Novela con
niño (cualquiera lo diría, con esa portada), mñé, pero llevadero
DATOS GENERALES
Título original: Tied up, tied down
Subgénero: contemporánea/erótica
1.ª edición: 7/2008,
Samhain
Parte de una serie:
Rough Riders #4
Páginas: 265
ISBN13: 9781605042947
SINOPSIS (según Fiction DB)
Los vínculos más fuertes
son los que no se ven.
La empresaria Skylar Ellison
tiene un control firme sobre su vida. Así que liarse con un sexy vaquero de Wyoming y concebir un
bebé en el estacionamiento de un garito no entraba en sus planes. Como parece que
el padre de la criatura se ha ido en busca de pastos más verdes, lo único que
puede hacer es ponerse las botas y seguir adelante ella sola.
El ganadero Kade McKay regresa a
casa después de un año en el campo y queda desconcertado cuando descubre que es
padre de una niña de tres meses. Cuando Skylar se niega a casarse con él, Kade
aprieta los dientes, se muda a casa de ella, jugando a las casitas —según sus reglas— para
demostrar que es un hombre con el que ella puede contar a largo plazo.
A pesar de la insistencia de Skylar en que deben seguir siendo
estrictamente compañeros de crianza, sus viejas pasiones arden como un fuego de
maleza, lo que incita a Kade a exigir la rendición sexual absoluta de la
testaruda mujer. Skylar somete voluntariamente su cuerpo al vaquero de sangre
caliente, pero tiene miedo de entregarle a Kade las riendas de su corazón.
¿Podrá Kade convencer a Skylar de que sus perversos juegos sexuales no son
una distracción temporal? ¿O tendrá que romper las cuerdas para demostrarle que
quiere estar atado a ella para siempre?
¿Entra dentro
de “Lo mejor de la novela romántica”?
Pues la tengo bastante bien colocada en mi base de datos, en torno al
puesto tres mil. Tuvo crítica de A
en The Good, the Bad and the Unread, es considerada un Guilty Pleasures Purest
Delight y un favorito de todos los tiempos en romance.io, cinco estrellas para Simply Love Book Reviews y Under the covers.
CRÍTICA
Felizmente sigo yo leyendo, una a
una, estas novelas de los Rough Riders, aprovechando que están en Kindle
Unlimited, que se desarrolla entre vaqueros de Wyoming, en torno a la familia
McKay.
Un caso de identidad equivocada con gemelos idénticos, sexo sin protección en una camioneta y, ahora, un bebé secreto. Diablos, con tu papá vaquero desaparecido en combate, si me mudara a un remolque y comprara una escopeta estaríamos viviendo el himno sureño.
Ahora toca como protagonista a un
primo de los hermanos McKay, por parte de padre, Kade McKay (32). En el libro
anterior, Cowgirl up and ride, se vio
cómo Kade McKay se hizo pasar por su hermano mellizo Kane para enrollarse con Skylar
Ellison (34), una empresaria algo hippie
Skylar descubrió el engaño, se cabreó, pasaron otras desgracias y Kade se largó a pasar un año aislado con el ganado, en el monte, bueno, más bien pradera.
Ya sabes, el rancho de los McKay
tienen el tamaño de Las Palmas, y él se ha largado donde Cristo dio las tres
voces.
(En realidad, en la novela dicen que
Kade está a cargo de un rancho del tamaño de Rhode Island (4002 km²), pero como
eso nos deja igual, por eso digo lo de Las Palmas, isla con una extensión de
4066 km2, o sea, lo más parecido. Para que luego hablen del
latifundismo andaluz).
Por supuesto, un año sin móvil, sin
internet, sin nada,… A lo que se ve.
Ojo, que él no lo dio por perdido y
le mandó una carta por correo de ese del viejo de toda la vida, en papel, a
Skylar, sobre lo mucho que querría una segunda oportunidad.
