El encuentro
más accidentado de la historia
DATOS GENERALES
Título original: Slap shot
Subgénero: contemporánea
Publicación: 2022
Parte de una serie:
Lauderdale Knights #1
Páginas: 214
NO TRADUCIDA AL ESPAÑOL
SINOPSIS (según Fiction Data Base)
Bienvenidos a Fort
Lauderdale, donde los días son calentitos y los Caballeros aún más...
Vaughn: puede que esté jugando de fábula, pero un nuevo comienzo
parece lo mejor para este momento de mi carrera. Unirme a los Caballeros de Lauderdale
ha sido una gran decisión, y estoy listo para conquistar esta ciudad. En la
noche de apertura, la multitud enloquece... y también mi slap shot. Dejar inconsciente a una aficionada no era la presentación
que me imaginaba. Especialmente cuando le echo la vista encima a mi hermosa
víctima. El problema es... que está comprometida.
Juliet: Despertarme con una conmoción cerebral y amnesia me hizo
darme cuenta de que cuando se trata de vivir la vida en mis términos, es ahora
o nunca. Mi gran familia italiana tiene buenas intenciones, pero es hora de que
dejen de tomar las decisiones por mí. Ahora, si pudiera deshacerme de mi
prometido, renunciar a mi trabajo y dejar de babear por el atractivo jugador de
hockey que me hizo entrar en razón, la vida sería perfecta. Excepto que nada en
mi vida es perfecto... ni siquiera el más nuevo MVP de Lauderdale.
¿Entra dentro
de “Lo mejor de la novela romántica”?
No, estaría como mucho entre las veinte mil mejores, gracias a que
tiene un poco de un tópico bien atractivo, que es la amnesia.
CRÍTICA
Pues también hay hockey MF, no todo
van a ser male/male romances. Así que
que cuando vi que ofrecían esta novela como un freebie en alguna de las listas de correo en la que estoy apuntada,
no lo pensé y la bajé a Book Funnel.
(Freebie = regalo
promocional. Ya sabes, te regalo una novela y luego, si te gusta, te compras el
resto de mi bibliografía).
((Yo ahí lo dejo)).
Esta novela empieza con el meet cute menos cute de la historia.
Juliet Cicero (25) está
entusiasmada porque, ¡por fin!, hay en Fort Lauderdale un equipo de hockey profesional. Es una expansión, un
equipo nuevo que se está formando. ¿Cómo va a faltar ella al partido inaugural?
¡Si hasta se ha comprado un pase de temporada…!
Una de las estrellas de este equipo
es Vaughn Elliott (26), que coge la
pastilla con rapidez, y…
La primera escena entre Juliet y
Vaughn acaba con ella en el hospital, amnésica.
Aunque ha sido algo accidental, el
equipo aconseja a Vaughn ir al hospital, eso da buena imagen.
Juliet, confusa y amnésica, no
recuerda quién es, ni conoce a su familia, ni mucho menos quién es este tiarrón
tan atractivo que aparece en su habitación de hospital.
Ahora, lo que ve de él, le gusta. Y
el sentimiento es mutuo. Es cosa de conocerse, y saltan chispas.
A pesar de esas buenas vibraciones,
no parece el momento oportuno para nada, porque Juliet está comprometida y
además se está recuperando. En unas semanas, se va a casar.
Lo de la boda es todo muy loco,
porque su familia, italiana y tradicional, toma las decisiones por ella. Y lo
mismo hace su prometido. Juliet es incapaz de enfrentarse a ellos, decir que
no.
Ahora, este incidente y sentir lo
que siente por Vaughn le hace replantearse las cosas.
Vaughn también tiene sus propios
problemas familiares. Madre fallecida, padre ausente que dirige un club de
moteros con problemas legales… De repente, este tipo aparece en la vida de
Vaughn. Es lógico que él desconfíe, no sabe qué es lo que quiere de él…
No solo se trata de ver cómo estos
se lían, sino de ver cómo superan las complicadas relaciones familiares.
De este libro recuerdo sobre todo
las escenas sexis, que sin tener nada raro o infrecuente, no sé por qué me
parecieron muy apasionadas.
Hay mucho tópico italiano con Juliet
y sus hermanos, y su madre. Más de una actitud se explica diciendo: Italian, Catholic. Guilt.
