran: The Duke of Shadows / El duque de las sombras (2008, siglo XIX) Un-cuarto-de-hindú/inglesa. 
·         Sherry Thomas: My Beautiful Enemy (2014, siglo XIX) inglés/sino-inglesa 
·         Alyssa Cole: "Let it Shine" en la antología The Brightest Day (2015, siglo XX) judío europeo/afroamericana. 
·         Sandra Schwab: The Centurion’s Choice (2016, siglo II/gay) Eagle’s Honor #2.5; romano/sirio.
·        KJCharles: Wanted, a Gentleman (2017, siglo XIX/gay) negro/blanco. 
·         África Ruh: Una sombra en la aljama (2017, siglo XV) judío/cristiana. 

Y por citar ejemplos de otros géneros:

·         Meljean Brook: The Iron Duke (2010, paranormal) The Iron Seas #1; anglo/mongola. 
·         Grace Draven: Radiance (2015, fantasía) Wraith Kings #1; kai/gauri.

Otras muy apreciadas

Pero vamos, que en estas listas de gentes diversas, encontraréis unos cuantos muy valorados por los lectores de romance.

Empiezo por dos de Barbara Samuel:
·         A Bed of Spices (1993, histórica/medieval) Judío/germano-católica.
·         The Sleeping Night (2012, histórica/Oeste) Negro/blanca.

Sigo con dos de Catherine Anderson:
·         Comanche Heart / Corazón comanche (1991, histórica/Oeste) Comanche #2; indio americano/anglo
·         Comanche moon / Luna comanche (1991, histórica/Oeste) Comanche #1; medio comanche/anglo. 

Lisa Kleypas presentó un par de adorables (aunque, en mi opinión, nada convincentes) gitanos o roma, enamorando a sendas Hathaway:
·         Seduce Me at Sunrise / Seducción al amanecer (2008, histórica) Los Hathaway #2. 
·         Mine till midnight / Tuya a medianoche (2007, histórica) Los Hathaway #1

También Mary Jo Putney nos ha regalado al menos dos novelas con protagonistas diversos:
·          Angel Rogue / Ángel o Bribón (1995, Regencia) [Reescritura de The Rogue and the Runaway, 1990] Fallen Angels #4; Inglés/anglo-mohawk.
·         Thunder and Roses / Tormenta de pasiones (1993, histórica) Ángeles caídos #1; gitano-inglés/anglo. 

Y acabo con un puñadito de novelas románticas en las que también se da ese elemento de multiculturalidad.

·         Judith McNaught: Tender triumph / Un extraño en mi vida (1983, contemporánea) Portorriqueño-estadounidense.
·         Tom & Sharon Curtis: Sunshine and Shadow (1986, contemporánea) Anglo/amish
·         Kathleen Eagle: Reason to believe (1995, contemporánea) Lakota/anglo.
·         Sandra Kitt: The color of love (1995, contemporánea) Blanco/negra. Un clásico.
·         Deanna Raybourn: Silent on the moor / Tiempo de pasión (2009, misterio histórico) Lady Julia Grey #3; medio gitano/inglesa.
·         Pamela Clare: Naked edge / Sombras de sospecha (2010, suspense) I-Team#4; Anglo/navaja

·         Ellen O’Connell: Eyes of silver, eyes of gold (2010, Oeste) medio cheyenne/anglo.
·         Amy Lane: Selfie (2016, contemporánea/gay) Bluewater Bay #13; negro/blanco.
·         Cat Sebastian: A gentleman never keeps score (2018, histórica/gay) Seducing the Sedgwicks #2; negro/blanco. 
·         Talia Hibbert: Get a life, Chloe Brown (2019, contemporánea) The Brown Sisters #1; blanco/negra.

No es un tópico tampoco para todo el mundo, hay gente que solo quiere ver a «los suyos» en obras de ficción y encontrarse a alguien diferente es un desafío que les incomoda. Lo entiendo y lo respeto, cada uno tenemos nuestras manías, prejuicios y limitaciones: soy consciente de que yo también padezco prejuicios y hay gentes a las que no quiero ver ni en pintura.

Al fin y al cabo, hasta el refranero ve con desconfianza los emparejamientos entre personas distintas. Es un problema que tenemos los humanos y hay que ir superándolo.

Una buena forma de empezar a respetar y conocer al otro es precisamente la ficción. Yo, desde luego, agradezco la diversidad.

Este es un tipo de emparejamiento que ha sido tratado en muchas otras novelas. He traído solo un puñado para ver lo diverso que puede ser el género.

Mi pregunta es, ¿es este uno de vuestros tópicos favoritos? ¿O no os hace tilín?

Y, como siempre, si hay alguna sugerencia que queráis hacer, de novelas que tratan a vuestro parecer particularmente bien este tópico, la zona de comentarios es toda vuestra.

Si queréis profundizar en el tema y encontrar otros libros con este tópico, en español he encontrado la lista de «temática interracial» en Cazadoras del romanceEn inglés, hay listas con el tópico intercultural en AAR Special Lists (Inter-Ethnic Romances),  y en Addicted to romance solo he encontrado la entrada Native American Heroes. En Goodreads sí que hay la balda del «Interracial Romance»

Reconozco que hablar de «razas» siempre me ha sonado un poco «obsesión Pantone».  Hasta donde yo sé, las razas, biológicamente, no existen; serían más bien constructos sociales sobre los que asentar una ideología concreta, el racismo. Aprovechando que el Pisuerga pasa por Valladolid, me voy a la desembocadura y os cuento que, hace poco, me llamó mucho la atención un vídeo de Mariebelle TV, una mejicana que vive en Alemania. Pensaba yo que esa manía por el tono de piel era como muy estadounidense, y va a ser que no. Si queréis saber quién está más obsesionado con el tono de piel, si los mexicanos o los alemanes –al menos según su experiencia personal–, os dejo el enlace. Es una mujer encantadora, por cierto.