Pero eso, ¡ay!, a ella nunca le
llegó, así que anda un poco de morros. Tampoco pasa nada, es empresaria con
pequeño negocio propio. Podrá hacerse cargo de su criaturita.
Sólo tú y yo, criatura.
Y no le falta humor a Skylar cuando
resume lo ocurrido casi como si fuera un culebrón televisivo:
Un caso de identidad equivocada con gemelos idénticos, sexo sin protección en una camioneta y, ahora, un bebé secreto. Diablos, con tu papá vaquero desaparecido en combate, si me mudara a un remolque y comprara una escopeta estaríamos viviendo el himno sureño.
A la vuelta del experimento
ganadero, Kade descubre que de aquel rollo ha nacido una criaturita que ahora
tiene tres meses.
Entre que sigue coladísimo por Sky y
que no quiere ser padre de fin de semana, se mete a vivir en casa de Sky la
cual no le dice que no. Como lo oyes. Un año sin verse y como quiere contribuir
a la crianza de la nena, se va a vivir con ellas. Como sigue trabajando en el rancho, se da unas palizas tremendas
yendo y viniendo del rancho a casa de Sky y a la inversa.
Como es novela con niño no es que la
cosa me entusiasme mucho.
Pero bueno, es llevadero.
Pasa lo habitual: que la criatura
desaparece en los momentos oportunos. Ahora, en comparación con otras novelas de bebés me parce bastante realista. Notas lo que es, de verdad, tener un bebé, el agotamiento, la falta de sueño,
los llantos,… o sea, que sí, que son muy monos, los queremos mucho, el amor por
nuestros hijos es tan inmenso que estás vendido de por vida, pero… también está
toda esa parte que es simplemente extenuante.
Con esta novela me pregunto
exactamente de qué género estamos hablando con esta serie. O, digamos más bien, si realmente
esto es erótica o solo contemporánea subida de tono.
Supongo que depende de cómo definas
la erótica. Si se trata solo de que haya muchas escenas de sexo explícito con
alguna rarunez, pues sí. Aquí hay erótica porque Sky y Kade le dedican mucho
tiempo y ganas (lo que les dejan sus trabajos y la nena) a tener unas gozosas
relaciones sexuales, con su punto de dominación, porque Sky es una mujer
hiperresponsable, que tiene que controlar todo. Su hermana India simplemente
alucina:
Esos hombres McKay tienen reputación de hombres salvajes y mujeriegos, borrachos y pendencieros y no puedo creer que mi hermana, la puritana, se mezcle con uno de ellos.
Ya, ni ella se lo explica.
Kade es tan dulce y tan sexy, y, además, es de agradecer que alguien tome las riendas en
ese aspecto de su vida, el sexual.
Kade es un cielo, esta por ella, hace de todo por Sky, la apoya, la defiende, le da unos orgasmos de miedo,... Ella, sin embargo, «doña Erre que Erre», que no. Por sus propias inseguridades.
Llega un momento en que Kade se
plantea que quizá le gustaría que, por una vez, alguien pensara que merece la pena luchar por él.
Pero a lo que voy, si entiendes ese
subgénero, la erótica, como un tipo de novela en que los personajes evolucionan
a través del sexo, que éste haga avanzar la trama, pues entonces no. Aquí, si
quitaras esas escenas o hicieses fundido en negro, la novela seguiría
funcionando igual, por la ternura y el enamoramiento entre Sky y Kade.
Eso sí, son escenas que hacen bonito.
Valoración personal: buena, 3
Se la recomendaría a: quienes gusten de historias tiernas con bebé secreto.
Otras críticas de la novela:
No he encontrado nada
en español.
Enlazo a las de por ahí
afuera, tampoco mucho, porque Lorelei James es poco comentada en las páginas
habituales. Allá donde la leen, eso sí, les gusta.
The Good, the Bad and the Unread, una A.
Simply Love Book Reviews/Guilty Pleasures, 5 estrellas.
About That Story, 4 estrellas.
KD Did It, 4 estrellas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario