jueves, 27 de junio de 2019

Crítica: “Autoboyography”, de Christina Lauren


Dos chavales majos enamorándose en medio del fanatismo


DATOS GENERALES

Título original: Autoboyography
Subgénero: juvenil/gay

Fecha de publicación original en inglés: 2017

NO TRADUCIDA AL ESPAÑOL

SINOPSIS (según Fiction Data Base)
Hace tres años, la familia de Tanner Scott se trasladó desde California a Utah, algo que metió de nuevo al adolescente bisexual en el armario. Ahora, cuando solo le queda un semestre de instituto y ningún obstáculo entre él y la libertad de una universidad fuera del estado, Tanner planea pasar fácilmente las clases que le quedan y largarse de Utah.
Pero cuando su mejor amiga Autumn le desafía para que entre en el prestigioso seminario de Provo High –donde los mejores estudiantes diligentemente se esfuerzan en escribir un libro en un semestre–, Tanner no puede resistirse e ir contra su mejor juicio y darle una oportunidad, aunque sea para demostrar a Autumn lo tonto que es todo. Escribir un libro en cuatro meses suena sencillo. Cuatro meses es una eternidad.
Resulta que Tanner tiene razón solo en parte: cuatro meses es mucho tiempo. Después de todo, le basta un solo segundo para fijarse en Sebastian Brother, el prodigio mormón que vendió su propia novela escrita en el seminario el año anterior y que ahora es mentor de la clase. Y en menos de un mes, Tanner se enamora perdidamente de él.

NO TRADUCIDO AL ESPAÑOL

¿Entra dentro de “Lo mejor de la novela romántica”?
Sí, este libro entró mi lista de Las mil mejores novelas románticas, en la edición de 2019, en el puesto 441. Tuvo unas críticas fabulosas: DIK A, 5 estrellas en Joyfully Jay, Just Love, Scandalicious y We So Nerdy, por ejemplo. Es también uno de los favoritos de Natasha is a Book Junkie.

CRÍTICA

Con esta novela juvenil, casi NA, acabamos el reto 12 meses 12 boas propuesto por Elsa y A la cama con… un libro.
La historia nos la cuenta (casi entera) en primera persona Tanner, un chaval que vive en Utah, en una sociedad y un instituto mayoritariamente mormón. Se trasladaron allí desde California por motivos laborales de la madre, y eso ha exigido ciertos ajustes en su vida. Por ejemplo, que el bisexual Tanner se vuelva al armario para tener la fiesta en paz en un entorno tan conservador.
Tanner lo sobrelleva, más o menos. Hasta que se encuentra con Sebastian, un chico un año mayor que él, hijo del obispo y perfecto mormón, de esos muy educados, pulcros vistiendo, y que va a publicar su primer libro.
Duda de si el flechazo inmediato que él ha sentido, esa atracción, ese «vivo sin vivir en mí, no hago más que pensar en él»… ¿es cosa suya o el otro también lo ha sentido?
Y en esta duda se desarrolla todo el primer tercio de la novela. Considerando que no me gusta hablar de lo que pasa más allá de ese punto, por no destripar, poco más puedo decir del argumento.
Baste decir que Tanner es queer y más bien agnóstico, mientras que Sebastian pertenece a una religión en la que «tolerancia» se entiende en plan «miro a otra parte si solo eres gay, pero si además actúas como gay, entonces corto contigo», y en ese corto contigo está los amigos, la familia, la comunidad entera. Así que plantearse tener algo con alguien de esa religión es un poco locura, la verdad.
Yo estaba leyendo y la ambientación simplemente me dejaba alucinada. Era como si te estuvieran hablando de otro planeta, como si fuera una realidad paralela de esas de La invasión de los ultracuerpos o Las poseídas de Stepford,, o sea, son cuerpos humanos, pero dentro no hay más que alienígenas o robots, todos extremadamente educados pero completamente ajenos a cualquier realidad de la vida.
Un entorno de lo más asfixiante, la verdad.
Se hace muy cuesta arriba que haya sitios así de verdad y no haya una auténtica lucha por liberar a los niños de ese fanatismo. Me ha comentado mi hija que, al parecer el mayor número de suicidio juvenil en chicos LGBT se da precisamente en Utah, y no me extraña.
Eso te da la idea de lo lograda que está la ambientación, para que pueda agobiarte tanto. Han sabido trazar muy bien los personajes, especialmente los principales y sus familias; Autumn, la mejor amiga de Tanner es un poco más tópica, solo aparece como caja de resonancia de Tanner, sin ser un personaje propio.
El argumento se desarrolla más bien despacio.
El estilo me dejó algo descolocada. La mayor parte lo cuenta Tanner en primera persona; se supone que es el libro que él está escribiendo. Por otro lado, al final, pasa a narración en tercera persona.
Dos cosas me despistaron. Primero, que tanto cuando se supone que escribe Tanner como después, se usan las mismas palabras, idéntico tipo de frase y de ritmo. No hay diferencia de voz narradora entre un chaval de dieciocho años y las escritoras.
Segundo, se supone que es el libro que él está escribiendo, y no me parecía nada especial. Viene a ser «el diario de mi enamoramiento de un mormón», ¿y…? ¿Dónde está el mérito artístico que otros le encuentran?
Tenía esta novela pendiente de leer prácticamente desde que salió, tras leer críticas estupendas. Estaba carísima y por eso no la he leído hasta este reto, cuando no me ha quedado otra que apoquinar más de 10 euros en el e-book. En mi opinión, no los vale, ni de lejos, salvo que te vayan mucho este tipo de historias juveniles queer.
Aunque esto, como todo, es una apreciación subjetiva. Cada lector somos un mundo.
No tiene nada que ver con las otras cosas que he leído del dúo Christina Lauren. Aquello era erótica divertida y con personajes planos como lenguados; esto es literatura juvenil con poco sexo, a cambio de un estudio psicológico mucho más fino de los personajes.
Reconozco (y esto es algo puramente personal) que, como no me interesa la religión, leer sobre personajes creyentes me aburre bastante; y si encima son de esos que no solo se amargan la vida a ellos, sino que también se la amargan a los demás…Ya, mátame camión.
La última vez que me apasionó un personaje con dilemas religioso-morales como los que se plantean aquí, creo que fue Ed Harris en El tercer milagro (1999). Ya ha llovido.
Y porque era Ed, claro, uno de mis actores fetiche.
Con todos los caveats del mundo, puedo decir que lo he disfrutado y me ha gustado mucho. Creo que si eres religioso le pillarás más el gusto. Si eres joven y queer, necesitas este tipo de historias. Es fabuloso que las escriban.
Lo recomiendo, aunque mejor esperas a que baje un poco de precio.
Valoración personal: buena, 3

Se la recomendaría a: jóvenes LGBT

Otras críticas de la novela:

En español tenemos la crítica de Zona Ravenclaw
Y los 5 Gandys que le dan en A la cama con…un libro
En inglés, logró un DIK A en All About Romance.
5 estrellas merece según Joyfully Jay, Just Love, y en We So Nerdy.


               

Con esta novela termino el reto 12 meses 12 pares de boas. Resumo a continuación los libros que había que leer, con enlace a mis críticas (si las tengo).
1. Roan Parrish: In the middle of somewhere  🌟🌟🌟
2. Jude Sierra: What it takes 🌟🌟🌟🌟
3. Alexis Hall: Glitterland 🌟🌟🌟🌟
4. Dal McLean: Bitter legacy. Esta ya la había leído antes, 🌟🌟🌟🌟  así que la sustituí por una de Cat Sebastian, A gentleman never keeps score 🌟🌟🌟
5. Suki Fleet: Foxes. Este es el único que no leí, porque no pude conseguirla a un precio razonable. Todavía la tengo pendiente. La sustituí por Infamous, de Jenny Holiday, que en cualquier caso es más de mi gusto 🌟🌟🌟🌟🌟
6. Anyta Sunday: Leo loves Aries / Leo quiere a Aries 🌟🌟🌟🌟
7. Claire Davis & Al Stewart: The invasion of Tork 🌟🌟🌟
8. Garrett Leigh: Slide 🌟🌟🌟🌟
9. Joanna Chambers: Provoked 🌟🌟🌟🌟
10. Eli Easton: The mating of Michael 🌟🌟
11. Nash Summers: Arrows through Archer 🌟🌟🌟 
12. Christina Lauren: Autoboyography 🌟🌟🌟

Ya se ve que, en general, me han gustado. Elsa, que ha propuesto el reto, tiene ojo para novelas realmente bien escritas. Admito que mi gusto personal tiende a cosas menos tristonas. Creo que seguiré leyendo a Joanna Chambers y, quizá, a Anyta Sunday.
Gracias por organizar este reto que me ha servido para descubrirlas, y enhorabuena por descubrirnos tanto male/male romance de calidad.
En el lado negativo, y esto no tiene nada que ver con Elsa, me he percatado de que me incomodan un poco estos challenges de títulos concretos: este mes toca este libro. Me adapto mejor a retos abiertos, en que proponen un tema o un autor, y yo ya me busco lo que quiero leer. 

1 comentario:

  1. Muchas gracias por haberte sumado, Bona, me ha hecho mucha ilusión. A mí tampoco me gustan los retos en los que proponen un libro pero en este en concreto esa era la gracia, que Elsa propusiera títulos variados para ir probando diferentes cosas y que sirviera de punto de partida para continuar leyendo.
    Besotes y muchas gracias de nuevo.

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