Troubleshooters 14.º Todavía
estoy preguntándome por qué este libro es uno de los mejores de la serie.
DATOS GENERALES
Título original: Dark of Night
Fecha de publicación
original en inglés: 2008
Subgénero: suspense
romántico
Parte de una serie:
Troubleshooters #14
SINOPSIS (según
FictionDB)
Sólo un puñado de
personas en el mundo saben que James Nash está vivo.
Durante años, Nash realizó misiones “oscuras” ultra-encubiertas para una tenebrosa
agencia gubernamental. Pero cuando se alejó de su trabajo sucio, sus
despiadados jefes no estaban dispuestos a dejarle ir. Después de su intento de
asesinarlo casi tiene éxito, su antiguo compañero Lawrence Decker, con la ayuda del FBI, finge la muerte de Nash para
protegerlo.
Con Nash en secreto apartado en una casa segura, Decker lo arriesgará todo,
incluido su corazón, mientras emprende una carrera para resolver el misterio de
quien quiere ver muerto a Nash. Las pasiones estallan al tiempo que todos los
que están cercanos al engaño se encuentran luchando por sobrevivir.
¿Entra dentro
de “Lo mejor de la novela romántica”?
No entraría en las mil mejores, pero sí en las dos mil mejores novelas románticas. Tuvo una
crítica DIK A- en All About Romance.
Ganó la encuesta anual de esa página web en la categoría de mejor suspense
romántico y, con el resto de la serie Troubleshooters, está en el Top 100 que
en 2015 publicó NPR de series y novelas románticas.
CRÍTICA
Sabes que ha llegado el momento de
hacer un alto en la serie cuando uno de los libros considerados como mejores de
la misma te deja indiferente. Aunque este alto no se notará en el ritmo de
críticas en el blog, porque leo los libros y escribo las críticas con meses de
antelación.
El argumento, de nuevo, destripa por
completo el anterior, ya que gira en torno a algo que allí fue un punto
importante: la muerte del llamado Jimmy Nash.
La tengo apuntada como una de las
mejores de la serie y, digamos, la última en la que la autora se lució. De aquí
en adelante, parece que los libros han pasado sin pena ni gloria.
Claro que, considerando que yo voy
un poco a mi bola, igual resulta que mi apreciación personal es diferente y el
siguiente me encanta.
Vamos con el argumento, si es que le
puedo encontrar algún sentido. Esta es una de esas historias de Suzanne
Brockmann engordada por diversas tramas argumentales que para mi gusto no están
demasiado bien enlazadas. Saltas de un lado a otro como una ranita, sin tener
ninguna visión de conjunto que te permita colegir qué tienen en común, o a
dónde van. Respuesta: en realidad, convergen muy malamente.
La cosa empieza prácticamente en la
misma escena donde lo dejamos en el libro anterior, con Sophia seduciendo a
Dave y llevándoselo a la cama. Sophia ha aceptado que Decker nunca será para
ella, que ahora que Nash ya no está, tendrá su oportunidad con Tess, de manera
que se pone a mirar a ver qué otras oportunidades tiene y, oye, fíjate, que ahí
está su amigo Dave que durante años le ha servido de confidente y con quien se
lleva bien. Sexo y tal. Nunca una historia “de amigos a amantes” ha tenido para
mi menos tensión.
Van a visitar al padre de Sophia al
hospital. Un cabeza rapada ataca a Dave en el aparcamiento. Sólo que cuando
llega la policía el malo no está y sí, en cambio, un bonito cadáver apuñalado y
un arma con las huellas dactilares de Dave. Toda una trampa, como ya le pasó
otra vez, que le quisieron imputar la muerte de una antigua novia.
Pasemos a Decker. Se siente atraído
por Tracy Shapiro, la recepcionista de Troubleshooters. Tracy no es tan tontita
como parece porque se fija en las cosas, y piensa, y a ella hay cosas que no le
cuadran así que deduce, ella solita, que Nash está vivo.