Aparecen personajes que deben ser de
series anteriores de Kat Mizera, y no siempre me parece que vengan a cuento.
Me quedo también con un momento en que Vaughn se cabrea de verdad con Juliet. No es que la agreda, ni la insulte ni nada, ¡eso sería horrible...!
No, lo que me gusta es que, en un mundo tan políticamente
correcto, en que todo es muy chupi yupi y kumbayá y los héroes son eternamente
comprensivos y pacientes, hasta el punto de que a veces parecen ellos los
felpudos… ¡Por fin hay un tipo normal...! Reaccionaría de forma sensata, como el macho medio
diciendo algo así como «mira, te quiero pero ya no puedo más con esto, cuando
te aclares, me avisas. Hasta otra».
Igual exagero, pero me parece que de
un tiempo a esta parte en contemporánea o es todo muy de extremos: o irrealmente blandito y suave, o con reacciones desproporcionadas, con la madurez emocional de un adolescente.
En 2020 hubo un hilo dedicado a
Kleypas en All About Romance, «The ask@ARR: What do we think about Lisa Kleypas?». Dijo una lectora que «la mayor
parte de los romances históricos actuales no parecen tener mucho tirón
emocional tampoco, y no parecen quedarse mucho en tu corazón».
Dabney Grinnan replicó: «Estoy de
acuerdo de que la gran mayoría de los romances actuales, en todos los géneros,
son más blandos de lo que a mí me gusta. Tal como yo lo veo, es la consecuencia
natural de escribir de manera que no ofendas a nadie. Si tus protagonistas
tienen que estar libres de toda culpa, y tu escritura, libre de riesgos, es
difícil escribir historias con tirón».
Igual es una influencia del
movimiento woke, que yo he visto
permear la romántica histórica desde que Trump ganó las elecciones en 2016. De repente
no bastaba escribir una historia atractiva, había que hacer activismo.
Igual no tiene nada que ver y es
solo un prejuicio mío, que no me gusta que me sermoneen, ni siquiera con ideas
que comparto.
Todo tiene que ser tan políticamente correcto, que los héroes y las heroínas tienen poco margen de actuación para darle un poco de garra a sus historias.
Parece que la gente nunca tiene un mal
día, una mala respuesta, un momento de decir «joder, basta ya, lo dejo». No me
refiero a agresiones, ni insultos o amenazas, no, me refiero simplemente a algo
muy humano que es que no puedes ser perfecto el cien por cien del tiempo.
En esta novela he encontrado a gente real, tanto los protagonistas, como sus familias, tienen sus debilidades, sus obcecaciones, momentos de decir basta y otros muy tiernos, con tiempo para rectificar.
Hasta el prometido de Juliet podría ser un mal bicho y no, es solo
que la familia (y a veces también Juliet) no lo acaban de desengañar, algo
lógico cuando se conocen de toda la vida.
Como es habitual en la contemporánea
actual, se cuenta en estilo NA. Aquí sí que diferencias las voces, gracias a
que Juliet y Vaughn tienen personalidad y problemática propias.
En resumen, una novela que me resultó
algo especial y no estoy del todo segura de por qué. He intentado decir lo que
más me llama la atención, pero igual no es eso y simplemente es una novela bien
planteada y mejor ejecutada.
Me apunto el nombre de Mizera para
leer más cosas, al menos las que vengan recomendadas. O que estén baratitas,
porque sí tiene un precio algo alto para lo que suelo gastar.
Valoración personal: notable, 4
Se la recomendaría a: quienes de romances deportivos en la NHL
Otras críticas de la novela:
No he encontrado críticas
ni en español ni en inglés. Es lo que tiene ser una autora tan de tercera fila
como Kat Mizera. Ya sabéis que esto de primera, segunda, tercera fila no lo
digo en plan despreciativo, sino solo en relación con el bombo que tienen y lo
mucho que se las menciona y comenta.
En Amazon.com tiene 4,7 estrellas de media.
En Goodreads, 4,39.
Romance.io, 4,50 estrellas.
Aquí, los libros de Kat Mizera en orden.
Y página en Pinterest.
No he encontrado nada más, podéis creedme.