Hace casi un
año que leí este libro y escribí esta crítica, y no he encontrado hueco hasta
hoy. Ya ni me acordaba que lo tenía pendiente.
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Leído en Kindle |
DATOS GENERALES
Título original: Talking Dirty
with the CEO
Fecha de
publicación original en inglés: mayo 2013
Subgénero:
contemporánea
Parte de
una serie: 1.ª de Talking Dirty
Páginas: 206
Editorial: Entangled Indulgence
CRÍTICA
Paso de poner la sinopsis de la editorial y entro directa a hacer la
crítica. Aparte de que no sé muy bien cuál sería el equivalente potable en
español de palabras como geek, mogul
o hottie CEO, no coincide del todo
con la historia tal cual yo la he entendido.
Joseph Ashton, el CEO del título (presidente
ejecutivo o director ejecutivo, para entendernos) está en una reunión de
trabajo con un compañero-amigo de la empresa que sale un momento a atender una
llamada.
Al bueno de Joseph, que le cuesta un poco concentrarse en las cosas, le da
por toquitear el ordenador de su amigo. Resulta que está en un chat de juegos
en línea, con el muy poco original nick de Studman
y conoce a la no menos trillada Naughtygirl.
El “Semental” y la “Chica traviesa” empiezan a tontear, a decirse cosas
subidas de tono a las que se refiere el título que en traducción libre sería
“Diciéndole guarradas al Director Ejecutivo”. Pero vamos, nada fuera de lo
normal, creo yo. Que qué llevas puesto, pues mira sujetador, liguero, medias
negras y… Ugg boots.
¿Eh? ¿Qué son las “Ugg boots”? Busqué en internet, y son esas zapatillas
que abrigan mucho porque tienen borreguillo. Ahora no caigo cómo se las llama
en español.
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Tal que esto, según wikicommons |
No parece muy sexy, pero teniendo en cuenta que ella le dice a él que lo
que debería ponerse es un tanga de piel de leopardo…
Entre insinuaciones sexis –u horteras, como se vea-, acaban quedando en un
bar.
Se conocen, se gustan, y tienen un lío de una noche. Los días siguientes se
los pasan pensando todo el rato en esa persona que les ha hecho sentir tan
especial.
La “Chica traviesa” es, en realidad, Christie
St. John, una friki que trabaja como periodista en temas tecnológicos,
juegos, informática, esas cosas. Viene de una familia pija y rica, en la que no
pega ni con cola, porque no es nada glamurosa. Alta y delgada, viste vaqueros y
calza Doc Martens. Le va el metal gótico y las camisetas negras, aunque también
tiene una con mi frase favorita de Yoda: “Do or do not. There is no try”.
Que aquí tradujeron como Hazlo o no
lo hagas, pero no lo intentes.
Mi lema.
Ninguno busca una relación, pero se reencuentran. Se dan otra noche, y luego
un fin de semana, y más tarde una semana,… tienen cosas en común como la
informática, salen juntos, hasta se van a montar en bici por los alrededores,…
por cierto que la autora vive en Auckland y también dice en su página web que a
veces “se ve obligada por su marido a andar en bici de montaña con él”. Así me
explico lo realista que es al describir el sufrimiento de pedalear por la
montaña.
Sus familias son bastante horrendas, alejadas de esa actitud tan idílica de
muchas novelas rosas. Se agradece. Porque aunque hay familias cojonudas,
también hay opresivas y humillantes, que destrozan la autoestima de cualquiera.
Los culebrones, teleseries y novelas que presentan a la familia como algo siempre
maravilloso me acaba pareciendo la verdadera “pornografía sentimental”.
La familia de Christie ni se interesa por ella, ni la valora. De hecho,
aprecian más a su ex novio, un cretino que le puso los cuernos. La madre en
concreto es un bicho frío que nunca tiene una palabra amable. Y aunque Christie
intenta que no la afecte pues, ¿cómo no le va a afectar? En un momento dado,
reflexiona:
“Su corazón era un felpudo que quería que Helene fuera
una madre de verdad. Una madre que estuviera orgullosa de su única hija”.
“Odiaba a su pobre, ingenuo corazón de felpudo por querer
algo que nunca iba a conseguir”.
Los padres de Joseph no son mejores. Padece trastorno por déficit de atención con hiperactividad y su comportamiento superó tanto a su madre que los
abandonó cuando él tenía trece años. Su padre le echó la culpa a Joseph.
Afortunadamente, su hermana Judith lo apoya y aprecia. Joseph cree que no está
hecho para una relación estable, que acabaría hiriendo a su pareja, dispersando
su atención en otras cosas.
Y ese es básicamente el conflicto de la historia, un conflicto emocional.
Tensión sexual mínima porque ya estaban dándole al tema desde el primer momento.
Se trata sobre todo de descubrir cada uno cómo es el otro, cómo consiguen
superar algunos traumitas personales gracias, precisamente, a esta relación
romántica. Así pueden acabar juntos, felices y relativamente funcionales.
Como veis, es una historia de amor sencillita, contemporánea. El formato es
tipo Harlequín, aunque aquí es otra editorial, Entangled: doscientas páginas
con millonario incluido.
Pero tiene como originalidad el que se ambiente en Auckland (Nueva
Zelanda), donde vive la propia autora, y en un entorno contemporáneo de juegos
en línea, tecnología, ordenadores,…
La verdad es que cogí esta novela porque me gustó mucho la novela erótica
que leí de Jackie Ashenden, Having Her,
y vi que estaba gratis en digital, así que me la bajé al kindle y me la leí
prácticamente de una sentada. Esta no es erótica, es simplemente una historia
de amor contemporánea, con sexo explícito, eso sí, pero nada rarito.
Es una historia sencillita que no creo que pase a los anales del género. Pero
me pareció muy bien contada y reconozco que tiene algunas cositas que me
gustaron especialmente, aunque son tan personales que no tienen por qué gustar
a otros.
1)
La
heroína friki despreciada por su familia que consigue crecer como persona precisamente
gracias a su relación con Joseph. Me tiene ganada ya con la camiseta que tiene
una de mis citas cinematográficas favoritas (bueno, mía y de todos los frikis, nerds y geeks del mundo mundial).
2)
Joseph
es un millonario con un problema real, nada estrambótico y con el que mucha
gente puede sentirse identificada.
3)
Se
sitúa Down Under, en el sentido
amplio del término, AUS + NZL.
Valoración personal: en su
género, cumple, 3
Se la recomendaría a: las
historias tipo Harlequín pero ambientadas en el mundo de hoy, y a todas las
frikis de este mundo, también ellas pueden tener su millonario.
Otras críticas de la novela:
No está
traducida, y como es simplemente una novela cortuca más, tampoco he encontrado
más que una crítica en inglés, Fiction Vixen. Lo consideran una lectura “mona”
y le dan una C, que
incluye como cita preferida de este libro, la siguiente:
“-Te mereces a alguien más rico. Mejor persona. Alguien
que nunca te decepcione. Que nunca te haga daño. Joder –él se río un momento-.
Te mereces a un hombre que pueda al menos concentrarse durante más de diez segundos
en una cosa.
“-Joseph…
“-Pero la cosa es que no vas a encontrar a un hombre que
te ame tanto como yo a ti”.
Hombre,
siempre tienes las críticas de Amazon y de Goodreads, pero esas nunca las
menciono porque doy por supuesto que todo el mundo conoce esos sitios.