La agudeza de Tracy le complica la
vida a Decker, que ahora tendrá que llevársela también consigo a un piso franco
(en realidad, un casoplón), aunque se distraen por el camino y puede que no
lleguen nunca. A pesar de que Tracy está dispuesta a intimar con Decker, él se
resiste cual virgen victoriana, como si fuera más mala que el hambre, o
portadora de alguna enfermedad, o algo así. Vamos, lo mismo que lleva años
haciéndose el mártir respecto a Sophia, en plan “aparta de mí este cáliz”.
Un tío de lo más cansino.
Es tan reprimido sexualmente que no
me extraña que cuando por fin se suelte acabe siendo del tipo raruno. Pero,
¿acaso eso hace que veamos escenas en plan novela erótica? Pues no. Ni siquiera
es un masoquista excitante.
Y finalmente tenemos a Nash. En su
casa segura (el piso franco que digo yo que es un casoplón), con su mujer Tess,
Jules el del FBI, su marido Robin que es quien la ha alquilado y sirve de
tapadera, Alyssa y Sam con su bebé... Y no sé si alguien más (¿Lindsey, puede
ser?), ya que esto parece el camarote de los hermanos Marx.
Nash se está recuperando poco a poco
de la herida que casi lo manda para el otro barrio. No se sabe muy bien si va a
rehacer o no su relación con Tess. La ama, pero tiene miedo por ella. Sam
revolotea por ahí con su bebé, hace que Nash le cambie el pañal (al bebé,
claro, no a Sam) y tienen “conversaciones sinceras de hombre a hombre”, sobre
sus sentimientos y temores, cómo vivir con una mujer que puede estar en
peligro. Si os digo que me pareció pueril y ñoño no me fusilaréis al amanecer,
¿verdad?
En su momento, este libro causó
polémica entre los seguidores de la saga porque esperaban que Decker y Sophia
acabaran juntos. Pero como han pasado unos años desde su publicación, yo ya
estaba advertida de por dónde iban los tiros y justo eso no me importó. No, mi
indiferencia fue más bien que ninguno de los héroes, Dave ni Decker, me parecieron
particularmente interesantes.
¿David? Un blandito, perfecto felpudo
que se resigna a quedarse con las sobras, un plato de segunda mesa. Sí, es un
chaval majo, pero tirando a soso, tan anodino que la autora le pone un final
así en plan superhéroe, para compensar, pero ni por esas.
¿Decker? A estas alturas de la
película, se me ha hecho ya un estirado insufrible. Un tipo súper recto que
sigue unas rígidas normas morales que él mismo se impone con la única
finalidad, al parecer, de sufrir, que es lo que le da placer. Pero ya digo que
tampoco en plan muy interesante.
A lo saltarín de la trama hay que
unir que salen un montón de personajes de lo más confuso si no has leído los
libros anteriores.
Aquí no encontré esa cualidad de
Suzanne Brockmann de agarrarte por el cogote y tenerte con la mirada clavada a
la página hasta que lo terminas.
Valoración personal: psé, 2
Se la recomendaría a: para seguidores de la serie.
Otras críticas de la novela:
No he encontrado críticas
en español, así que si alguien sabe alguna crítica, le agradezco si lo enlaza
abajo.
Como suele ocurrir con libros que gustan a todo el mundo, pero a mi no, recomiendo encarecidamente que le echéis una ojeada a las otras críticas, para tener una visión distinta y compensada sobre la historia.
En All About Romance, la calificación que le dieron fue DIK A-.
En Dear Author
también obtuvo una A-.
Y explican que
en “Flashpoint (TS#7), el libro de Tess
Bailey y Jimmy Nash, es donde empieza el arco argumental de Sophia Ghaffari,
Lawrence Decker, y Dave Malkoff. Bueno,
de hecho, parecía que empezaba el arco de Sophia y Decker, mientras que Dave era
sólo un secundario. Dark of Night es
TS#14, así que ha sido un maldito y largo arco y Dark of Night proporciona toda una culminación”.
Otra A- se lleva en la página The good, the bad and the unread.
En el blog The good, the bad and the bookish no le pone nota, pero parece que le gustó.
Y acabo con Don’t Talk Just Read, donde puede leerse una crítica conjunta de dos blogueras.